BRASIL Y MÉXICO: UN ESTUDIO COMPARADO.
Autor: Tomás Vera Ziccardi.
En el siguiente trabajo se analizará la historia de Brasil y México por
separadas en el tiempo comprendido desde la época colonial (para tener una
breve introducción al trabajo en sí y para poder entender los procesos que
analizaré) hasta la actualidad. Una vez
finalizado el análisis particular y por separado de cada país se procederá a la
contrastación de ambos de acuerdo a los procesos por los cuales atravesó
América Latina en perspectiva histórica. Para la comparación se parte de la
idea que ésta contrastación nos permite ver la realidad actual de dos de las
tres grandes potencias Iberoamericanas.
Teniendo como hipótesis las similitudes que encontramos de acuerdo a la
concepción imperialista desde un principio en ambos países. Se analizará la influencia
positivista en ambos países, la influencia extranjera que tuvo lugar en cada
país y como llevaron a un desarrollo diferente al de otros países de la región.
La aceleración del proceso populista en ambos países, la rápida adaptación a un
modelo industrial totalmente nuevo, pero facilitado por la gran población que
ostentan México y Brasil. El rol de las élites desde temprana edad en cada
país. Aquí se analizarán los cambios a los cuales tuvieron que adaptarse éstas,
su aparente abandono del poder y el control que tenían sobre los recursos
productivos en cada país. La llegada de los populismos en ambas naciones. El varguismo en Brasil, el rol del Partido
Revolucionario Institucional en México, la década de los ‘70s en ambas
naciones, la crisis de la deuda y los duros años ‘80s, la influencia del
neoliberalismo en dos de las naciones más importantes del continente americano,
sus alcances e implicas y luego analizaremos la realidad mexicana y brasileña
en las últimas dos décadas para poder explicar sus actuales situaciones. Como
última hipótesis (considerando que no es la que presenta mayor importancia para
éste trabajo en particular) me encargo de analizar las diferencias entre un
país que estuvo bajo control colonial luso y otro que perteneció a la Nueva
España. Junto con la diferencia que
encontré de acuerdo a los procesos migratorios en cada país. Con respecto a
ésta última hipótesis no le quiero restar importancia, ni dar a entender que no
fue propiamente analizada, sino todo lo contrario, bajo mi consideración es un
factor subjetivo a la hora de dicho análisis.
Por último me gustaría aclarar que estas hipótesis no son lo único que se
desarrolla en el trabajo, si no que sirven como principales tópicos a la hora
de comprender el trabajo.
Brasil y los pasos previos para lograr
la consolidación del Estado-Nación.
Para comenzar a
hablar de Brasil necesitamos mencionar cuales eran sus principales
características, las cuales las diferenciarían desde un comienzo del resto de
la región. El Brasil colonial siempre se caracterizó por ser muy populoso,
poseía una amplia población, en gran parte constituida por los aborígenes
nativos, los africanos que eran traídos como esclavos para trabajar la tierra,
y por los portugueses que estaban a cargo de la tierra y del comercio
principalmente con Gran Bretaña, que a su vez poseía comerciantes en el
territorio. El proceso que lleva a la independencia en Brasil es muy diferente
al que toma lugar en la América Española en primer lugar por lo antes
mencionado acerca de su gran población y por otro lado por su poderío económico
en gran parte apoyado por Gran Bretaña. Brasil era un gran productor de
materias primas las cuales beneficiaban a los británicos y a los portugueses (históricos
aliados) para el comercio.
En el contexto
de la invasión Napoleónica a la Península Ibérica, la situación era amenazante
para la corona portuguesa ya que era aliada de Gran Bretaña. Esta invasión
provocaría el traslado del regente Dom Joao y su corte hacia su colonia en
Brasil durante 1808. De esta manera Brasil se convertía en Metrópoli y se ponía
fin al monopolio colonial, abriendo así los puertos brasileños al comercio.
Luego de la
derrota napoleónica resultaba difícil volver a trasladar la Corte a Lisboa, e
imposible restaurar la situación colonial anterior. Por lo cual el monarca
decide permanecer en Brasil y eleva así el país a la condición de Reino, en
situación de igualdad con Portugal, cuyo gobierno se confiaba a un gobierno de
regencia.
La revolución
liberal de 1820 exigió a Dom Joao que regresara a Lisboa. Ante el riesgo de
perder sus dominios en Europa el monarca acepta el retorno y decide dejar en
Rio de Janeiro a su hijo Pedro como regente.
Las Cortes
portuguesas pretendieron de nuevo reducir a Brasil a la condición de colonia,
lo cual condujo a los brasileros a organizar movimientos independentistas; el
regente proclamó la independencia, "El Grito de Ipiranga", el 7 de
Septiembre de 1822. Fue coronado en Rio de Janeiro como Pedro I, Emperador
Constitucional del Brasil. La debilidad militar de Portugal nos permite
observar como la lucha de Brasil por la independencia fue menos bélica y
sangrienta que en la América Española. Los rebeldes brasileros no se
dividieron, permanecieron unidos a sus ideales, y por su parte la élite
prefería una monarquía a una república.
Habiendo
señalado estas características podemos decir que en Brasil la independencia no
se puede asociar con hazañas militares tales como las que tomaron lugar en las
colonias españolas ya que la adopción de una monarquía imperial como forma de
gobierno, evitó un conflicto armado con la metrópoli.
De esta forma
Brasil continuó con su actividad productiva, mantuvo su estabilidad política y
la integridad de su territorio.
En el año 1831,
Pedro I abdicó a favor de su hijo Pedro II. Durante el reinado de este último
(1831-1889) la población y la economía se expandieron con tasas sin
precedentes. A su vez la política exterior de Brasil se opuso a los regímenes dictatoriales
de sus vecinos. También comenzamos a ver el avance significativo hacia el
establecimiento de un Estado-Nación efectivo. A continuación cito el Artículo I
de la Constitución del Imperio del Brasil, para mostrar el ideal y la visión
que tenía el gobierno. "El imperio del
Brasil es la asociación política de todos los ciudadanos brasileros. Ellos
forman una nación libre e
independiente, que no admite, como cualquier
otra, lazo alguno de unión o federación, que se oponga a su
Independencia".
En 1889 Pedro
II fue derrocado por un golpe de estado dirigido por la oligarquía terrateniente
y el clero. Aquí ya podemos comenzar a observar no solo la aparición de esta
élite brasilera, sino también de la Iglesia, que ya desde tempranos momentos
comienza a jugar un rol importante en la toma de decisiones. Las medidas progresistas
y antiesclavistas de este monarca habían provocado el descontento de las clases
poderosas sin que hubiera conseguido el apoyo político de los sectores medios.
Ya para 1891 se
proclama la República, dejando así el Imperio, y se promulga una Constitución
de carácter Federal; pero el proceso democrático de Brasil se vería
obstaculizado por guerras civiles y cambios de gobierno que rompían la
estabilidad política.
La élite
brasileña buscaba mantener su poder mediante la conformación del Estado. Un
Estado que ejerciera poder sobre la población y que defendiera las aspiraciones
conservadoras de su élite.
Etapa de formación del Estado-Nación.
La influencia positivista.
Uno de los
artífices de la rebelión que derrocó a Pedro II y a su régimen monárquico, fue
Manuel Deodoro da Fonseca quien sería elegido como el primer presidente de
Brasil. Sin embargo los primeros años de la Nación estuvieron marcados por los
clivajes políticos que permitiría la entrada de un nuevo actor como lo fueron
las fuerzas armadas.
El nuevo estado
también cumpliría un rol importante en cuanto a lo económico. La actividad
exportadora principalmente de cultivos de café, caucho y azúcar le permitiría a
Brasil tener un crecimiento sustentable. Las Haciendas, que venían jugando un
rol importante desde la época colonial continuarían expandiéndose por el vasto
territorio, pero ahora el gobierno les entregaría pequeñas parcelas a los
productores. A esa diferencia en cuanto a la administración de la tierra, también
se le suma la mano de obra de los trabajadores agrícolas. Con la abolición de
la esclavitud en 1888 muchos hacendados perdieron un importante número de trabajadores,
por lo cual se necesitaba pagar salarios a aquellas personas dispuestas al
trabajo que ya no sería tan forzoso como durante la época colonial. De esta
forma un gran número de inmigrantes europeos, principalmente los italianos, trabajarían
en la tierra.
Por otro lado
la ampliación de las regiones cafetaleras a lo largo de todo el país permitió
el avance en la infraestructura de transportes y comunicaciones, destinada a
conectar los campos donde se encontraban los cultivos con las ciudades y los principales
centros comerciales. De esta forma el crecimiento de las grandes ciudades
comienza a tomar gran importancia, así es como ciudades de la talla de Sao Paulo
y Rio de Janeiro gozan de gran crecimiento económico, demográfico y de infraestructura.
Varios
inmigrantes italianos se destacarían por su labor en la industria del café, generando
el fortalecimiento de esta actividad económica que sería de suma importancia
para Brasil.
Por otra parte
la histórica relación con Gran Bretaña le permitió a Brasil comenzar a producir
bienes manufacturados con nuevas y modernas maquinarias. Aunque la principal
actividad económica de la Nación estaría en el café, el caucho y el azúcar.
Durante el
positivismo observamos que la oligarquía mantenía el control en el ámbito
político, por eso decimos que era de carácter conservador, esto se traduce en
que no había una amplia participación por parte del resto de la población, había
escasa representación pero no ejercía ningún tipo de relevancia. En lo económico
vemos como Brasil tiene un gran crecimiento, que si bien durante 1910 con la
caída de los precios en el mercado mundial sufre una crisis económica que se
tradujo a lo político con revueltas y cambio de gobiernos, le da un
posicionamiento en el mercado exterior.
De a poco
Brasil quiere comenzar a jugar un papel no solo en el mercado mundial sino también
el la política internacional, tal es así que durante la Gran Guerra (Primera Guerra
Mundial) se alinea con las potencias europeas. En fin Brasil comenzaba a dar indicios
de un crecimiento como Nación. La delimitación del territorio era casi completa,
se comenzaron a establecer comercios en la zona del Norte del país, como por
ejemplo en la zona del Amazonas. El poder era centralizado, se puede decir que si
bien todo este crecimiento era notable, quienes más se beneficiaban tanto en lo
político como en lo económico eran las élites. Bajo un ideal de "Ordem e Progresso" en donde
la libertad política estaba restringida, el ideario de una nación fuerte y poderosa
era la principal aspiración, y donde el Estado debía ejercer control sobre la
población llegado incluso a realizarlo mediante la fuerza, Brasil nos demostraría
la influencia positivista que poseía; por otro lado en lo económico fomentaban
un ideal liberal, defendiendo el libre mercado capitalista, pero sin brindar
igualdad de oportunidades para insertarse en el mercado. Era imposible para el
resto de la sociedad tener participación en el aspecto económico. Estaba dado
en cierta forma porque los conservadores querían mantener el orden ya que temían
que los liberales destruyeran la unidad nacional. EL lema Orden y Progreso marcaría
este período de la historia brasilera, a tal punto que el lema se encuentra en
la bandera nacional (en parte debido al Apostolado Positivista Brasileiro, que
era un sector conservador y defensor de las ideas de Comte, quienes sugirieron
el lema para ser establecido en la bandera).
Me gustaría
remarcar que el Apostolado Positivista
Brasileiro estaba a favor de gobiernos dictatoriales para mantener el
poder, ya que de esta forma el progreso estaría asegurado manteniendo a la población
controlada. Luego cuando se analice el caso mexicano, encontraremos grandes
similitudes a comparar, con el período de Porfirio Díaz que también adopta este
lema de orden y progreso y una política similar a la brasilera de aquel
momento.
Suicidio de las Oligarquías.
Cuando
analizamos el período del suicidio de las oligarquías, vemos una situación que
se desarrollará en el continente, en donde las oligarquías aparentan dejar el
poder y realizan una apertura democrática con inclusión política, pero sin la
inclusión social y económica, manteniendo de esta forma los puntos más
importantes del poder. Decimos que es aparente porque si bien, debido a la
presión ejercida por las clases medias que venían en crecimiento, ceden parte
del poder ya sea instaurando en el gobierno a representantes de la clase media,
mantenían el verdadero control del país, principalmente mediante su gran
poderío económico y al ser los únicos en controlar los medios de producción y
comercialización.
El caso
brasilero no es tan específico como el argentino, ya que las élites mantenían
el control del gobierno y eran quienes decidían la participación política, por
lo cual no es tan rápida la apertura hacia el mundo político. Por otra parte en
Brasil la clase media no tenía tanto poder, muchos inmigrantes que habían
llegado al país se dedicaban solo al trabajo en las haciendas y no tenían
interés en la política. Aunque sí veremos como las élites tienden a perder
parte del poder político y como el status quo que habían establecido con el
orden y progreso iría en decadencia.
Podemos decir
entonces que el suicidio de las oligarquías en Brasil no alcanza la relevancia
necesaria para ser un proceso característico como lo fue en otros países de
América Latina. En parte debido a lo ya mencionado y a las características
propias de Brasil que permitieron la aceleración
de otros procesos tales como el populismo de la mano de Getulio Vargas.
Getulio Vargas.
Continuando en
1910, vamos a observar un acontecimiento específico que cambiaría la historia
del Brasil. El crecimiento de un joven proveniente de Rio Grande do Sul, de las
tierras gauchas, que comenzaba a desarrollar su carrera política luego de haber
dejado su carrera militar y haber finalizado sus estudios en derecho. Comenzaría
involucrándose en la política desde temprana edad, llegando así a alcanzar
cargos tales como los de diputado de Rio Grande, aunque sufrió varias idas y
vueltas, debido a diferencias con el presidente de su estado y con su cuerpo
político. La figura de Getulio Vargas tendría gran aceptación para la gente de
su estado, ya que desde un comienzo centró su mirada en el pueblo, adoptando un
discurso que resultaba beneficiario para ellos. Para las masas que hasta
entonces no habían tenido poder de voz, no se habían echo valer y no habían
tenido representantes en el poder que manifestaran sus intereses.
Durante el
gobierno de Washington Luis, Vargas alcanzaría el cargo de Ministro de Hacienda
pero pronto volcaría su mirada hacia la presidencia de su Estado, motivo por el
cual renunciaría al Ministerio de Hacienda y llegada la hora de las elecciones
estatales se presentaría como candidato. Lugar que rápidamente ocuparía luego
de su amplio triunfo. Vargas siempre apoyo al pueblo de Rio Grande do Sul,
ejercía presión al estado federal, aunque siempre manteniendo límites, debido a
que durante su cargo de Ministro había mantenido una relación personal allegada
al Presidente Washington Luis. A pesar que mucho historiadores de hoy en día
aclaran que Vargas utilizaba al presidente por aquel entonces para alcanzar sus
intereses, siempre mantuvo una estrecha relación con el poder federal desde un
comienzo.
En aquella
época el sufragio estaba manipulado, no todos tenían acceso a él, y se sugiere
que las elecciones en gran parte ya estaban arregladas. Esto iba de la mano con
la política del café con leche. Esta era la supremacía que tenían los estados
de Sao Paulo y de Minas Gerais para llegar siempre a la presidencia de la
Nación. En parte controlado por las élites, que aseguraban su permanencia
controlando en cierta forma quienes accedían al poder.
Toda esta
manipulación y a posterior salida de Washington Luis del gobierno, serían
factores claves para la revolución del 30. Con ésta política del café con leche
en donde los estados de Sao Paulo y Minas Gerais postulaban a sus presidentes
para la presidencia de la Nación y gran parte del resto de los estados apoyaba
esto, era de esperar que Washington Luis propusiera como futuro presidente y
sucesor suyo a Julio Prestes, por supuesto presidente de Sao Paulo. Esto provocó
rápidamente la oposición de Vargas, quién siempre quiso romper con este esquema.
Con Minas
Gerais, quien esperaba la candidatura de su presidente, y con Vargas en Rio
Grande Do Sul, comenzaría una rápida movilización opositora a Prestes. Esta alianza
captaría aliados en varios estados mas, en donde veían la candidatura de
Prestes como una amenaza al poder estatal. Vargas obtendría apoyo incluso de partidos
Liberales de cada estado, de las clases medias que veían en Prestes una continuación
de la manipulación política en donde no se verían beneficiados. Este frente
opositor postularía a Vargas como candidato, pero en las elecciones Prestes resultaría
electo, motivo por el cual la movilización en contra de Prestes aumentó. Las
elecciones habían sido ganadas con fraude, la oposición decidió levantarse en contra
de Prestes y varios incidentes a nivel local sucedieron, aunque era de esperarse
un estallido social que sería llevado hasta Rio de Janeiro, por aquel entonces
capital del Brasil. Pero esto no tuvo lugar, Prestes fue asesinado, y los militares
destituyeron a Luis, manteniendo un gobierno provisorio, y poniendo como
presidente a Vargas.
Vargas abolió
la Constitución, desarticuló el parlamento y ejerció un gobierno propio y sin
consentimiento de algunos estados. Aunque se destacan durante este mandato la
Ley de sindicalización, el apoyo a las clases bajas, brindándoles asistencia sanitaria
y educativa (en parte mediante la creación de los Ministerios de Educación y
Salud). Vargas intentó generar cambios dentro del sistema brasilero.
Modernizando al país, queriendo crear carreteras, sistemas de agua que sean
equitativos en todo el país y fomentando la industria.
Era de
esperarse una reacción por parte de quienes habían salido como perdedores. En parte por
los políticos de Sao Paulo, quienes habían mantenido hasta entonces control en
el gobierno nacional y donde se radicaban la gran mayoría de las elites que
dominaban el sistema económico brasilero. Realizando así una revolución contra
el gobierno de Vargas en 1932, pero que sería apagada. Vargas sería electo como
presidente y de su mano vendría una Constitución,
quienes muchos señalan como de apertura, que cambiaría la distribución de los
recursos, el sistema educativo, el sistema sanitario, económico y militar del
país.
Pero el
comunismo surgiría como una amenaza al gobierno de Vargas, rápidamente Vargas perseguiría a
varios políticos opositores. La situación social del país se vería golpeada,
llegando al punto que la popularidad de Vargas disminuiría. La inestabilidad política
sería otra característica de la época, donde Vargas perdería a muchos antiguos aliados
quienes ahora se alzarían como opositores. Los estados de sitio eran
recurrentes y Vargas exigía una mayor represión hacia los opositores.
Es así como
desde su gobierno se enuncia un plan comunista que intentaba deponer su gobierno
antes de las lecciones y con motivo de instaurar el comunismo en el país, conocido
como Plan Cohen. Esto aumentó la crisis social y política del país, y algunos historiadores
aseguran que este movimiento fue creado por Vargas para dar el golpe de Estado del 37 e
instaurar el Estado Novo que perduraría hasta 1945. Vargas lograría una
consolidación del poder personal sin escalas, cerrando el parlamento y confiriéndose
poderes absolutos. Ejerciendo un control fuerte, junto a ciertos militares que
lo habían ayudado a dar el golpe de Estado del 37, para oprimir a la oposición.
Con el Estado
Novo, Vargas le daría peso al actor estatal. Continuaría con la consolidación de
un Estado fuerte y presente en la
producción económica. Otra característica propia del populismo que tendría
Vargas es la industrialización. Vargas quería el crecimiento económico de su
país y controlar Él mediante el Estado la economía que hasta entonces estaba en
manos de las élites. Vargas fomentaría este proceso industrial, que lo podemos
asociar con el modelo de sustitución de las importaciones, dejar de depender de
las potencias extranjeras, y fomentar una industria nacional fuerte. Esta
industria obviamente necesitaba de una mano de obra, la cual Brasil poseía. Así
vemos como la clase obrera comienza a tener peso y se agrupan en sindicatos
para representar sus intereses.
Vargas apoyaba
fuertemente a esta clase obrera industrial, ya que ellos también le aseguraban
una forma de permanecer en su cargo ya que con su modelo industrial se veían beneficiadas.
Las élites que controlaban la producción de café y otros bienes se verían afectadas,
ya que la clase obrera sería muy importante para el gobierno de Vargas y este les
daría mayor importancia que a las elites. Además comienza a surgir una nueva
élite, la élite industrial, que no eran las antiguas elites que ahora
controlaban la industria, si no allegados de Vargas, compañeros políticos que
lo habían apoyado durante sus mandatos y que ahora controlarían la industria
brasileña bajo la custodia constante de Vargas, que también se aseguraba el
crecimiento de su industria.
Hay que
mencionar que Vargas también creo varias leyes para beneficiar a los
trabajadores, asegurándoles
un salario mínimo y apoyo económico luego de haberse retirado, durante 10 años. Esto lo
podemos observar como una herramienta de Vargas para continuar con su influencia
en las clases obreras.
Durante este
período también encontramos características del Corporativismo. En donde junto
a Vargas varios sindicatos se vieron beneficiados y acrecentaron su injerencia y
poder. También podemos mencionar a los militares, quienes eran la mano derecha
de Vargas durante su gobierno dictatorial. Estas se vieron beneficiadas
mediante una total participación en lo político, algunos militares controlaban
la industria brasileña y también mediante acuerdo con los Estados Unidos que
Vargas había llevado a cabo permitiendo la instauración de bases americanas en
Brasil, de esta forma los militares brasileños pudieron crecer en materia
táctica, y también en lo bélico, ya que Estados Unidos había fomentado la
creación de industrias siderúrgicas para la creación de material bélico (esto
está en gran parte relacionado con la Segunda Guerra Mundial en donde Brasil
tendría un rol diferente al del resto de los países de la región, que fomentó
el ataque alemán y la posterior ayuda de Estados Unidos buscando al Brasil como
aliado). Otros actores fueron las grandes corporaciones creadas por el gobierno
de Vargas. Las entidades estatales que se ocuparon del Petróleo y de la
industria resultaron ser fuertes organizaciones que tomaron gran participación
en lo político. Ya sea mediante la asociación que mantenían que los sindicatos
de estos rubros o con el mismo gobierno de Vargas. Estas provocaron el gran
parte la ayuda social del gobierno de Vargas hacia la clase trabajadora. Otro
actor del corporativismo, durante esta época de Brasil, fueron los medios de
comunicación. Vargas desde un principio incentivó a la creación de cadenas
radiales y televisivas nacionales. Las cuales por supuesto apoyaban su mandato.
Se puede hablar de demagogia y de control de los medios, pero me remito
solamente al análisis de estas, a su surgimiento y a su relación con las masas
que manejaba Vargas. No estoy ni en contra ni a favor de ellas. Pero si destaco
que fueron un gran actor político y social durante este mandato de Vargas.
Muchos
analistas establecen constantes comparaciones entre Vargas y el General Juan Domingo
Perón, de Argentina. Tienen grandes similitudes, pero hay una que sobresale, y
es la forma en la cual fueron depuestos. Vargas fue traicionado por un grupo de
militares que tenía a su lado. Quienes veían en Vargas un atraso para el
Brasil, debido en parte a la gran ola democratizadora que repercutía en el
pueblo brasilero. Es así como Vargas fue depuesto en 1945 por un movimiento
militar.
Luego de
un forzado retiro, la participación política del líder no se haría de esperar.
Sería electo senador, ingresaría en la cámara de diputados no solo representado
a su Estado sino a 6 más (lo cual nos permite ver el apoyo que tenía Vargas en
gran parte del Brasil) y finalmente alcanzaría a ser senador por el Estado de Minas
Gerais. Con esta nueva entrada en la arena política, no sería extraño que se postulase
para las elecciones. Ganando una vez más en el año 1950 Vargas asumiría la
presidencia de la Nación con el apoyo de varios estados entre ellos Minas
Gerais, Sao Paulo y Rio Grande do Sul. Pero Vargas aún conservaba varios
opositores dentro de las fuerzas armadas y del sistema político (en donde se
encontraban varios representantes de partidos políticos que él había excluido y
perseguido durante su anterior mandato). Esto dificultaría el mandato de
Vargas, mas aún con las medidas que adoptó para el apoyo a las clases bajas.
Sería así como la crisis social volvería a ser un factor determinante para los
levantamientos armados. Sumergido en una gran crisis nacional, que el mismo
Vargas consideraba como irreversible, no tuvo mas opción que terminar escapando
a todos estos problemas mediante el suicido el 24 de Agosto de 1954.
Con una nueva
época por venir y la caída del líder mas importante de la política brasilera contemporánea
Brasil comenzaría una nueva era según varios autores, pero sin embargo
conservando un legado histórico que hasta el día de hoy persiste en Brasil, un
legado creado por el "Padre del Pueblo" o "Padre de los
pobres" que marcó al Brasil durante más de 25 años. Es imposible hablar de
Brasil sin mencionar a Vargas, por ese motivo le dedique a éste capítulo y
período de la historia brasilera el nombre de este líder, porque todos los
acontecimientos nos conducen a su nombre.
Gobiernos
democráticos y Desarrollismo.
Es innegable el legado que Getulio Vargas dejó en el Brasil.
Incluso luego de su muerte muchos de los partidos que él había creado y varios
de sus seguidores intentaron continuar con una política parecida a la del gran
líder brasileño. Lo cierto es que luego de su muerte Brasil atravesaría por un
período democrático que iría desde 1954 hasta 1964, pasando por el máximo cargo
nacional 7 presidentes de diversos partidos políticos, y culminando este
período con la llegada de los gobiernos autoritarios al poder y una etapa
nefasta para Brasil, a pesar que como analizaré en el próximo capítulo
comenzarían en los últimos años la apertura democrática del país. Pero en esta
Unidad me dedicaré pura y exclusivamente al período de 10 años que transcurren
desde la muerte de Vargas hasta la llegada al poder de los regímenes militares.
Luego de la muerte de Vargas, Brasil quedó conmocionado,
paralizado, sin saber hacia donde dirigirse y sin saber que hacer debido al
adiós del máximo líder.
Vargas fue sucedido por su vicepresidente Joao Café Filho,
quién intento mantenerse en el poder a pesar de las revueltas sociales en el
país y al accionar de los militares, que comenzaban a apuntarse como actores
fuertes en la política brasilera. Así es como el movimiento del 11 de Noviembre
intentó desplazar al por entonces presidente de la Nación de su cargo, ya que
las confrontaciones entre militares y políticos como también las alianzas para
posicionarse en el poder fueron características de la época.
Las elecciones presidenciales se acercaban y el interés por
saber quién iba a ocupar el cargo aumentaba, más aún en la situación social
bajo la cual se encontraba el Brasil.
La precipitada renuncia, en parte obligada por los
militares, de Café Filho, colocó a Carlos Luz en el cargo, pero la mencionada
con anterioridad revuelta o movilización militar lo depuso del cargo
impidiéndole completar una semana de mandato. Como podemos observar la
situación era crítica en aquellos momentos.
En la arena política, la procedencia de los candidatos no
tenía gran importancia, ya que la mayoría de los partidos habían sido un legado
Varguista y no presentaban serias diferencias; los partidos parecían
encontrarse en un callejón sin salida y frente a la oposición militar la salida
hacia un futuro más viable parecía complicada.
Durante los siguientes 2 meses la presidencia la ocuparía
Nereu de Oliveira Ramos, sin cambios sustanciales y sin un proyecto por
encarar. No hay importantes puntos a destacar en su corto mandato. Ahora bien,
lo importante es centrarnos en el siguiente presidente. Alguien que llevaría a
cabo políticas muy diferentes a las cuales se venían tomando, mejor dicho
intentaría mejorar el sector industrial del país, y se lo conocería como uno de
los grandes representantes del Desarrollismo en América Latina.
Habiendo ganado las elecciones de 1955, Juscelino Kubitschek
asumió la Presidencia de Brasil el 31 de Enero de 1956. Perteneciente al
Partido Social Democrático y siendo médico de carrera, rápidamente comenzó una
carrera política que lo llevaría a la Presidencia. Su mandato duró hasta 1961,
e introdujo severos cambios para el crecimiento de Brasil.
Cuando comencé a realizar una breve introducción, mencioné
su relación con el Desarrollismo. Claramente con su ideal de otorgarle
crecimiento y prosperidad a Brasil, un progreso calculable a 50 años de avance,
pero en tan solo 5 años, fomentó el crecimiento industrial, principalmente en
la industria pesada, la metalúrgica, la industria química y la hidroeléctrica.
Este modelo intentaba dar el segundo paso en la industrialización del Brasil
que había comenzado Vargas. Claramente su mandato se caracterizó por la
estabilidad política, sin importantes confrontaciones con partidos y sectores
opositores, a pesar de leves revueltas militares que fueron rápidamente
sofocadas.
Partidario de la democracia y del desarrollo industrial, su
vínculo con los Estados Unidos de América fue clave. Focalizó su política
exterior hacia los Estados Unidos. Por un lado lo entendemos como un estrecho lazo
y sostén para su proyecto de segunda industrialización de Brasil y por otro
lado se señala que ya desde esa época Estados Unidos intentaba frenar el avance
del Comunismo en Brasil (al igual que en toda la región como veremos mas
adelante).
En los primeros años de mandato la construcción de
carreteras sería preponderante, al igual que el crecimiento económico que
Brasil atravesaría en líneas generales. Es común escuchar que durante sus
primeros años los trabajadores consiguieron aumento de los salarios, beneficios
en el sector de la salud y los precios se mantuvieron bajos. Pero lo cierto es
que lo mismo no se puede decir ya para el final de su mandato.
Kubitschek
fomentaría la creación e instauración de fábricas automotrices en Brasil.
Focalizando varias industrias en diversas regiones del territorio brasileño.
Algunas corporaciones extranjeras verían con buenos ojos está decisión del
presidente y rápidamente se instalarían en Sao Paulo. A su vez, las
construcciones a nivel de infraestructura aumentaron. Por todo Brasil se
intentó promover el desarrollo industrial. Parecía que su mandato era bastante
satisfactorio, en parte la visión positiva era en base a la estabilidad
política por la cual atravesó el presidente, por otro lado el crecimiento
industrial y los avances en diversos sectores de la industria aumentaron su
popularidad.
Sin embargo el
líder brasilero, muy comparado con su par argentino Arturo Frondizi, sería
criticado por severos sectores que lo habían acompañado durante sus primeros
años. Estos sectores se habían visto beneficiados con Vargas, eran los sectores
populistas. Juscelino fue criticado por haberle restado apoyo a los
trabajadores, la clase que Getúlio Vargas había conformado y aglutinado.
Durante su
mandato podemos observar un fuerte crecimiento de la clase media brasilera, sin
embargo no podemos decir lo mismo de las masas populares. A su vez fue
criticado por su acercamiento con los Estados Unidos. De todas formas la
tensión con las elites tradicionales brasileras no sería tan fuerte, al igual
que aquellos poderosos industriales que habían acrecentado su poder con el
modelo de crecimiento a puertas adentro de Vargas, continuarían con un
crecimiento durante el mandato de Kubitschek.
En la logística y
transporte también se producirían cambios positivos. Las rutas se mejorarían,
los medios de transporte aumentarían y los vínculos entre los distintos estados
y ciudades del país crecerían, propiciando la unión entre las diversas regiones
del país.
Creo importante
mencionar que si bien esta idea ya se había venido proyectando desde hacia
varios años, fue durante el mandato de Kubitschek que se produciría el traslado
de la capital. Pasaría de Rio de Janeiro a Brasilia. Una ciudad que sería
construida con rapidez y cuya arquitectura demostraría el slogan industrial de
la época y los avances en infraestructura. Para muchos fue un símbolo del
urbanismo y de la modernización por la cual atravesaba el país, pero lo cierto
es que la intención era descentralizar el poder que ostentaba en sus manos Rio
de Janeiro.
Desde los
créditos fomentando la inversión y el desarrollo hasta el avance en la
industria automotriz, la presidencia de Kubitschek fue un punto importante a
tener en cuenta para comprender el desarrollo de Brasil en los próximos años.
Principalmente por un tema que sería totalmente catastrófico durante los
gobiernos de facto. Estamos hablando del aumento de la deuda externa y de la
devaluación. Durante el mandato de Juscelino, podemos observar un fuerte
aumento de la inflación, lo que contrajo una devaluación del cruzeiro (la
moneda nacional de Brasil por aquel entonces) y mientras se intentaba hacerle
frente a la deuda externa, esta aumentaba, no de manera tan prominente como
durante la década del ’70, pero si es un punto a tener en cuenta.
Principalmente
además de los ya mencionados puntos, poca inclusión a las clases bajas y la
relación con Estados Unidos, el discurso de la oposición se centraría también
en la inflación. No solo se atacaría el aumento de los precios ya para el final
de su mandato si no que se le cuestionaría el modelo que había mantenido,
sugiriendo que el beneficio que había traído no saldaba la fuerte inflación por
la cual atravesaba la economía brasilera.
Janio Quadros
alcanzaría la presidencia luego de imponerse en las elecciones de 1960. Sin
embargo su mandato no alcanzaría el año. Su ascenso al poder provocó un giro
total tanto en la política interna como externa de Brasil. Por empezar, no se
continuó con el modelo de su antecesor e incluso se lo culpaba al ex presidente
Kubitschek de todos los males por los cuales atravesaba el país. Podemos
observar que no hubo una continuidad de modelo ni tampoco de pensamiento, por
lo cual aquí se produce el fuerte cambio que luego culminaría con la
interrupción de los gobiernos democráticos en Brasil. Si bien el discurso de
Quadros era crítico con respecto al presidente anterior, se intentaba subrayar
los problemas en materia económica y debido a la fuerte inflación y al aumento
de los precios. Pero a su vez como mencioné más arriba, el cambio se produjo a
nivel internacional. Ya no primordiaban las relaciones con Estados Unidos,
ahora podemos visualizar un fuerte acercamiento hacia la URSS (Unión de
Repúblicas Socialistas Soviéticas) y Cuba.
Lo cual no era algo menor, recordemos que en este momento histórico, en
el contexto internacional había fuertes tensiones entre las dos grandes
potencias. En parte debido al cambio en la administración norteamericana. El
ascenso de los demócratas al poder de la mano de John Fitzgerald Kennedy fue visto
como una nueva postura, más laxa con respecto a la URSS y al bloque comunista.
La administración Eisenhower había mantenido una postura más dura y rígida, por
así decirlo, mas propia de los republicanos. Este cambio lo podemos evidenciar
en el debate político a la presidencia llevado a cabo en 1960 entre Richard
Nixon, por aquel entonces vicepresidente de la Nación quien proponía continuar
con los avances que el mandato de Eisenhower había introducido en los Estados
Unidos, y del otro lado se encontraba el joven intelectual Kennedy, que sugería
un modelo en el cual el Estado tenga mayor intervención en la economía y
otorgara mayores beneficios sociales, principalmente al sector de la salud y
donde haya un acercamiento con las diversas regiones del mundo. Este giro le
otorgaría a la administración Kennedy severos incidentes con los soviéticos,
como por ejemplo el fracaso en Bahía de Cochinos y la posterior Crisis de los
Misiles. Por lo cual podemos observar que el cambio en la política
internacional brasilera fue drástico en un periodo de extrema tensión.
Hay quienes van a
sugerir que la renuncia de Quadros y la presión de los militares fue debido a
las charlas y encuentros que mantuvo con Ernesto Guevara. Es importante
mencionar que un sector muy amplio de las fuerzas armadas se encontraba en la
derecha y en oposición al comunismo. De todas formas como explicaré más
adelante, Quadros termina cayendo por sus propios movimientos, creo que la
mejor analogía es señalar la caída de Quadros como una imposibilidad de
continuar moviéndose debido a los erróneos movimientos que realizó durante su
corto periodo, lo cual lo proyecto al ajedrez, donde el Rey (en este caso el
Presidente) queda encerrado debido a la falla táctica del resto de sus piezas y
a los erróneos movimientos que él mismo realizó.
El sector militar
perteneciente a la derecha y los sectores conservadores de la sociedad, de
entre los cuales podemos encontrar a muchos que habían apoyado a Janio para la
presidencia, ahora comenzaban a oponerse al presidente, viendo las
condecoraciones hacia Guevara y las buenas palabras que el presidente brasilero
le ofrecía a la URSS como una postura totalmente incorrecta para el futuro de
Brasil, siempre viendo en el comunismo un enemigo que arrasaría con su status social
y económico, como también en el caso de los militares, político.
Pero su
incapacidad para controlar al sector mencionado anteriormente, lo llevó a
adoptar tendencias de corte conservador, a pesar de su relación con el
comunismo. Intentó frenar a la oposición con restricciones a los créditos, a la
inversión, poniéndole límites financieros a los bancos e incluso a determinados
sectores de la industria. Claramente, estas medidas no le cayeron muy bien a la
izquierda brasilera y a los sectores trabajadores que hasta el momento veían
con buenos ojos al máximo mandatario de la república. Por lo cual, como bien
expliqué con la analogía del ajedrez, Quadros terminó encerrado, con viejos
aliados que ahora eran opositores y sin un sector fuerte en donde apoyarse, a
pesar de su convicción en que el pueblo lo apoyaría, motivo por el cual podemos
explicar su maniobra política presentando su renuncia al Congreso.
Janio Quadros
creía que el pueblo le pediría la vuelta al poder, como a su vez que la
izquierda lo apoyaría, pero no llegó a vislumbrar que tenía los días contados,
más aun con un sector militar que según él lo había amenazado para presentar la
renuncia.
Lo cierto es que
no solo con el modelo o proyecto de Quadros se inició la decadencia política
brasilera, si no que la convulsión social retornaría y el golpe de Estado
parecía aproximarse.
Joao Goulart
quien era vicepresidente de Quadros, asumiría el poder, pero anteriormente
Ranieri Mazzilli sería presidente, encontrándose previamente como diputado del
Congreso Nacional representando al Partido Social Democrático.
El rol de
Mazzilli sería mantener la situación por dos semanas hasta el regreso del
vicepresidente mientas este se encontraba en el exterior, luego tendría un
segundo mandato a fines del ’64, pero no hay importantes puntos a mencionar
salvo el rol transitorio que ocupó en ambas oportunidades como máximo jefe de
Brasil.
Un hombre que
había desarrollado una amplia carrera política, desde sus comienzos en Rio
Grande do Sul, pasando por su importante rol como Ministro de Trabajo durante
el gobierno de Vargas (que influiría fuertemente en Goulart, principalmente en
su apoyo a los sectores más bajo de la sociedad brasilera así como su ideal de
apoyo a la industria, la construcción de carreteras y una mayor intervención
del Estado), su papel como Presidente del Partido Trabalhista que funcionó como
un instrumento para acaparar a los trabajadores durante el mandato de Getúlio
Vargas, y su rol como vicepresidente, en dos ocasiones, la primera junto a
Kubitschek y luego en conjunto con Quadros. La carrera política de Goulart era
bastante amplia, por lo cual desde las épocas de Vargas hasta los últimos años
de la democracia en la década de los ‘60s jugó un papel considerable en la
política brasilera. Volviendo a su presidencia, Joao debió hacer frente a un
escenario político fuertemente polarizado y a una rotunda crisis social, legado
de su antiguo compañero de formula. Tal es así que debió mantener acuerdos con
los militares para ejercer su rol de presidente sometido bajo las decisiones
del Congreso, en un presidencialismo restringido y con el control de la derecha
conservadora y las Fuerzas Armadas. De todas formas, demostró ser bastante
astuto a la hora de relacionarse con la oposición ya que luego de unos años adquiriría
los poderes correspondientes a su cargo. Aunque la astucia caracterizaba a este
líder político, sus medidas sociales, económicas y con respecto a las
relaciones internacionales le trajeron serios problemas, ya que las mismas
disgustaban a la oposición.
Sus medidas,
tildadas de corte comunista, le valieron severas críticas a su gestión. Sin
embargo no cesó su postura favorable a las reformas sociales.
Intentó generar
reformas agrarias, cambios en la industria, fomentando una mayor intervención
del Estado y a su vez intentó aplicar su política interna al plano
internacional. Mejor dicho, intentó llevar sus instrumentos para captar a los
opositores haciéndoles creer que estaba de su lado, cuando estaba llevando a
cabo movimientos completamente contrarios. Tal es así que desde un principio
señaló que iba a producir un acercamiento a Estados Unidos y de esta forma
cambiar las relaciones exteriores que Quadros había impulsado. Sin embargo
continuó con las relaciones para con la URSS y Cuba. Motivo por el cual tanto
Estados Unidos como la derecha y el resto de la oposición demostraron su
descontento.
En el año 1964,
frente a una fuerte inestabilidad social y una profunda crisis económica debido
al déficit que provocó la intervención estatal en la economía y el amplio gasto
que poseía el Estado, como también la fuga de capitales extranjeros debido a
las políticas económicas del gobierno de Goulart y la inestabilidad política,
el golpe de Estado sería llevado a cabo por las Fuerzas Armadas, con apoyo de
una amplia mayoría del Congreso, de la derecha, del sector conservador
brasilero y de Estados Unidos.
El golpe militar
sería rápido y a pesar de buscar apoyo en el Congreso y en el sector
izquierdista, Goulart se encontró frente a una situación caótica, debido a la
cautela con la cual fue preparado el golpe (principalmente debido a la
insurgencia en diversos sectores del país, el momento para el cual fue planeado
y la rápida movilización de tropas) que lo destituiría del poder
espontáneamente.
Como ya se
mencionó, se nombró como Presidente de la Nación a quien ocupara el cargo con
anterioridad, Mazzilli, y de esta forma ya a partir del mes de Abril de 1964
comenzaría un gobierno militar de facto, que presentaría similitudes con otros
movimientos de la región, para muchos propiciado desde Estados Unidos debido al
temor frente al avance y expansión del comunismo, para otros fue una forma de
controlar la situación interna del país y asegurar la estabilidad para luego
poder generar el regreso de la democracia. Lo cierto es que como veremos en la
siguiente Unidad los regimenes autoritarios traerían severas consecuencias para
la economía brasilera, así como generarían un duro momento social cuando muchos
perdían la esperanza del retorno de la democracia.
Brasil pasó por cambios
constantes a lo largo de estos 10 años, no solo a nivel local si no que también
a nivel internacional. Desde los diferentes líderes, hasta el papel de la
derecha conservadora y las Fuerzas Armadas, Brasil iniciaría un largo camino
para restablecer la estabilidad en el país, los gobiernos militares no
ayudarían mucho para beneficiar al pueblo brasilero, sin embargo este momento
de la historia brasilera no puede ser dejado de lado, debido que nos
ejemplifica la situación mundial durante los ’50 y ’60 y como esta repercutió
en uno de los países más importantes del Cono Sur.
Regímenes
Dictatoriales.
Tras largos años de reformas y cambios sociales en Brasil,
con ascenso de clases populares, renovación de la política y nuevas leyes la
democracia se vería interrumpida con el golpe de Estado que gobernó
provisionalmente hasta encontrar el momento adecuado para restablecer el
sistema democrático que asegurar la libre competitividad entre partidos
políticos.
Los gobiernos militares llevarían a cabo un nuevo
ordenamiento para la orientación del país durante dos décadas que
convulsionarían al mundo, en un momento de tensión en el plano internacional y
con el inminente avance del comunismo por las periferias del mundo.
Su programa de reorganización Nacional y ajuste económico
demostró el acercamiento hacia el fondo Monetario Internacional, entidad que
haría aumentar considerablemente la deuda externa brasilera, pero que le
prometía a Brasil, mediante la rebaja de salarios, control de los sectores
productivos y un ajuste en el presupuesto estatal, alcanzar un progreso
económico que posicionara al país dentro de las economías más importantes del
mundo.
Como bien podemos señalar este proyecto económico fue
llevado a cabo mediante fuertes represiones a la sociedad, con desapariciones,
inoperancia a los partidos políticos, cierre del Congreso, persecuciones
políticas y censura a la libertad de expresión. A su vez estas violaciones a
los Derechos Humanos fueron mantenidas debido al control que las Fuerzas Armadas
llevaban a cabo en las escuelas, universidades, fábricas y sindicatos.
Torturando y persiguiendo a todos aquellos que opinaran en contra del gobierno
de facto. Podemos mencionar que al no haber libertad de expresión (cuando hablo
de libertad de expresión me refiero en todas sus formas, desde hablar
libremente y opinar hasta afiliarse a partidos políticos o expresar una
simpatía hacia cierta ideología) el miedo operaba entre la sociedad brasilera,
y tanto comunistas, como sindicalistas, como universitarios y trabajadores
fueron fuertemente reprimidos por un gobierno que se impuso mediante la fuerza
y no por medio de la voluntad popular.
A pesar de estos puntos importantes de los gobiernos de
facto en Brasil, los simpatizantes y defensores del régimen sostenían que hubo
un fuerte crecimiento en la industria, con un aumento en la producción y a su
vez en el consumo, como también un aumento en el desarrollo tecnológico del
país. Por supuesto que todo esto, señalado como el “milagro Brasilero” se
alcanzó debido a la falta de libertad de expresión y al régimen del terror
impuesto por los militares.
Un punto importante a destacar de este período es la deuda
externa. En la Unidad anterior habíamos señalado el aumento en la deuda externa
que Brasil venía generando. Pero no sería hasta este momento que la deuda
aumentara de forma descomunal. De hecho fue el momento histórico de Brasil
donde más aumento la deuda externa. En parte para poder sostener el modelo
económico en desarrollo. Ciertamente generaba un alto déficit, que Brasil
tendría que afrontar en las décadas posteriores al proceso de regimenes
militares, debido a fuerte déficit que generaba el endeudamiento frente a
escaso incremento de la producción. La relación entre beneficio y costo era
abismal, lo cual generó las fuertes crisis económicas que el país habría de
atravesar en los próximos años.
El mencionado Milagro Brasilero sería fruto del aumento en
las exportaciones de café y otros bienes agrícolas. A diferencia de otros
momentos de la historia contemporánea brasilera, la industria no atravesaría
por un fuerte avance tecnológico, a pesar del intento de los gobiernos de
facto. La segunda industrialización no se prolongaría, y mientras que otros
países como Japón o Alemania Occidental comenzaban a emprender un desarrollo
industrial fuertemente arraigado a la tecnología y vinculado a la industria
pesada, Brasil no lograría llegar a ese nivel. Queda demostrado el alto índice
de producción de bienes primarios, frente a los bienes industriales y manufacturados que otros estados producían.
De todas formas este milagro sería tan solo temporal. Brasil comenzaría una
seria crisis económica que se traducía a la inestabilidad social dentro del
estado sudamericano. La deuda externa aumentaría de tal forma que ya no se podrían
ni realizar los mínimos pagos, llegando al punto que Brasil se declara en
moratoria de pagos en el año 1982.
El militar Castelo Branco ejercería la presidencia durante 3
años. En este período se demostraría la rapidez con la cual los regimenes
militares controlarían el país por los próximos años. Su primera maniobra fue
suprimir a los partidos políticos y perseguir a los líderes de izquierda,
desmantelando a su vez el congreso de la Nación e iniciando una etapa donde los
conservadores de la derecha brasilera dominarían la política, obviamente en
conjunto con las Fuerzas Armadas.
Como punto importante a tener en cuenta durante el mandato
de Branco, debemos señalar la anulación de la Constitución de 1945. Luego de
este movimiento político, estableció una serie de leyes que avalaban el poder
de los gobiernos militares y quitándole influencia al poder legislativo de la
Nación. A pesar de la persecución a los partidos de izquierda, rápidamente se
desmantelarían todos los sistemas de partido a excepción del partido controlado
por los militares, ARENA (Alianza Renovadora Nacional).
Frente a una situación política conflictiva y ante las
surgientes tensiones entre los militares sobre cual seria el futuro del Brasil
y como encararlo, si continuando con e Golpe o llamando a elecciones, los
militares se apresurarían a sancionar una nueva Constitución en el año 1967, la
cual le otorgaría más poderes al presidente de facto, suprimiría la oposición
política y a su vez cambiaría la situación laboral y social que la Constitución
de 1945 había dejado en el país.
Una vez promulgada la nueva Constitución, entraría en vigor
durante la presidencia de facto de Artur Da Costa e Silva. Un militar que
debería afrontar una convulsión social muy fuerte, con levantamientos populares
y atentados producidos por grupos de izquierda.
Costa e Silva implementaría medidas aún más rígidas para
frenar la situación social. Por lo cual dejó sin efecto la Constitución
sancionada en el año 1967 y aplicó leyes rígidas para contener la situación social.
Claramente los gobiernos militares comenzaban a tener problemas entre ellos
mismos y frente a una sociedad que parecía hacerles frente. La censura y la
opresión que sufría la oposición fue demasiado severa, al punto que se
encarcelaba gente inocente que nada había tenido que ver con los atentados. Sin
embargo el miedo se expandió por toda la sociedad, generando incertidumbre y
dudas.
Los Actos Institucionales que promulgaban los militares
agravarían aún más la crisis. Lo cierto es que en 1969, tras un problema de
salud, el presidente fue depuesto de su cargo y asumió una Junta Militar.
De esta Junta militar no podemos mencionar mucho ya que
duraría tan solo dos meses y no producirían grande reformas o modificaciones a
la situación.
Sí es necesario hablar de Médici, quien se mantendría en el
poder hasta 1974.
Participó en el Golpe de Estado de 1964 y se alzó como uno
de los militares victoriosos en el mismo golpe. Debió enfrentarse a una época
de crisis social y económica.
Para comprender su mandato es necesario dividirlo en 3
aspectos esenciales. El primero, su política interna, el intento de reapertura
del Congreso y la fuerte represión a la oposición, principalmente de izquierda.
Luego debemos observar su política internacional, con un fuerte vinculo hacia
los Estados Unidos. Por ultimo explicaré su modelo económico y como este llevó
a una fuerte caída de la bolsa de valores brasilera lo cual repercutiría en la
economía brasilera.
A pesar de haber promovido la re apertura del Congreso de la
Nación y de intentar reactivar al Poder Legislativo de la Nación, su aparente
apertura democrática e intención de preparar el escenario para el retorno de la
democracia fue tan solo un artilugio para esconder de fondo la fuerte represión
que llevaba a cabo para con la oposición al régimen. Las torturas,
desapariciones, ataques y censuras a la prensa fueron un pilar de su política
interna. Principalmente atacó a los sectores de la izquierda brasilera.
Intentando desplazarlos de los movimientos políticos y quitarles su acceso a
los trabajadores y las industrias. Este sería el momento más crítico de la
dictadura en cuanto a represión y dureza para con la sociedad. El temor dentro
de la sociedad era tal que los mismos vecinos se delataban entre sí, la gente
no mantenía conversaciones referidas a la política y el llevar a cabo reuniones
era sumamente peligroso ya que podría verse como una reunión clandestina.
La represión interna nos permite entender sus causas, las
cuales están vinculadas con las relaciones exteriores que Médici llevó a cabo.
Toda su política exterior se focalizó hacia Estados Unidos. Combatir juntos la
amenaza del comunismo en el país e impedir su expansión por la región. De todas
formas a pesar del apoyo por parte de los Estados Unidos debemos recordar que
en este momento de la historia, la superpotencia occidental debía hacer frente
a uno de los episodios más críticos del siglo XX. Estamos hablando de la famosa
“Salida del Pantano”, como lo sitúa Henry Kissinger en su libro La Diplomacia.
La administración de Richard Nixon buscó una rápida salida frente a una guerra
que se le iba de las manos y que sería un fuerte golpe para su mandato y un
cuestionamiento al rol de los Estados Unidos en el mundo, por lo cual durante
esos años, hasta el final de la Guerra de Vietnam en el año 1975 bajo la
administración de Gerald Ford y habiendo pasado por el escándalo de Watergate y
la renuncia del republicano Richard Nixon, la política exterior norteamericana
se centraría en ese lugar determinado del Sudeste Asiático. Con esto no quiero
decir que se le resto importancia a Latinoamérica, pero la realidad es que
Vietnam le estaba costando más de lo pensado a los Estados Unidos, lo cual
evidentemente lo podemos confirmar con el retiro de las ultimas tropas
norteamericanas de Saigón, seguido de la entrada de los comunistas de Vietnam
del Norte en la capital del Sur.
De todas formas las relaciones con Estados Unidos, como ya
mencioné, estaban orientadas a la contención del comunismo y a la ayuda
económica del Fondo Monetario Internacional y sectores acreedores de origen
norteamericano.
En el tercer pilar del mandato de Médici las cosas le
resultarían un poco adversas. Debido a factores internos y externos. Por un
lado la Crisis de Petróleo generó un fuerte golpe para Brasil, principalmente
para la creciente Petrobras que ahora debería realizar ajustes internos para
sobrellevar la crisis internacional. A su vez golpeó y repercutió en el reto de
la economía. Ahora el Estado debía afrontar un fuerte gasto público y salir a
cubrir varios espacios que habían quedado vacíos no solo por la fuga de
capitales si no también por el desempleo y la quiebra. Tal es así que el Estado
se volvió deficitario, y la necesidad de crédito externo para solventar tantos
gastos se hizo inminente, por lo cual era de esperarse que la deuda externa de
Brasil aumentara crecientemente. Los años del Milagro Brasilero parecían estar
pasándole factura a un régimen militar que no sabría reactivar la economía
luego de la crisis, o como sugieren hoy en día varios economistas hubiese sido
necesario enfriar la economía para reestabilizar la producción y la demanda
interna.
A nivel interno la inversión en infraestructura fue muy
fuerte. Se construyeron carreteras, puentes, hogares para los sectores
cadenciados, centrales eléctricas y represas hidroeléctricas. Todo esto aumentó
aun más el gasto del Estado. A pesar que el Milagro Brasilero había mostrado
signos importantes de crecimiento, no logró ser un crecimiento sostenido en el
tiempo, y la falta de experiencia en administración macroeconómica por parte de
los gobiernos de facto agravó aún más la crisis.
Los siguientes gobiernos militares serían los últimos por
los cuales Brasil atravesaría. Poniendo fin a un duro periodo que repercutió
fuertemente en la política, la económica y en la sociedad brasilera como hemos
visto en esta Unidad.
Ernesto Geisel y Joao Baptista Figueiredo serían estos dos
últimos militares en ejercicio del máximo cargo a nivel Nacional. Ambos
pertenecientes a ARENA y militares de carrera, dirigirían el destino del país y
comprenderían que el camino hacia la democracia se estaba gestando. Desde 1974
hasta 1985 dirigirían el país. Periodo por el cual como ya mencioné comenzamos
a observar el periodo de redemocratización, que algunos lo señalan ya iniciado
durante el mandato de Geisel principalmente y demarcando que Figueiredo ya no
podía ejercer más fuerza para sostener el régimen de facto.
La apertura democrática que había comenzado con Geisel sería
una transición hasta el gobierno de Figueiredo, con quien no solo se permitió
la entrada de los partidos políticos en gran numero, si no que también se
disolvió el partido ARENA que había llevado al poder a la mayoría de los
líderes militares de este periodo de la historia de Brasil.
Lo cierto es que la apertura democrática era inminente y de
a poco comenzó a manifestarse en todo el país la presión ejercida por la
oposición al régimen para que el pueblo de Brasil, hasta aquel momento lo tenia
negado, pueda elegir democráticamente a sus gobernantes. De esta forma el
proceso fue siendo cada vez más fuerte, y encabezado por Tancredo Neves quien
como veremos más adelante pondría fin a largos años de regimenes dictatoriales
siendo elegido como máximo gobernante del país no partidario del régimen. Sin
embargo considero importante hacer otra mención. La política comenzaba a
solicitar en cambio, todo el sistema político brasilero no asociado al régimen
consideraba que era necesario el regreso de la democracia, al igual que la
sociedad, oprimida durante años también consideraba necesario el cambio, pero
lo que quería mencionar esta relacionado con la economía. Luego de severos años
de inflación y déficit público, sumado a la gran deuda externa que Brasil
alcanzó con los gobiernos militares, el legado económico de los militares para
con los futuros gobiernos sería muy drástico, habiéndole dejado al país no solo
una economía devastada si no también un marco en el cual la reactivación seria
muy difícil, y debería ser uno de los puntos principales de los gobiernos
democráticos a resolver. La deuda externa sería el peor de todos estos legados.
Dejando a Brasil en una situación critica con sus prestamistas y con una de las
deudas más grandes de América Latina y del mundo. Por lo cual considero que la
opresión y tortura, la censura y no dejar expresar libremente a la población,
sumado a las convulsiones sociales y atentados sería un momento histórico que
dejaría marcado a Brasil por los horrores que los gobiernos de facto pueden
llegar a realizar, al igual que una economía completamente destruida frente a
un panorama mundial que le seria adverso en los primeros años.
En la próxima Unidad analizaré la función de Neves y el
primer gobierno democrático del país desde 1964. La situación es bastante
peculiar, ya que Neves jamás llego a ejercer el cargo, pero debido a su
inminente lucha para el restablecimiento de la democracia y haber peleado por
Direitas Já (movimiento democrático mediante el cual varios partidos políticos
y lideres comenzaron a reclamar el sufragio directo por parte de la población
para elegir al futuro presidente de la Nación) desde los años del régimen de
Figueiredo, el mismo Congreso lo nombró como Presidente de la Nación, aunque no
habiendo llegado a ejercer como tal, sería sucedido por su vicepresidente José
Sarney.
El regreso de la
democracia.
Sarney: Plan Cruzado y
Constitución del ’88.
Tancredo Neves enfermó al momento de alcanzar la Presidencia
de Brasil. La enfermedad le quitaría la vida tiempo después, pero su lucha por
la democracia no sería en vano y entre las tantas cosas que le dejó al Brasil
estaría su vicepresidente de formula José Sarney.
Se encargó de la Presidencia desde 1985 hasta 1990. Como
mencionamos en la Unidad anterior, estos primeros años se caracterizarían por
la búsqueda de afianzar la democracia al igual que hacerle frente a la
situación económica. Ambos puntos dentro de la Agenda del Presidente fueron
afrontados con El Plan Cruzado y con la sanción de la Constitución de 1988.
La consolidación de la democracia sería el mayor logro que
se le concedería a Sarney, habiendo luchado desde un primer momento para lograr
afianzar las instituciones y reactivar el juego político en Brasil.
Con la Constitución del ’88 quedaría abierta la oportunidad
de elecciones directas para la Presidencia de la Nación. Ahora el pueblo
brasileño elegiría directamente a sus gobernantes. Sarney no solo tuvo apoyo de
varios sectores si no que su popularidad le concedió obtener el apoyo de todas
las gobernaciones del país, en donde su partido el Partido Do Movimento Democrático Brasileiro, se impondría con total
facilidad.
Como podemos observar su rol en la redemocratización del
país fue muy importante, y le concedió una fuerte popularidad, al lograr
devolverle a las instituciones su rol en la política brasilera y a la gente una
convicción que en la nueva democracia se podía confiar.
A pesar de todos estos y de la sanción de la tan esperada
Constitución, la opinión pública y la situación personal de Sarney comenzaron a
empeorar. Por supuesto esto se debió a la situación económica. Su gobierno
demostraría debilidad al afrontar la crisis por la cual atravesaba el país. Lo
cual lo vemos claramente representado en los planes que lanzó su gobierno para
hacerle frente a la agraviante situación.
El primero de los planes sería el Plan Cruzado, con el cual
se iniciaría una seguidilla de planes sin obtener grandes mejorías en la
economía.
Con el Plan Cruzado se introduciría una nueva moneda en el
país, el Cruzado. De esta forma se buscaría fortalecer la moneda local y hacer
frente a la inflación existente. También se impulsarían reformas en los
salarios. En donde habría subas y beneficios para los trabajadores, pero por
otro lado no podían hacer frente, aun con la suba de salarios, a los precios
existentes. De esta forma desde el gobierno se intentó mantener un límite a los
precios, sin posibilidad de aumento de los mismos, para lograr mantener la
situación. En un principio se intentó hacerlo por 24 meses, para luego pasar a
mantener el plan durante 1 año. Pero la realidad nos señala que en menos de 6
meses, no se logró implantar fuertemente la medida, y los precios aumentarían,
generando aun más inflación.
Frente a la dura problemática inflacionaria el gobierno
lanzaría un segundo plan, conocido como el Plan Cruzado 2. Este plan tampoco
tendría un efecto positivo en la economía, ya que la nueva moneda se
devaluaría, generando mayores problemas para mantener los precios, que
dispararon fuertemente, generando de esta forma un ciclo económico critico, en
donde la inflación tendería a ser estructural. Todo esto parecía agraviarse
frente a la problemática que sufría Brasil para pagar la Deuda Externa, a su
vez sumado al déficit público que se debía a los grandes gastos que se
generaban desde el Estado. Brasil alcanzaría a declarar su moratorio e
imposibilidad de pagos de la Deuda Externa, trayéndole aun más problemas, ya
que en el mercado internacional nadie querría concederle prestamos a Brasil.
La reactivación del la economía sería difícil más aun cuando
el Estado se encontraba en déficit, el país se encontraba en moratoria de pagos
y la inflación no se podía contener. Caso siguiente, se anuncia el Plan
Bresser. Con este plan se intentaría reducir el fuerte gasto público,
eliminando todo aquellos que generaba déficit, aquello que le era adverso y
costoso al Estado y eliminando los subsidios. El plan mantuvo estable la
economía por pocos meses, pero no logró controlar la creciente inflación, que a
su vez repercutía en la suba de precios. No solo comenzaron a subir los precios
si no que también Brasil experimentó escasez. Esto le provocó otro revés al
gobierno. Ya que los pocos productos que se encontraban en el mercado, poseían
altos precios y la gente no podía acceder a ellos sumado a que los impuestos
eran altos y los salarios se habían congelado.
A principios del año 1989 y luego de varios años de crisis
económica, Sarney lanzaría el último de sus planes económicos, conocido como el
Plan Verano, introduciendo una nueva moneda, el Cruzado Novo, que sustituiría
al antiguo Cruzado completamente devaluado.
La inflación se combatiría intentando mantener el valor real
del Cruzado Novo en comparación con el patrón dólar. La medida fue fuertemente
criticada ya que la nueva moneda había generado un aumento de la inflación y
más gasto al sector publico. La inflación no podría ser reducida. La nueva
moneda comenzaría a sufrir los efectos de la devaluación, y para 1990 la
inflación, ya convertida en estructural y siendo característica de todos los
ciclos económicos desde 1985 hasta 1990 alcanzaría un valor del 2500 %, como
media durante todo el gobierno de José Sarney.
Agradecido por su lucha para el fortalecimiento de la
democracia, pero criticado por la grave crisis económica del país, Sarney
culminaría su presidencia siendo acusado de corrupción estatal y de mantener
negocios oscuros con entidades bancarias, una característica que sería repetida
durante las siguientes presidencias, llegando al punto de la renuncia de un
presidente por la complicada situación en la cual se encontraba luego de las
acusaciones de corrupción. De todas formas, ya entrando en la década de los ’90
comenzaríamos a experimentar nuevas reformas económicas, apariciones de
sectores políticos más conservadores y a Brasil buscando un rumbo para salir de
la situación económica.
1990: Cambio político,
continuación económica.
El título hace referencia a la transición de poder político
de Sarney a Collor de Mello. Por una parte hay un giro en cuanto a partidos
políticos en el gobierno. Luego observamos un cambio en la política, ahora con
Collor de Mello, Brasil tendría su primer Presidente electo por sufragio
universal y elegido por el pueblo. Sin embargo, a pesar de las nuevas reformas
políticas, el problema de la inflación y la crisis económica no se resolvería.
Perteneciente al Partido de la Reconstrucción Nacional,
ubicado en el sector de la derecha liberal brasilera (a pesar de ser señalado
como Conservador), Fernando Collor de Mello alcanzaría la Presidencia de Brasil
como el gobernante más joven hasta el momento. Su mandato se vería interrumpido
por las controversias en cuanto a los problemas en su administración y la
implicancia del mismo Presidente en asuntos de corrupción. De esta forma el
Presidente renunciaría a su cargo.
En cuanto a la democracia Mello no produciría grandes
avances, ya que el momento más positivo en cuanto a cambios y reformas
políticas se produciría durante el mandato de su antecesor, Sarney. Por lo cual
Collor de Mello llega al poder gracias a su discurso donde prometía hacerle
frente a la economía. Los planes para reactivar la economía y frenar la
inflación ya no serían un instrumento útil, si no que Collor de Mello iniciaría
el proceso de privatizaciones. Más centrado hacia el neoliberalismo, siguiendo
los consejos que provenían de Washington para hacerle frente a la inflación,
Mello buscó frenar la inflación para mantener su mandato.
Varias empresas hasta el momento públicas, que no solo le
otorgaban trabajo a grandes cantidades de ciudadanos si no que generaban la
distribución de servicios estatales serían privatizadas. Las licitaciones de
empresas públicas proveedoras de servicio, tales como la luz y el agua, sería
un artilugio del gobierno para intentar atraer capitales extranjeros y generar
la entrada de dinero al país. Al mismo tiempo que los servicios mejoraban,
aumentarían su calidad, frente a las fallas que poseían durante la
administración y distribución pública, que los utilizaba más como una
herramienta para mantener en el sector trabajador a parte de la sociedad, que
como un negocio para generar ganancias.
Collor de Mello y sus privatizaciones no lograron frenar en
el corto plazo la inflación. La falta de control fiscal, el enriquecimiento
ilícito de funcionarios del gobierno y el no adoptar medidas para proteger la
moneda nacional le valieron a Brasil el apodo de “El hombre enfermo de América del Sur”, ya que pasaban los
gobiernos y a pesar de las medias económicas, la situación no mejoraba,
generando un aumento de la inflación, la pobreza, la falta de inversión y la
violencia por parte de grupos armados.
Luego de las acusaciones de corrupción, que implicarían al
Presidente Mello, la situación de su administración sería crítica. Ahora con la
acusación de los medios de comunicación, sumado a la falta de apoyo y a los
levantamientos por parte de la población (no levantamiento armados, si no
manifestaciones contra el Presidente) le valieron a Collor de Mello una
investigación judicial, la cual el Presidente intentaría evadir renunciando a
su cargo. Su vicepresidente, Itamar Franco asumiría el máximo cargo.
La experiencia de Collor de Mello en el gobierno duraría tan
solo 2 años, restando 3 para finalizar el mandato. De esta forma Itamar se
haría cargo del país durante los siguientes años hasta concluir el mandato.
Presidencia de Itamar
Franco, la importancia de Cardoso y el Plan Real.
Itamar debió afrontar el primer año de su presidencia una
elevada inflación que parecía sostenerse desde la década del ’60 y que no tenía
solución. Luego de varios cambios en su gabinete económico, el Presidente
nombró como Ministro de Hacienda a Fernando Henrique Cardoso. Este último
jugaría un rol clave para frenar la inflación y lograr hacerle frente a la
crisis económica, ya que lanzaría un plan a largo plazo para depositar a Brasil
en una mejor situación. Este sería conocido como el Plan Real. No solo se
introdujo una nueva moneda en el país, la cual se mantendría hasta la
actualidad si no que también se controlaría la inflación, generando una
política monetaria más estable y reguladora, intentando igualar el valor del
Real al del Dólar estadounidense. Por consiguiente se intentó respaldar al Real
con el crecimiento industrial y un incremento en las exportaciones,
revalorizando la moneda nacional y reduciendo la inflación drásticamente.
La libre entrada de divisas y de capital al país favoreció
al Plan Real brasilero. Varias empresas multinacionales extranjeras lograron
generar una fuerte inversión en el país que a su vez comenzaba a demostrar
estabilidad económica. No solo aumentaron las privatizaciones si no que grandes
corporaciones extranjeras vieron en Brasil un futuro mercado en donde
posicionar sus productos. En cierta medida el amplio mercado brasilero ayudó al
proceso. Con una gran población, las industrias automotrices, petroquímicas,
textiles y metalúrgicas aumentaron en todo el país para hacerle frente a la
creciente demanda interna. Por otro lado la situación económica no solo
comenzaba a ser prospera, si no que también al haber estabilidad política, las
multinacionales extranjeras continuaron llegando a un país que le otorgaba
total libertad a la entrada y salida de capitales.
Por otro lado con Cardoso controlando la economía, se
alcanzó un superávit financiero. El gasto público disminuyó y los ingresos
aumentaron, no solo por las corporaciones extranjera, si no por un mercado
interno que aumentaba con el paso de los años.
Como mencioné anteriormente, el Plan Real era un plan a largo plazo. Se
intentó continuar con el mismo durante los próximos años. Lo cual lo veremos
representado en las elecciones del ’94, cuando el por entonces ministro de
Hacienda de la administración Franco, lanzaría su campaña presidencial, apoyada
por el Presidente de turno y por aquel entonces amigo.
Cardoso al poder.
Uno de los principales luchadores por el regreso de la
democracia, habiendo sido oprimido por los gobiernos de facto, llegando al
punto de tener que irse de su propio país, llevó a cabo una excelente función
como Ministro de Hacienda, y lanzando el Plan Real que habría de ayudar a
Brasil en su situación económica. Apoyado por el Presidente Itamar Franco,
lanzaría su campaña presidencial en el año 1994, obteniendo la victoria y
alcanzado el poder a comienzos de 1995. Sería reelecto, por lo cual su
influencia en el gobierno duraría hasta el año 2003, cuando entregaría el cargo
al sindicalista Luiz Inacio Lula Da Silva.
Durante sus mandatos, el miembro del partido de la Social
Democracia Brasilera, continuaría con las medidas que el Plan Real había
impulsado. El mercado financiera interno se venia manteniendo estable, la
inflación logró ser reducida, y de a poco el Real iba obteniendo mayor
importancia, al punto de llegar a ser una de las monedas más fuertes y estables
de la región.
El ajuste fiscal y control sobre los gastos del Estado se
agudizaría, durante los 8 años que se mantuvo en el gobierno, logró mantener la
fuerte inversión de capitales extranjeros, otorgándoles seguridad jurídica y
económica. La bolsa de valores de Sao Paulo logró ser la más importante de la
región, las fuertes inversiones en la que sería la región más prospera
económicamente del Cono Sur y lugar donde se radicaron importantes empresas
extranjeras, permitiría mejorar las finanzas en el país. La importancia del
Estado de Sao Paulo fue clave durante todos estos años y continúa siéndolo
hasta la actualidad, pero debemos señalar que con Cardoso la mayoría de los
Estados crecieron y obtuvieron beneficios con el ingreso de capitales
extranjeros. No solo aumentó la industria, si no que también el turismo. Se
combatió la inseguridad en las calles y se buscó favorecer a las clases medias
y altas brasileras, para que no haya fugas de capitales, de esta forma el
empresariado brasilero decidió seguir invirtiendo en el país y caso siguiente
acrecentar los ingresos de Brasil.
Los precios se mantuvieron estables, los salarios
aumentaron, no de forma tan considerable, pero generando un incremento en la
demanda, lo cual continuó beneficiando la producción y la industria alcanzó
índices positivos nunca antes conocidos por el país.
El gran auge económico, le permitió a Cardoso mantenerse en
el poder durante 8 años. Motivo por el cual el Congreso habilitó la reelección
presidencial en Brasil, muchos señalan que fue gracias al rol que jugó en la
reconstrucción de la economía brasilera. De todas formas Cardoso llegó a
cumplir con las promesas que durante su función como Ministro de Hacienda se
veían como poco reales e inalcanzables.
Cardoso logró generar una moneda fuerte, un Estado que
obtendría un superávit durante los próximos años, incrementó la inversión
extranjera y la libre entrada de capitales, le otorgó crecimiento en la
industria, generó una clase media brasilera fuerte, aumentó la inversión
interna, generó estrechas relaciones comerciales con la Unión Europea y mismo
dentro del MERCOSUR y le otorgó a Brasil un papel fundamental en el comercio
internacional. Todas las reformas positivas que experimentó Brasil, no se
verían interrumpidas por la llegada al poder de un líder sindical que había
perdido en reiteradas ocasiones las elecciones presidenciales, y que
continuaría con la política económica que dejó su antecesor, demostrando el
compromiso brasilero para con el progreso a largo plazo.
Gobiernos
populares de centroizquierda.
Lula y la llegada de
los Trabalhadores al poder.
Oriundo de Pernambuco, agradece haberse trasladado junto a
su familia a Sao Paulo, donde según él mismo encontraría su rumbo hacia la
política. Con tan solo un diploma como tornero mecánico, título del cual se
siente orgulloso, sin haber avanzado en sus estudios más allá del 6to grado,
Luiz Inácio Lula Da Silva alcanzaría el máximo cargo del Brasil, luchando
durante más de 30 años por los derechos de los trabajadores.
Como hemos visto hasta este momento, Brasil se ha
caracterizado por tener una gran variedad de presidentes, sin embargo entre
ellos destacamos médicos, ingenieros, abogados, intelectuales, militares, entre
otros. A lo mejor sería este motivo, el cual le impidiera a Lula alcanzar la
presidencia de Brasil durante la década de los ’90. El solo hecho de no haber
terminado la escuela, sería uno de los puntos más vulnerables de alguien que
como trabajador, en sus comienzos, no quería saber nada con los sindicatos.
Tras el incentivo de familiares y colegas, Lula ingresa en
el sindicalismo reclamando apoyo hacia el gran sector trabajador brasilero que
no tenía las condiciones adecuadas en relación a la gran labor que
desempeñaban.
De sindicalista a presidente del Partido dos Trabalhadores, comenzaría una larga carrera política
recorriendo todo su país y llevando los ideales de igualdad y lucha contra la
pobreza por todo el territorio.
Derrotado en tres ocasiones, una por Collor de Mello y dos
más por Cardoso, Lula conocería el gran revés que es perder una elección
presidencial. Dentro de su mismo grupo cercano varios se preguntaron si acaso
Lula no debería dejar su lugar como candidato y sugerir a otro compañero, lo
cierto es que su gran valor y lucha lo llevaban a continuar peleando.
Su esfuerzo no sería en vano, como ya mencionamos tildado
como incapaz de ejercer la presidencia debido a su carrera educativa, criticado
por sus discursos de izquierda y temido por la clase media y parte de los
industriales que habían otorgado su voto a Collor de Mello y a Cardoso para
impedirle la presidencia al candidato del PT, Lula tomaría venganza, derrotando
en 2002 al candidato predilecto del saliente presidente Cardoso, el actual
candidato presidencial José Serra.
Símbolo para todos los trabajadores, luchador por la
igualdad en Brasil, una mayor distribución de la riqueza y lo que el mismo
llamaría “Guerra contra la pobreza”,
Lula alcanzaría el lugar que tantas veces se le había negado.
De acuerdo a sus propias palabras “nuestro discurso era muy radical por aquel entonces, el paso de los
años nos permitió llegar más preparados y con mayor experiencia”, Lula
entendería sus derrotadas como una lección para continuar la lucha y
perfeccionar su discurso y modelo.
Más cercano a la centro izquierda, su gobierno introduciría
grandes cambios en cuanto a la pobreza, las relaciones exteriores, el
fortalecimiento de los mecanismos e instituciones latinoamericanas de
cooperación, la brecha entre pobres y ricos y la mala distribución de la
riqueza.
A pesar de las críticas que realizó durante varios años, en
contra del modelo económico de su predecesor Cardoso, Lula mantuvo un modelo
similar al de Cardos, incluso ocupando en su gabinete a empresarios,
financistas y economistas de derecha, motivo por el cual podemos comprender los
beneficios que el gobierno de Lula obtuvo con respecto a la economía. Se redujo
la pobreza, creció el PBI, Brasil atrajo capitales extranjeros, la industria
local creció, el empresariado brasilero se hizo más fuerte, el mercado interno
continuó con su crecimiento sostenido, la inflación se redujo y el comercio
internacional creció fuertemente.
En mi opinión Lula comprendió que no podía cambiar
completamente el modelo económico, por lo cual continuó con la línea de
Cardoso, lo cual lo favoreció ampliamente.
Habiendo mencionado su rol en la política exterior, si bien
conservó las relaciones con Estados Unidos, Lula introdujo un giro en la
diplomacia brasilera. Focalizado más hacia América Latina, intentando crear
mecanismos de relaciones entre los países de la región, dándole importancia al
MERCOSUR, UNASUR, deslegitimando al ALCA, y promoviendo relaciones
multilaterales más fuertes, su lucha por la región es uno de los grandes
legados de su mandato.
A su vez Lula promovía un discurso en donde la agenda Norte
– Sur debía pasar a ser Sur – Sur, en donde Latinoamérica mire para dentro de
si misma, busque mecanismo de autoayuda, reduzca barreras arancelarías y logre
primordiar los productos locales. A su vez se encargó de acercar las relaciones
entre los dos países más importantes de la región, Argentina y Brasil. Sus
relaciones con Néstor Kirchner y Cristina Kirchner, tanto en la región como en
el G – 20 le valdrían el reconociendo de ambos países como un luchador hacia el
acercamiento bilateral. Siempre creyó en el progreso de la región de la mano de
los dos países más importantes del Cono Sur, construyendo lazos más fuertes,
primordiando las relaciones entre ambos y construyendo un comercio bilateral
fuerte.
Amplió los mercados brasileros en el exterior, acercándose a
la ASEAN, construyendo estrechas relaciones con África, vinculándose con países
europeos tales como Suecia, Noruega, Finlandia, entre otros. En parte todas
estas relaciones mencionadas, construyen el modelo de Lula que consiste en
Brasil como uno de los países más importantes del mundo. Con la capacidad de
relacionarse con cada continente, estableciendo acuerdos diplomáticos y
comerciales, demostrando poder a la hora de las disputas y una voz fuerte en
las principales Organizaciones Internacionales. A lo mejor es debido a esto que
Lula luchó desde un comienzo por la inclusión de Brasil dentro de los miembros
permanentes del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, sugiriendo que es
necesario un representantes de Latinoamérica, que representen no solo a la
región si no a los países en vías de desarrollo y a los mercados emergentes.
Lula se encargó de buscar apoyo en China, India, Sudáfrica y Rusia, todos
mercados y economías emergentes, que le posibiliten su deseo, al igual que los
acercamientos diplomáticos con Francia y Alemania para cumplir su objetivo.
Desde sus discursos en el G – 20 ha intentado darle a Brasil
un rol más importante a nivel internacional, demostrando que la potencia de
América del Sur está preparada para afrontar las nuevas temáticas del sistema
internacional.
Defensor de la integración regional y del crecimiento
sudamericano como también mentor de un Brasil maduro y con posibilidades de
adoptar un rol más fuerte en el mundo, Lula llevó al Brasil, en materia de
relaciones exteriores, a un nuevo escenario, que en un futuro no muy lejano
pueda llegar a otorgarle grande réditos a su país como también a la región.
Fome Zero (hambre
cero) fue uno de los puntos fuerte de la presidencia de Lula. La lucha contra
el hambre y la desigualdad comprendía un programa que iba desde subsidios
estatales hasta clases educativas sobre alimentación. Con el apoyo de varios
Organismos Internacionales en Brasil, sumado a la iniciativa de los
gobernadores de cada Estado, Lula logró reducir la pobreza otorgándole a los
sectores más bajos lo que él prometió como un
plato de comida para cada brasilero.
Con el programa se erradicó parte de la pobreza gradual que
poseía Brasil al igual que se intentó fomentar el crecimiento de los sectores
marginados, otorgándoles trabajo a cambio de comida. Con Fome Zero Lula logró un crecimiento en la tasa de alimentación en
Brasil, al igual que redujo el índice de mortalidad infantil, junto a la ya
mencionada reducción de la pobreza del país.
Fome Zero fue
acompañada también por una serie de programas educativos, en donde se garantizaría
el acceso a la educación a todos los jóvenes brasileros. Desde la construcción
de escuelas en los Estados más alejados hasta las becas universitarias, que
incluían becas en el exterior para la formación de profesionales, Lula logró
incrementar el índice de alfabetización en Brasil así como aumentar el número
de jóvenes que terminaron la escuela.
De todas formas los programas de educación alcanzaron menos
beneficios y logros que Fome Zero, a
lo mejor debido a como el mismo Lula señaló, al decir que la pobreza y
principalmente el hambre se pueden combatir en 4 años, pero la educación es un
proyecto a largo plazo, que oscila entre los 15 y 20 años.
Frente a uno de los puntos más difíciles a resolver para
Brasil, encontramos el narcotráfico y los grupos armados. Lula intentó combatir
el narcotráfico, intentando generar agencias nacionales como también
instituciones internacionales que logren erradicar el narcotráfico de toda la
región. Sin embargo estas redes son difíciles de combatir, y es necesario un
cuerpo de inteligencia (servicios de inteligencia, agencias de cooperación
sobre narcotráfico) fuerte para reducir su injerencia en la sociedad.
El gobierno de Lula también se ocupó de fomentar el turismo
en Brasil, remodelando varias ciudades y atracciones turísticas del país para
el turismo internacional. Desde reducir la inseguridad en Rio de Janeiro, para
hacerla una ciudad turística, hasta fomentar el turismo en Natal y Amazonía, la
imagen positiva de Brasil generó un incremento en el turismo, que a su vez le
brinda grandes beneficios económicos a largo plazo para el país.
Por ultimo me gustaría mencionar que Lula introdujo cambios
en cuanto al medio ambiente, reduciendo la tala de árboles en Amazonia,
disminuyendo los niveles de contaminación en Sao Paulo y promoviendo el cuidado
del Río Amazonas, medida que ayuda a preservar la vida silvestre del río y de
toda la región, ya que el río más importante de Sudamérica es una fuete de
riqueza y abastecimiento para muchas personas.
Para finalizar, pero tan solo como anécdota para demostrar
la buena imagen que Lula generó de Brasil en el mundo, la Copa Mundial de la
FIFA 2014 se celebrará en Brasil al igual que los Juegos Olímpicos de 2016.
Esto nos demuestra que Lula logró otorgarle una mejor imagen al mundo,
demostrando que es posible reducir la pobreza, combatir la inseguridad,
combatir el narcotráfico, generando una industria del turismo fuerte y la
posibilidad de albergar grandes encuentros deportivos.
Criticado por su origen y formación, pasó de ser un simple
operario mecánico a ser el sindicalista más importante de Brasil. Conoció la
derrota en más de una oportunidad, pero encontró en ellas el perfeccionamiento
de si mismo y de sus convicciones para continuar luchando por un lugar que
finalmente le fue concedido. Amado por gran parte del país hoy en día,
retirándose de la arena política, por lo menos a nivel interno, Brasil nos
enseñó que en muchas ocasiones la voluntad de cambio vale más que un título,
como dijo el mismo Lula, “Fui criticado
por no tener un diploma, y hoy recibo el diploma más importante de mi vida, el
de presidente de Brasil”, en su discurso inaugural como nuevo Presidente de
Brasil.
Brasil nos demostró que el cambio es posible para un país
que pasó de ser gobernado por una elite totalmente conservadora a ser gobernado
por un sindicalista surgido en los barrios bajos. Brasil parece haber
encontrado su lugar y un camino por el cual transitar, se dejaron de lado
fuertes disputas y prejuicios históricos para avanzar como Nación hacia un futuro
más prospero.
Un país que pasó de ser considerado el Imperio Sudamericano,
con cortes trasladadas desde Europa y con un monarca, al modelo populista de
Vargas, que luchó por mantener la democracia, pero los regímenes dictatoriales
característicos de los ‘70 escribieron en su historia las hojas más nefastas,
hasta que decidieron dejar de lado sus disputas para generar el regreso de la
democracia en los ’80. Sería el “Hombre enfermo de América latina”, sin poder
encontrar su rumbo y sumido en una fuerte crisis económica, encontraría de la
mano de conservadores de derecha y radicales (en cuanto a cambio) de izquierda
la respuesta a sus problemas, para el Progresso
no es necesario el Ordem, si no el
trabajo en conjunto. La continuación de políticas económicas y sociales le
otorgó a Brasil un crecimiento en todos los aspectos, llevándolo a ser en el
siglo XXI uno de los países más importantes de la región.
Aún conserva características de la época positivista y de un
pasado imperialista, su lema ORDEM E PROGRESSO aún continua en su bandera, pero
hoy en día podemos ver los lemas de Igualdad y Progreso, para un país que
sufrió y celebró, enseñándole al mundo y principalmente a la región que hasta
los Estados con mayor población y territorio pueden crecer y progresar, como
una Nación unida e igualitaria.
Dilma Rousseff.
Vencedora en la primera y segunda vuelta de las elecciones
del año 2010, Dilma Rousseff se impuso como la primera presidente mujer de
Brasil. Durante la década de los ’60 y ’70 se opuso fuertemente a la
dictadura. Posicionándose en los movimientos de izquierda opositores a los
gobiernos de facto.
Comenzó su carrera política el Rio Grande do Sul. Sin
embargo alcanzó relevancia Nacional al ser nombrada por el entonces Presidente
de la Nación Luiz Inácio Lula da Silva como Ministra de Energía.
Su desarrollo como Ministra la llevó a ser nombrada por Lula
como Jefa de Gabinete (Ministra da Casa Civil).
Apoyada por el presidente desde sus primeros pasos, el mismo
Lula la incentivó para sucederlo luego de la finalización de su mandato en
enero de 2011. Motivo por el cual desde 2009 emprendió una campaña Nacional
para presentar su candidatura a las elecciones. Recordemos la imposibilidad de
Lula de continuar en la presidencia debido al cumplimiento de 2 mandatos
consecutivos. De esta forma el “delfín” de Lula debió enfrentarse a una primera
vuelta complicada en las elecciones presidenciales de 2010, debiendo ir a
segunda vuelta con el candidato del partido Social Demócrata, José Serra, quien
supo ser el “delfín” del ex presidente Cardoso.
Dilma ganó el ballotage, convirtiéndose en la primera mujer
presidente de Brasil, y continuando la línea de Lula de la mano del Partido dos Trabalhadores. Es interesante ver como Lula perdió 3 elecciones. En 1990
contra Collor de Mello, en 1994 contra Cardoso y en 1998 perdió contra la
reelección de Cardoso.
Sin embargo logró imponerse en 2002 contra Serra (quien
sería derrotado por Dilma en 2010), en 2006 contra Alckim y habiendo fomentado
y apoyado la candidatura de Dilma en 2010 logró ganarle a Serra, aprendiz de
Cardoso. Por lo cual se retira de la política brasilera un hombre que
ha sabido ganar cuanto perdió. Que derrotó al alumno prodigo de quien lo
venciera en dos ocasiones, Cardoso, y logró alcanzar la presidencia en 2003.
Logró ser reelecto y por último se retira dejando su legado y un país prospero
a su aprendiz, Dilma Rousseff, quien no siendo menor detalle, derrotó al
conservador de derecha José Serra.
Características poblacionales de Brasil.
Inmigración
Contemporánea, ¿un factor de atraso o de progreso?
Como hemos visto a lo largo de toda su historia Brasil se ha
caracterizado por tener una inmigración amplia, desde los africanos que eran
traídos como esclavos para trabajar en las colonias portuguesas hasta los
portugueses que se asentaron ejerciendo dominio sobre los nativos. Pero en este
capítulo me dedicaré exclusivamente a mencionar un fenómeno que sería clave
para el crecimiento económico del Brasil y para una fuerte relación con la
segunda potencia más importante del mundo.
¿El milagro japonés en
Brasil?
En primer lugar tenemos que mencionar que fue el milagro
japonés. Luego de la Segunda Guerra Mundial, en donde Japón se había
posicionado como una de las potencias (de echo fue la primer potencia no
europea en ganar una guerra frente a una potencia europea, recordemos le guerra
ruso japonesa de 1905), por lo cual vemos el poder que había logrado consolidar
Japón durante el siglo XIX y XX. Este poder lo traduciría en su ideario
imperialista, saliendo a conquistar territorios del Pacífico y del Sudeste
Asiático, poniendo así en amenaza el control que ejercía Estados Unidos en esta
región del mundo. Luego del conflicto bélico y con las dos bombas atómicas que
Estados Unidos arrojó sobre Hiroshima y Nagasaki, Japón sufriría una fuerte
derrota bélica y política, seguida de una crisis económica sin precedentes en
el país asiático. De esta forma comenzaría una época oscura para el país que
ahora estaría bajo la tutela de los Estados Unidos de América.
La Guerra Fría estaba comenzando a azotar al mundo, por lo
cual muchos países comenzarían una carrera armamentística sin precedentes en la
historia de la humanidad. Muchos pensarían que Japón se uniría a esta
característica de las potencias, pero al estar bajo tutela norteamericana, esto
no sería posible, por lo cual Japón comenzaría un proceso de crecimiento
económico basado en la elaboración de bienes no bélicos, que iban desde
maquinarias pesadas para la elaboración textil hasta una fuerte industria
automotriz que brillaría por los próximos 50 años, llegando incluso a poner en
jaque a las grandes empresas automotrices norteamericanas (recordemos la famosa
crisis de la Ford y General Motors en los años 80, con la fuerte entrada de
vehículos japoneses al amplio mercado norteamericano y mundial). De esta forma
Japón, junto con Alemania que tendría una experiencia similar, sería el país
con mayor crecimiento del mundo, teniendo una economía fuerte, inversiones en
todo el mundo, la Bolsa de Valores mas importantes de Asia, junto con la de
Hong Kong luego del retiro británico de este territorio, y una política
nacional que aseguraba el crecimiento económico constante. Este fenómeno
característico de la historia se lo denomina “el milagro japonés”, aunque
particularmente en mi opinión fundamentada en mi amplio interés y estudio por
este país, de milagro no tiene nada, ya que es de esperarse este tipo de
conductas por parte de una sociedad estructurada que a lo largo de la historia
ha demostrado una superioridad en todos los ámbitos. No es casual que Eric Hobsbawm
haya señalado: “La misma historia nos ha
enseñado que los japoneses son los mejores alumnos de la historia”. Es una
frase un poco capciosa, pero nos permite observar en una frase la visión que
tiene el mundo acerca de Japón.
Varios acuerdos entre el gobierno de Brasil y el de Japón
llevarían a establecer a miles de
familias en el país sudamericano. El flujo de inmigrantes alcanzaría la mayor
suma de japoneses fuera del país, es decir que Brasil acogía a la mayor
comunidad japonesa fuera del Japón. Muchos de ellos se establecerían en la
ciudad de Sao Paulo principalmente. Esta población japonesa que estaba
acostumbrada a las industrias en su país nativo comenzarían a capacitar, debido
a otro mutuo acuerdo entre los gobiernos ya nombrados, a trabajadores
brasileros, permitiéndoles de esta forma estar aptos para el trabajo en las
grandes industrias que el Japón establecería en Brasil bajo la tutela de las
principales entidades japonesas. Es así como la Toyota Motors, Mitsubishi
Motors, Matsushita Electric, Sumitomo Corporation, Itochu Corporation y Sony
encontrarían un mercado muy amplio donde posicionar sus productos,
principalmente debido a la gran población que ostenta Brasil, un país con una
mano de obra barata, un país que les aseguraba estabilidad, debido al acuerdo
entre las naciones y a un país con amplio territorio para establecer
industrias.
El crecimiento económico de Brasil estaría dado en gran
medida por estas industrias antes mencionadas las cuales llevarían a un
desarrollo tecnológico del país que lo hacía sobresalir del resto de América
Latina, que a su vez se traduciría en el crecimiento demográfico y económico de
la ciudad de Sao Paulo, llegando a ser hoy en día la ciudad con mayor población
en Sudamérica y uno de los principales centros económicos y financieros de la
región junto a Buenos Aires( es común referirse a Sao Paulo como el Japón
brasilero, debido a la aglomeración poblacional que posee esta ciudad, lo cual se
traduce en polución, un transito desbordado por la cantidad de automóviles, la
gran cantidad de industrias establecidas en la ciudad muchas japonesas y otras
multinacionales atraídas por el crecimiento y la densidad demográfica estatal).
Con estos conceptos mencionados muchos historiadores hablan del crecimiento
económico que Brasil ha ido desarrollando desde mediados del siglo XX hasta la
actualidad como “el segundo milagro japonés”, que si bien se da en Brasil tiene
un origen japonés, una ideología japonesa, una instrucción japonesa y un
acompañamiento por parte del gobierno japonés y de los casi 2 millones de
japoneses y descendientes japoneses que se encuentran hoy en día en Brasil.
Es importante mencionar que si bien a lo largo del siglo XX
muchos japoneses se han ido radicando en Brasil, desde comienzos de siglo hasta
hoy en día, el cambio de gobiernos los ha perjudicado en varias ocasiones. Por
ejemplo durante el gobierno de Getúlio
Vargas, Brasil le había declarado la Guerra a Japón, por lo cual muchos
japoneses fueron perseguidos durante la época de la Segunda Guerra Mundial. A
su vez durante los años 90 con la crisis inflacional en Brasil muchos
descendientes de japoneses se vieron forzados a emigrar hacía otros lugares del
mundo.
La migración japonesa
en Brasil se puede definir como inusual e inesperada, en donde ya por 1908 y
1910 los contingentes de japoneses llegaban a una región del mundo
completamente diferente a su país de origen, a su cultura y a su forma de
vivir. Muchos comenzarían trabajando en el campo, con el tiempo serían
perseguidos por Vargas debido a las tensiones diplomáticas que acarreaba el
mundo durante la Segunda Guerra Mundial, finalmente las grandes corporaciones y
entidades japonesas se posicionarían en un mercado perfecto para ellos, lo cual
llevaría al inesperado crecimiento en el rubro tecnológico, industrial y
económico de Brasil. Vale aclarar que no todo el crecimiento económico de
Brasil fue dado por las inversiones japonesas, pero fue importante para el
posicionamiento de Brasil como una potencia emergente mundial en la actualidad,
con un alto grado de industrialización y tecnología.
Brasil y el MERCOSUR.
Desde el regreso de la democracia a Brasil, el apoyo a la
constitución de un organismo regional que ayudara al crecimiento y las
relaciones comerciales entre los miembros de la región fue muy grande. Con la
Declaración de Foz de Iguazú entre Argentina y Brasil se abriría paso a la
conformación de un organismo regional que le brindaría grandes beneficios a Brasil.
Recordemos que Sao Paulo es la ciudad más importante de la
región en cuanto a economía y finanzas, por lo cual Brasil aporta un fuerte
punto de poder al Mercado Común del Sur.
Desde la libre circulación de ciertos productos entre los
países hasta los acuerdos entre bloques regionales, el MERCOSUR es muy
criticado por su personería jurídica y por su énfasis en la perspectiva
económica, pero debemos recordar que los organismos tienden a consolidarse con
el tiempo, más en una región que se encuentra en vías de desarrollo.
Brasil ha aportado un fuerte apoyo, a pesar de intentar
solucionar las cuestiones internas con el regreso de la democracia y todo lo
que generó Sarney para el país, a pesar de ir a un paso lento, los diferentes gobiernos brasileros desde
Collor de Mello hasta Cardoso han intentado buscar socios fuertes en el
MERCOSUR.
Recordemos cuando vimos la situación económica en el país y
la inflación, es cierto que frente a estas cuestiones los estados tienden a
primordial la búsqueda de control interno para luego volcarse al plano
internacional, pero jamás se dejó de prestarle importancia al MERCOSUR.
Sería hasta la presidencia de Lula de Silva cuando Brasil
volcara gran parte de su política internacional hacia dentro de la región
buscando mejorar el MERCOSUR y darle apoyo para el beneficio de todos los
miembros, intentando construir un organismo más fuerte y que no sucedan los
problemas que encontramos en otros bloques económicos, donde hay desigualdad
entre los más poderosos y los menos beneficiados.
De esta forma la administración Lula ha buscado mejorar el
organismo y darle igualdad de beneficios a todos sus miembros para el
crecimiento.
Esta es la postura brasilera con respecto al Organismo desde
los años previos a su constitución hasta los tiempos de Lula, momentos en los
cuales hoy por hoy Brasil reclama una mejoría en cuanto a los mecanismos para
solución de disputas entre los miembros de la región.
México y los pasos
previos a la consolidación del Estado – Nación.
Los primeros brotes de insurrección comienzan en 1808, al recibir la
noticia que la Junta Central de Sevilla exigía a las colonias españolas el reconocimiento de su soberanía, el Virrey
Iturrigaray se apoya en el cabildo de la ciudad de México, predominante
criollo, para organizar una junta de gobierno que, como la de Sevilla,
gobernase en nombre de Fernando VII. La facción peninsular vio esta acción como
un intento de separación de España, sustituyendo al Virrey por Pedro de
Garibay.
A principios de 1810, el avance Napoleónico en España produce la caída de
la Junta de Sevilla.
Estas circunstancias constituyen el comienzo de los movimientos libertarios
en toda la América Española. En México, la conspiración de Querétaro encabezada
por el criollo Ignacio Allende, fructifica en el levantamiento dirigido por
Miguel Hidalgo, cura párroco, que involucra en la guerra a las masas de
campesinos indígenas. Hidalgo es
fusilado por los realistas en 1811. El nuevo líder, el cura José María Morelos
proclamó la independencia de la América Mexicana en 1813 y al año siguiente
encabezó la promulgación de la Constitución de Apatzingán. En 1815 Morelos es
condenado a muerte y fusilado por los realistas.
Anteriormente en 1814 se había restablecido el sistema absolutista en
España con el regreso de Fernando VII al trono, esta situación provocó en 1820
un levantamiento liberal encabezado por Rafael del Riego, obligando al Rey a
jurar la Constitución liberal de 1812.
En 1821 el “Plan de Iguala” proclama la independencia y se establece una monarquía
constitucional invitando a ocupar el trono al propio Fernando VII.
Tras 11 años de lucha el Acta de Independencia del Imperio Mexicano fue
firmada en 27 de Septiembre de 1821.
Formación del Estado
Independiente.
En 1822, después de proclamada la independencia, Agustín de Iturbide ocupó
el cargo de Emperador, pero fue derrocado al año siguiente por un golpe de
Estado encabezado por Antonio López de Santa Anna, quien proclamo la república.
Éste hecho fue el inicio de una larga pugna entre dos facciones políticas: los
centralistas y los federalistas.
Santa Anna fue 11 veces presidente de la Republica en períodos
interrumpidos por golpes de Estado. En el contexto de estas circunstancias, la
amenaza del expansionismo de Estados Unidos se convirtió en una dolorosa
realidad en la Guerra de Intervención de 1847-1848, que obligó a México ceder a
los Estados Unidos casi la mitad de su territorio.
Las problemáticas territoriales golpearon fuertemente a México, pero por
otro lado permitieron la conformación del territorio nacional y su
delimitación. Aquí vemos como el territorio mexicano se termina de consolidar.
A su vez, y aquí tenemos otra característica del proceso de consolidación
del Estado – Nación, la población se distribuye a lo largo del territorio. Las
ciudades del interior del país se pueblan, principalmente debido al auge del
campo hacia la ciudad. Así se conformar las ciudades más importantes de los
estados mexicanos.
La bandera mexicana tiene sus comienzos durante esta época. Los símbolos propios,
que caracterizan a México, toman gran auge durante este periodo de la historia,
incentivaban al pueblo, les daba un grado de unidad. Leyendas como las de
Quetzalcóatl y la del águila cazando una serpiente encima de un cactus
(anunciada como un símbolo por los dioses para edificar la ciudad en el lugar
donde encontraran esa imagen) serían otro de los estandartes de esta época.
En la segunda mitad del siglo XIX la política mexicana empieza a tomar un
rumbo firme hacia el federalismo, con La Constitución Liberal de 1857,
formulada por un grupo de liberales civiles encabezado por Benito Juárez. Sin embargo, México tuvo que sufrir una
guerra civil y operar con una guerra internacional, el fallido intento de una
monarquía depositada en un príncipe europeo, Maximiliano de Habsburgo,
patrocinado por Francia. En 1877, al llegar al poder Porfirio Díaz por medios
revolucionarios, impone un dictadura militar que se prolonga por más de 30 años
durante los cuales Díaz logra pacificar el país e inicia un proceso de
crecimiento económico.
La influencia positivista
en México.
Como se menciona más adelante, el surgimiento de una nueva burguesía
industrial, sería significante para esta etapa de la historia. Las elites
mexicanas veían en el Estado una forma de mantenerse en el poder. Buscaban
controlar a la población. Sugerían que había progreso, pero en realidad el
progreso era solo para ellos. El resto de la población estaba sin ningún tipo
de beneficio por parte del sistema económico.
El ideal de liberal en lo económico, conservador en lo político lo podemos
encontrar en México. El modelo exportador benefició al país durante este
periodo, las potencias europeas y Estados Unidos eran grandes comerciantes de
México. Pero el beneficio del comercio era solo para las élites. Por su parte
enunciamos que era conservador en lo político, porque se mantenía un control de
la población y se mantenía en status quo
impuesto por las élites. De esta forma
el Estado se vuelve fuerte, y los intereses de la burguesía se ven representados
en él. Con Porfirio Díaz el orden y la paz fueron los estandartes del país.
Esto ayudaba a la economía del país, en manos de la oligarquía. Estas
características, que las podemos asociar con el Ordem e Progresso en Brasil, demuestran la estabilidad que mantuvo
Díaz, que fomentó la atracción de inversiones extranjeras, que a su vez
permitieron la construcción de las principales vías ferroviarias del país. El porfiriato
mantendría la estabilidad nacional y el crecimiento a nivel interno, llevando a
México a una época dorada.
Durante este período, se manifiesta el crecimiento de manera significativa
luego que Porfirio Díaz llegara al poder por medio de una revolución en 1876 e
impusiera un gobierno dictatorial que logró pacificar el país utilizando por un
lado medidas represivas y por otro una política de conciliación destinada a
servir de estrategia para conseguir la colaboración de sus enemigos políticos.
El crecimiento económico de México en esta parte se apoya de manera
primordial en la exportación de productos mineros y agropecuarios, estos
sectores productivos recibieron grandes aportes de inversores extranjeros,
franceses e ingleses en un principio. Para vincularse luego con el comercio
estadounidense, al punto que a comienzos del siglo XX este constituía más del
60% de la inversión total extranjera.
El considerable aumento del comercio exterior de México favoreció la expansión de la red ferroviaria,
la cual aun cuando estuviera dirigida a servir al comercio exterior, fue el
factor más importante en la creación de la infraestructura nacional de México,
por cuanto permitió se crearan condiciones económicas favorables para el
aumento de trabajadores asalariados y para el surgimiento de una incipiente
burguesía, en forma conjunta con la consolidación de la oligarquía
terrateniente.
La política latifundista en manos de extranjeros y de la élite mexicana
tuvo como consecuencia el despojo del cual fueron objeto los indígenas, pues un
número considerable de las tierras que habían poseído desde tiempos coloniales
fueron declaradas baldías por carecer sus dueños de títulos de propiedad. Hacia
1910 la gran mayoría de familias campesinas mexicanas carecían de tierra y
vivían bajo condiciones de subsistencia en tierras arrendadas, muchas veces las
mismas que habían sido de su propiedad.
Suicidio de las
Oligarquías.
Las tensiones sociales internas creadas en México durante la etapa de
crecimiento hacia afuera constituyen las causas profundas de la Revolución
Mexicana de 1910, dirigida originalmente por un grupo perteneciente a una nueva
clase social enriquecida que se decidió a luchar militarmente en contra de la
prolongada dictadura de Porfirio Díaz y en contra de la oligarquía financiera
en la cual se apoyaba el dictador. La revolución mexicana llegó a convertirse
en un auténtico movimiento polar. Con la actuación de caudillos de extracción
rural.
Al triunfo de la revolución habrían de generarse en México las condiciones
políticas y económicas que llevarían a las importantes transformaciones operadas
en las décadas siguientes.
El suicidio de las oligarquías provocó en México un verdadero cede de la
política por parte de las elites que venían manteniendo un dominio para su
propio beneficio. Si bien los movimientos sociales y políticos provocaron cambios
significativos, los medios de producción seguían sujetos a las oligarquías,
quienes estaban a cargo del comercio internacional y se beneficiaban de las
negociaciones con inversores británicos, franceses y norteamericanos.
La inestabilidad política interna que había quedado como secuela del
proceso revolucionario iniciado en 1910 llevo a Plutarco Elías Calles, último
“jefe máximo de la revolución”, a buscar convertir a México en un “país de
instituciones” donde no fuera necesario el predominio de un “hombre fuerte”.
Calles creó en 1929 el Partido Nacional Revolucionario, luego renombrado como
Partido Revolucionario Institucional, de manera que al incorporar a los
militares revolucionarios que se consideraban merecedores de ocupar puestos
públicos como dirigentes, se permitió la transferencia pacifica del poder
mediante un proceso electoral que ofrecía a sus miembros la posibilidad de
satisfacer sus aspiraciones personales a corto o largo plazo a cambio de
observar una conducta disciplinada y demostrar fidelidad al partido.
Años más tarde, el presidente Lázaro Cárdenas, también militar, empezó a
hacer realidad el proyecto de institucionalizar la política y sentar las bases
del crecimiento económico hacia adentro.
A diferencia de los estados pro fascistas latinoamericanos, el de Cárdenas
adopto una tendencia socialista muy peculiar; manejó el socialismo más como una
estrategia populista que en el sentido estricto del concepto marxista. El
socialismo de Cárdenas se mostró como una corriente opuesta al fascismo, así
como una reacción nacionalista contraria a la violación que hacían las
potencias nazi-fascistas de la soberanía de los pueblos. El Nacionalismo que
caracterizo la política latinoamericana de esta época se manifiesta también en
México como una de las políticas fundamentales del gobierno de
Cárdenas-nacionalizaciones agrarias, petroleras y ferrocarrileras- para apoyar
el desarrollo de la industria manufacturera bajo el modelo de sustitución de
importaciones.
Inicio y
consolidación del PRI: institucionalismo, populismo y corporativismo.
El Partido Nacional Revolucionario surgió con el fin de
poder estabilizar la situación política y social que había en México luego de
la Revolución Mexicana. Intentaba establecer en la cúspide del partido a los veteranos
de la Revolución Mexicana, llegando a conformarse como la institución más
poderosa para alcanzar el poder político.
Se autodenominaría como un partido de masas que representaba
los intereses de los trabajadores luego del gran ascenso social que había.
Queriendo cambiar el antiguo esquema que prevalecía en la
política mexicana, el ascenso de Lázaro
Cárdenas al poder reforzaría el apoyo a las clases obreras. Ahora con el nombre
de Partido de la Revolución Mexicana logra atraer a gran parte de la población
del país, y es así como surgen varios partidos en contra del PRM y de sus
ideales. De esta manera se conforma el primer sistema de partidos en México, en
donde había uno hegemónico y otros partidos menores que en la mayoría de los
casos intentaban formar coaliciones para distribuir los votos en el sector
contrario al PRM. De todas formas eran partidos mínimos, algunos de ideologías
comunistas y otros fascistas, los cuales en el espectro político no poseían un
acercamiento de ideologías. Por lo cual estas alianzas tendían a caer con el
paso del tiempo debido a su origen y diferencia ideológica. Por otra parte el
PRM se consolidaba cada vez más. Debido en parte a que los gobernantes de turno
comenzaron a transformar la realidad del país. Es aquí cuando surgen las
construcciones de las primeras carreteras, las cuales unían los sectores
agrícolas del territorio con las grandes ciudades; se incorporó al Estado como actor de la
explotación de recursos. Ahora no estaban más en manos de potencias extranjeras.
La educación obtuvo grandes innovaciones, se mejoró el sistema educativo y en
infraestructura se aseguró la presencia de escuelas en gran parte del país. Es
importante mencionar a las organizaciones sindicales, que en este momento ven
un apoyo desde el sector político, se puede mencionar a las cooperativas de
trabajadores que se encargaban del transporte publico, ya no estaba mas en
manos de capitales extranjeros. Tal es así que los sindicatos comienzan a tener
un peso importante y un sostén por parte del Estado. Todos estos indicadores
nos demuestran los cambios que introdujo el PRM y la aceptación que tenía
dentro de la sociedad, principalmente de las clases bajas. Las élites durante
este período debieron ceder poder no solo frente a la apertura política que
significó la Revolución Mexicana y el surgimiento de este partido, sino también
en el aspecto económico, donde el Estado comenzó a ocupar un gran rol que antes
estaba solo en manos de las élites.
Luego de la década de los 40, el PRI (que había cambiado su
nombre del PRM al de Partido Revolucionario Institucional) ya había logrado
consolidarse como la institución por excelencia en México. Muchos señalan que
es más adelante (durante los 70, cuando llega un punto en el cual no se logra
distinguir al Estado del PRI) cuando el PRI aparenta ser la única fuerza
política, económica y social en México ejerciendo la función del Estado. Pero
en mi opinión ya es durante mediados de los 40 y principios de los 50 cuando el
rol del PRI queda consolidado.
Ésta consolidación llevó a que por ejemplo México no cayera
en regímenes autoritarios o en regímenes con tendencia fascista o
comunista. A su vez ya no se encontraban los sobrevivientes de la
revolución Mexicana al frente del partido, si no que ahora muchos universitarios
se encontraban dentro del partido, esto permitió un mayor crecimiento
intelectual dentro del partido y evitando que este se torne de carácter
autoritario, que tranquilamente podría haber sido debido al gran poder que
ejercía en todo el país.
El PRI apoyaría en gran parte a las corporaciones. La
mayoría creadas desde el Estado. Estas corporaciones que aglutinaban a la clase
obrera estarían en conjunto con los sindicatos y el poder político que
alcanzarían sería importante. El estado mantendría la unidad Nacional de esta
forma. Tal es así que se puede mencionar el caso de ciudades como Monterrey,
dentro del estado de Nuevo León que antiguamente eran desiertos cercanos a la
frontera con Estados Unidos, y que mediante incentivos estatales muchas corporaciones
se trasladaron hacia aquellos territorios, dándoles trabajo a gran parte de la
población local. De esta forma los sindicatos en determinadas regiones del
interior se hicieron fuertes, llegando a tener a gran parte de la población
dentro de sus filas. Esto provocó, positivamente, la unidad nacional y el apoyo
hacia el Estado, que continuaba en manos de políticos príistas.
En mi opinión es correcto asociar al PRI con el populismo,
fue la institución política y social que agrupó a las clases bajas mexicanas y
les dio la oportunidad de surgir como actores políticos y económicos. Si bien
muchos mencionan a Cárdenas como el artífice del populismo mexicano, creo que
está más relacionado con el PRI que con una figura hegemónica como lo fueron
Perón en Argentina y Vargas en Brasil. El populismo supuso el cambio de modelo
económico, la industrialización del país y el surgimiento de una élite burguesa
industrial, que estaría a cargo de las principales empresas e industrias
mexicanas. Las fuerzas armadas en México también se perfeccionaron y
adquirieron mayor cantidad de soldados, pero todos estos cambios fueron ideados
desde el PRI, cada presidente desde Cárdenas hasta Ernesto Zedillo, pasando por
Ávila Camacho y Díaz Hordaz, tuvo sus características propias, algunos fueron
mas positivos que otros, pero lo que jamás cambió fue la bajada de línea que
hacía el PRI para mantener fuerte al Estado y permitiendo mantener el control
del país. De no haber sido así el PRI no se hubiera mantenido por demasiado
tiempo.
El PRI lograría mantenerse en el gobierno durante más de 70
años, su hegemonía terminaría con la elección de Fox como presidente de la
Nación y la pérdida de quórum dentro del Senado. Pero es innegable que desde
temprana edad, con la revolución Mexicana hasta comienzos del siglo XXI el PRI
ha desplegado un papel hegemónico en la vida social, política y económica de
México. Dándoles trabajo y participación política a las clases obreras,
dándoles apoyo a las corporaciones y principales actores económicos del país,
asegurando la estabilidad política (a pesar de algunos levantamientos y
oposiciones que tuvo que afrontar), fomentando la unidad y crecimiento a nivel
nacional y fundando las bases del sistema político mexicano.
Consolidación del
PRI.
Como hemos visto a lo largo del trabajo, la transición
política en México ha dado lugar al surgimiento de un partido político con un
rol determinante. En la Unidad anterior me ocupé de señalar la transición, la
evolución del Partido Revolucionario Institucional y como este comenzó a
mantener cierta hegemonía en la política mexicana.
Lo cierto es que a partir de este momento mi trabajo se
centra en pos de caracterizar la situación particular de México en torno al
PRI. No es un dato menor, que luego del mandato del militar y miembro del PRN,
Manuel Ávila Camacho, los siguientes nueve presidentes de la Nación hayan sido
miembros del PRI, logrando mantener al partido en el poder durante 70 años.
De esta forma podemos comprender que la evolución política
en México es un caso particular, ya que vamos a observar un sistema democrático
multipartidista, en donde el PRI limita al mismo sistema, influyendo en el
funcionamiento del mismo para lograr mantenerse en el poder.
A su vez, lograr mantenerse en el poder durante 6 décadas,
no le fue una tarea fácil al PRI, más aun con la presión del resto de los
partidos políticos y de una clase media que comenzaba a hacerle frente al
partido más importante del país.
Antes de comenzar la caracterización del proceso mexicano me
gustaría aclarar, que voy a proyectar mi análisis en torno al PRI y no de
manera tan intensa en los diversos mandatos presidenciales, ya que me resulta
interesante puntualizar el rol de este partido político, su evolución y las
cuestiones internas y externas que debió afrontar.
Con Lázaro Cárdenas, México había logrado importantes
reformas agrarias, con fuerte apoyo hacia los sectores menos beneficiados del
país, fomentando una fuerte intervención del Estado, tanto en la economía como
en la política.
Lo cierto es que el PRI lograría un cambio positivo en todas
estas temáticas en los años próximos. Tal es así que la nacionalización de los
ferrocarriles, la creación de trabajos en el sector estatal y el apoyo del PRI
a las clases obreras, aumentó considerablemente. De todas formas, el partido
buscaría generar mayor crecimiento, por lo cual comenzaremos a ver un giro
hacia la industrialización del país. Si bien fuertemente vinculada con el
sector público, la inversión privada también aumentó considerablemente, atrayendo
capitales extranjeros al país.
El PRI había logrado consolidarse en el poder, por lo cual
no nos extraña que con el primer Presidente no militar luego de la Revolución,
se llevaran a cabo las medidas que desde el partido comenzaron a orientarse
hacia una fuerte inversión publica y el sostenimiento de una hegemonía política
en todo el territorio mexicano. Miguel Alemán Valdés sería el Presidente que
llevaría a cabo las políticas promulgadas desde su partido durante este
período.
Durante el período que abarca desde finales de la Segunda
Guerra Mundial hasta comienzos de los años ’50, el PRI llevaría a cabo un
proceso de industrialización del país, acompañado con apoyo a los sectores
trabajadores. Esto no solo le generaría el recelo de la elite mexicana, a quien
no se le otorgó un papel importante en el nuevo proyecto, ya que comenzaban a
perder influencia en la escena política y económica mexicana.
El PRI necesitaba del apoyo de los sectores bajos, por lo
cual para mantener un fuerte vinculo entre ambas partes, fomentó la creación de
puestos de trabajo orientados hacia el sector público. Tal es así que familias
enteras pasaban a depender del sector estatal. Puede ser criticable esta
medida, pero lo cierto es que cientos de familias que nunca habían obtenido un
trabajo digno, con leyes que avalaran sus derechos laborales, ahora comenzaron
a ser respetados, a poseer un salario digno, a tener peso político, lograron
hacer respetar su decisión política y comenzaron a consumir bienes que hasta
entonces no podían, todo esto gracias al accionar del PRI.
Como señalé en la Unidad anterior, es durante este período
donde observamos el crecimiento de diversas ciudades, en donde comienzan a
situarse empresas estatales, al igual que las redes ferroviarias del Estado que
permitían la conexión entre los diversos puntos del país. Guadalajara y Nuevo
León comenzarían a jugar un rol determinante en la industria. Aglomerando a
millones de mexicanos que poseían puestos de trabajo en las empresas estatales
y que consumían los bienes generados por las mismas empresas. Por lo cual vemos
que la creación de sectores industriales a lo largo del país y la posibilidad
de emplear a gran parte de la población, benefició considerablemente a México
durante estos años.
Como contraparte debemos señalar que estamos en un periodo
donde la deuda externa aumentó. Claramente es debido al creciente gasto
público. El tener que mantener un
aparato productivo de semejante envergadura, esto le generó al Estado un
déficit que debió respaldar con los préstamos provenientes del extranjero,
principalmente de Inglaterra en un principio y de Estados Unidos
posteriormente.
De todas formas a comienzos de los años ’50, México se
encontraba en una crisis económica. Podemos señalar que se debía a tres causas.
En primer lugar vamos a encontrar un punto importante que culminaría
rotundamente con el cambio de Presidencia, estamos hablando de la corrupción.
Es cierto que durante la administración de Alemán Valdés gran parte de los
miembros del PRI que se encontraban en el gobierno ejercieron la corrupción
para beneficiarse económicamente. Esto generaría que con el ascenso de Adolfo
Ruiz Cortines se observara un cambio en el interior del partido, ahora aquellos
encargados de formar parte del gobierno eran hombres con una amplia formación
académica y con voluntad de servir al pueblo y no beneficiarse de este. La
corrupción a su vez generó falencias en el sector de la inversión pública. En
diversos casos el dinero destinado a la construcción de calles y remodelación
de edificios públicos tardaría años en llegar, y en muchas ocasiones no
llegaría. Por otro lado el giro de dinero a diversas regiones del país
permitiría el enriquecimiento de los gobernadores locales, que poco invertían
en la industria local, beneficiándose del dinero destinado desde el gobierno
Nacional.
En segundo lugar, el aumento de la deuda generó el comienzo
de la crisis económica. Como mencioné anteriormente, el aumentó de la deuda fue
debido a los fuertes gastos que el Estado realizaba, lo cual complicó la situación
financiera del país. Por último, la devaluación de la moneda nacional y el
aumento de la inflación generaron la fuga de capitales extranjeros que se
habían instalado en el país durante la década del ’40, dejando en una situación
aun más crítica al país.
Por consiguiente, las diversas cuestiones económicas
generaron un cambio político puertas adentro del partido. Los simpatizantes de
Ruiz Cortines comenzaron una fuerte campaña a lo largo del país, fomentando
cambios en la administración pública y un compromiso más fuerte para con el
pueblo. De esta forma el ahora nuevo Presidente de la Nación llevó a cabo una
fuerte política de control burocrático, intentando reducir la corrupción en las
altas y bajas esferas de la administración pública mexicana.
Durante sus primeros años, además de tener que enfrentarse a
una fuerte inflación, fuga de capitales, fallas en la administración pública y
un amplio gasto público, Ruiz Cortines debió enfrentarse a los diversos focos
de resistencia en el país. La mayoría de los gobernantes de los estados que se
habían beneficiado durante la administración de Alemán Valdés, se opusieron a
las políticas públicas de Ruiz Cortines, por lo cual la oposición interna,
recordemos que esta oposición estaba conformada por miembros del PRI que
gobernaban en las distintas regiones del país, le dificultó el mandato al
reformista Cortines.
De todas formas frente a la crisis agraria, debido a la
disminución de la demanda en el mercado internacional, México sufrió un revés
en uno de los sectores más importantes de su economía, estamos hablando del
sector agrario.
Si bien rápidamente esto comenzó a repercutir en la
devaluación de la moneda y en la reducción de la producción, el gobierno lanzó
un plan para reactivar la economía agrícola. Este plan fue exitoso, ya que un
mayor flujo de dinero logró alcanzar la reactivación del sistema, generando
producción para el mercado interno y a su vez destinada al sector externo. Esto
se encuentra vinculado con las relaciones exteriores que el país comenzó a
generar durante los años ’50, vinculadas a relaciones bilaterales más fuertes
con dos países en particular, Estados Unidos y Japón. Si bien es cierto que
estamos en un momento de tensión internacional frente al contexto de
bipolaridad y las relaciones con dos estados de gran jerarquía como los ya
mencionados, México logró reactivar su economía agrícola rápidamente, generando
un mayor crecimiento en el ingreso del Estado.
A su vez se continuó con una política estatal llevada a cabo
por el PRI. Estamos hablando de la industrialización del país. Ya comenzada
durante los años previos, México continuó con fuertes inversiones en el sector
industrial. Rápidamente comenzaremos a ver un notable crecimiento de la
industria petrolera y química dentro del país.
En el aspecto político podemos señalar el voto femenino y el
crecimiento sindical a manos del PRI. Diversas organizaciones sindicales se
alinearon al PRI y no solo se vieron ampliamente beneficiadas si no que también
aumentaron sus lazos y relaciones con el partido político que manejaba el país.
No podemos decir lo mismo del sector ferroviario. Durante
estos años y gran parte de la década del ’60, el sector ferroviario ejercería
una fuerte oposición al gobierno, que en la mayoría de los casos culminaría con
la represión por parte del gobierno. Los salarios de los ferroviarios
disminuyeron y sus intereses no serían escuchados por el PRI, esto se debía a
una maniobra política que parecía estar más relacionado con los intereses del
PRI, que con los diversos gobiernos. La represión comenzaría a ser una
herramienta fuertemente utilizada por el PRI, generando luchas internas dentro
de la sociedad que a su vez aumentarían en un contexto internacional que
comenzaba a suscitarse en una lucha entre el Comunismo y el Capitalismo.
Con el paso de los mandatos presidenciales el PRI continuaba
demostrando su hegemonía. Los partidos de la oposición, si bien articulaban de
buena forma su lucha por llegar a la Presidencia, era prácticamente imposible
que la alcanzaran debido a la fuerte estructura que había desarrollado el PRI
en cada estado del país y debido al liderazgo que ejercía sobre los principales
sindicatos y sobre la clase trabajadora.
Lo cierto es que el PRI logró reforzar su hegemonía, y a su
vez pasó a controlar la amplia mayoría de la sociedad, el sector económico, las
relaciones exteriores y las finanzas del país. Esto se debe a que tal era el
poder que ostentaba, que fácilmente lograba colocar dentro del Ministerio de
Relaciones Exteriores o del Ministerio de Economía a diversos miembros del
partido que expandieran la ideología del PRI. Podemos visualizar que durante
los años ’60 el PRI volcó su principal atención a mejorar la situación
económica del país, continuar con lazos fuertes en dirección a las principales
potencias del mundo, como así también hacia economías emergentes, tales como
las del Sudeste Asiático y la India, que si bien es temprano para comenzar a
hablar de su desarrollo y sus avances en cuanto a industrialización y
tecnología, comienzan a jugar un papel importante dentro de las economías
emergentes, que van a demostrar su posición ya finalizada la Guerra Fría. En mi
opinión creo que México comenzó a ver la posibilidad de ingresar dentro de este
grupo de países. Es decir el poder posicionarse como uno de los futuros países
que intenten buscar cercanía hacia los países centrales. Vuelvo a repetir, lo
ya mencionado con el caso de los países del Sudeste Asiático, es temprano para
hablar de desarrollo industrial, del superávit comercial y demás factores, pero
desde los movimientos diplomáticos podemos comprender que México buscaba forjar
alianzas que en un futuro le pudieran ayudar a mejorar su situación en el plano
internacional.
Las obras públicas continuaron en gran parte del país.
Diversas rutas que unieran a los principales centros urbanos e industriales,
como a su vez las ciudades portuarias, se construyeron durante esta época. El
interés por conectar al país y mejorar los vínculos entre ciudades, que
demostraban la búsqueda del PRI por fortalecer su poder y acrecentar el
comercio interno, nos señala la importancia que le brinda México a las obras
públicas. Lo mismo podemos decir de la construcción de escuelas. No solo el
numero de escuelas en el país logró duplicarse si no que también se
implementaron reformas en el sistema educativo, intentando brindarle educación
a una sociedad que algunas décadas atrás demostraba tener un alto índice de
analfabetismo.
La gran cantidad de escuelas nacionales a su vez nos
señalaba la búsqueda del gobierno de intentar alcanzar la educación a los
sectores más bajos del país. Para todos aquellos opositores del PRI que señalan
que este partido no ha hecho otra cosa que utilizar a las clases menos
beneficiadas para obtener rédito económico y mantenerse en el poder, se debe
señalar que fue durante esta época cuando se construyeron la mayor cantidad de
escuelas y bibliotecas públicas. El PRI ha buscado desde los ’60 hasta mediados
de los ’80 llevar a cabo un fuerte plan de educación nacional. Esta política
pública no puede ser tildada como negativa, ya que la educación es la base de
los pueblos, y una pieza fundamental de la vida democrática dentro de un Estado
independiente.
La nacionalización de los ferrocarriles fue un punto
determinante para México, principalmente al obtener el control estatal del
medio de transporte de mercancías y pasajeros más importante del país. Sin
embargo aún más importante fue la nacionalización de la industria eléctrica. A
partir de este momento, el Estado pasó a administrar el sistema de energía
eléctrico de todo el país, llevando a cabo un compromiso para con la mejoría
del sistema, a pesar de la diferencia en cuanto a desarrollo tecnológico con
las empresas europeas, pero buscando siempre el beneficio de todos los
mexicanos.
Como ya hemos mencionado, durante fines de los años ’50 y
comienzos de los ’60 se comenzó a utilizar la represión frente a los
levantamientos y protestas sociales. Es importante mencionar La Matanza de la
Plaza de las Tres Culturas. Esta matanza como bien lo señala su título, formó uno
de los movimientos de represión más severos ejercidos por el gobierno mexicano
para frenar las protestas de diversos sectores sociales opositores a las
medidas llevadas a cabo por el PRI. Maestros, estudiantes universitarios,
militantes de partidos opositores, campesinos y trabajadores de diversos rubros
comenzaron a ejercer movimientos de protesta frente a lo que consideraban una dictadura por parte del partido
oficialista.
Lo cierto es que los levantamientos comenzados por diversos
grupos de estudiantes universitarios se extendieron por diversos sectores del
país, sin embargo el movimiento más importante fue cuando gran parte de los
manifestantes llegaron a la Plaza del Zócalo, en el Distrito Federal. El
gobierno respondió con la represión de la policía y las fuerzas armadas. Si
bien es un hecho muy controversial en la actualidad ya que gran parte de la
información real se ha ocultado y no se conocen las verdaderas cifras de
muertos y castigados por los militares, la matanza fue verdaderamente un hito en
la historia mexicana. Ya sea porque marcó una época o porque demostraría que a
pesar de no convivir con regimenes militares como en otros países de la región,
el uso de la fuerza sobre la sociedad, los actos de represión y la violencia
sobre manifestantes, incluye a México dentro de un periodo caracterizado por la
violencia y la represión. No debemos olvidar que los tanques del ejército
entraron en las universidades, lugares como la UNAM (Universidad Nacional
Autónoma de México) sufrieron los ataques de las Fuerzas Armadas, al igual que
los estudiantes sufrieron una fuerte represión por parte de los militares. Si
bien el ejército retomó el control del Zócalo, demostrando su poderío y
firmeza, el PRI sufriría fuertes críticas, no solo por parte de varios sectores
de la sociedad mexicana opositores al gobierno, si no también por varios
miembros moderados dentro de las líneas del PRI. A su vez cabe señalar que
parte de la comunidad internacional se mostró en contra de las medidas llevadas
a cabo por el gobierno, de todos modos al visualizar el periodo en el cual nos
encontramos en el contexto internacional, podemos comprender que las
repercusiones no fueron vistas y criticadas tan fuertemente como lo serían para
nosotros en el siglo XXI.
Este tipo de hechos se repetiría a lo largo de los años,
siendo una característica del mandato de Gustavo Díaz Ordaz. Este autoritarismo
sería ejercido debido a la constante demanda de apertura democrática ejercida
por una parte de la ciudadanía.
Por otro lado me resulta interesante mencionar que a este
periodo se lo conoce como “Guerra Sucia”. En parte esta clasificación es
emitida para diferenciar la represión hacia la ciudadanía en México, con
respecto a las dictaduras militares en otros países de América Latina como por
ejemplo Argentina, Brasil o Chile. Si bien no alcanzó la intensidad que
evidenciamos en los países mencionados, ni tampoco giró en torno a un fuerte
contenido ideológico, no lo podemos dejar de lado, ya que los movimientos
estudiantiles en petición de apertura democrática y las manifestaciones de
sectores y partidos políticos con afinidad al comunismo fueron altamente
reprimidos, dejando muertos, desaparecidos y ciudadanos torturados por un
régimen democrático que ejercía la violencia y el autoritarismo mediante el uso
de la fuerza.
Este tipo de hechos se repetiría durante esta década, dando
inicio a la conformación de grupos guerrilleros y grupos de resistencia
opositores al PRI y a su desarrollo político. De todas formas como veremos en
la próxima Unidad, durante los años próximos evidenciaremos un cambio por parte
del PRI para contener a estos sectores y comenzar a dejar de lado el uso de la
fuerza sobre la ciudadanía. Las reformas electorales van a jugar un papel
fundamental y el proceso que iría desde 1970 hasta 1982 consolidaría una nueva
forma de gobierno por parte del PRI.
El Desarrollismo
en México.
El Desarrollismo en México llegó de la mano del PRI. Al
igual que la mayoría de los modelos económicos que se implementaron en el país
durante la segunda mitad del siglo XX. Cuando hablemos del ideal desarrollista
en México vamos a encontrar un fuerte impulso por parte del PRI para llevar a
cabo la segunda industrialización del país.
Como vimos durante los años de Cárdenas, el país comenzó a
iniciar un proceso de industrialización. Si bien fue temprano durante aquellos
años, se abocó a la industria liviana, y como un complemento del sector
agrícola. Con esto no quiero decir que la industrialización en México fue
ínfima y que funcionaba para abastecer al sector agrario, si no que las
ganancias provenientes del sector agrario se utilizaban como inversión en la
industria y a su vez la industria estaba vinculada económicamente a la
agricultura, ya que México tardaría en comenzar a dejar de lado la producción
agrícola para centrarse en la industria.
El proceso industrial continuó durante los años ‘50 y ‘60, a
medida que el PRI comenzaba a centrar sus intereses en torno a la industria,
sin desproteger al sector agrario. Por otro lado evidenciamos un crecimiento en
la industria, ya sea en la inversión, producción y en los beneficios y réditos
emanados de esta. Sin embargo en los años próximos México comenzó a centrarse
en el desarrollo de la industria petrolera, química y eléctrica. Este proceso
no llegaría a completarse del todo, ni tampoco alcanzaría los altos niveles de
los países centrales, sin embargo junto con Argentina y Brasil sería uno de los
modelos más significantes de América Latina.
Los avances en la industria petrolera quizás sean los más
importantes en conjunto con los de la industria eléctrica. México logró ejercer
un control estatal de estos sectores, anteriormente en manos del sector
privado, generando un gran gasto por parte del Estado para poder solventar el
funcionamiento y desarrollo de estas industrias. De todas formas no se intentó
reemplazar al modelo industrial por el agrario, si no que se buscaba de a poco
lograr centrar la producción del país en la industria y no ser completamente
dependientes de la producción agrícola. En conjunto a estas medidas comienza a
surgir la diferenciación entre países desarrollados y subdesarrollados, a
partir de este momento la agenda Norte – Sur se acentuó, principalmente si nos
focalizamos en la visión de los países latinoamericanos.
Generalmente la visión por parte de estos países, y en lo
que nos incumbe, de México, era poder revertir el modelo económico que situaba
al país dentro de los países dependientes de los estados desarrollados
industrialmente que ejercían una fuerte presión para continuar con los modelos
agrícolas en los países subdesarrollados. Las relaciones entre países centro y
países periferia, era completamente positiva para los países centro que
aprovechaban sus ventajas económicas y productivas para acaparar los mercados
de los países menos desarrollados, y siendo un numero mas reducido que los
países productores de materias primas, lograban repartirse la comercialización
de productos manufacturados en los países periferia.
El lograr la industrialización de varios sectores que hasta
ese momento se abocaban exclusivamente a la producción de materias primas,
generaría una mejor relación en la balanza del desarrollo entre los países, a
su vez otorgándole prosperidad económica y seguridad, o mejor dicho estabilidad
política a los países periferia, que generalmente tendían a asociar las crisis
políticas que sufrían con las problemáticas para el crecimiento y desarrollo
económico.
El subdesarrollo al cual estaba sometido México le generó la
búsqueda de una segunda industrialización. Esta misma se caracterizaría, si la
relacionamos al contexto político, con la influencia del PRI, lo cual nos
otorga una perspectiva única en relación a lo ocurrido en otros países. Si
entendemos el fuerte convencimiento que sentía el PRI para con el
Desarrollismo, y teniendo en cuenta que dominaba fuertemente las decisiones
políticas y económicas en México, la lucha por llevar a cabo este modelo le
sería más factible y ligera que en otros estados independientes donde los
diversos partidos políticos, sectores sociales, economistas y académicos
debatían acerca si el modelo era sustentable o no. Por lo cual, en mi opinión
el PRI facilitó el Desarrollismo en México, si bien se extendió hasta fines de
los años ’70, debemos tener en claro la importancia que le otorgaba el partido
más importante del país a este modelo.
Si bien durante la evolución del PRI, hemos señalado los
procesos políticos y económicos, situando en determinados casos que llegó a ser
el gobierno, la política en su totalidad y el Estado, podemos señalar, bajo mi
criterio, el cual fundamento en las líneas que he desarrollado en esta ultima
caracterización, que el Desarrollismo en México fue planeado, ejecutado y
controlado por el Partido Revolucionario Institucional.
Reformas
electorales, reformas en el PRI.
Con respecto al título quiero aclarar que las reformas
electorales que toman lugar durante este período son reformas que van a
repercutir en el PRI, cambiando la visión y el rol que tenía para con la
política y el manejo del país. No solo vamos a observar reformas al interior
del partido, si no que varias medidas iniciadas por parte de la sociedad y de a
poco dentro del PRI, comienzan a cambiar las bases del mismo en un período de
transición tanto a nivel interno como externo.
Por otro lado debemos tener en cuenta que cualquier tipo de
cambio ya sea en el ámbito económico, político o social repercutía directamente
en el PRI y en su control hegemónico. Por lo cual varias de estas reformas van
a tener efectos en el principal actor político y económico de México.
Las reformas básicamente las podemos ubicar en tres grupos.
En primer lugar las reformas electorales. En segundo lugar las reformas de
inclusión política y por última las reformas del PRI.
Cuando hablamos de reformas electorales hacemos referencia
al acceso que van a tener los partidos políticos de la oposición al Poder
Legislativo. Gran parte de la articulación del PRI no solo se encontraba en los
diversos estados del país, si no que también en el Parlamento mexicano. Gran
parte de las leyes y medidas llevadas a cabo por el gobierno eran abaladas y
autorizadas por el Poder Legislativo. Dentro del mismo podíamos encontrar una
amplia mayoría del PRI, y donde no solo había escasez de diversidad, es decir
de diversos partidos políticos no asociados al PRI, si no que a su vez la
influencia de estos era mínima, no pudiendo contrarrestar las decisiones del
PRI como tampoco teniendo capacidad de promulgar propuestas distintas a las del
Partido Revolucionario Institucional.
De esta manera comenzamos a ver la entrada en el Parlamento
de diversos miembros de partidos opositores. Lo cual si bien todavía no podía
hacerle frente al PRI sería un comienzo que aceleraría el quiebre interno del
PRI. Las reformas legislativas no se darían con tanta facilidad, estamos
hablando de un proceso que conllevó 8 años, es decir se inició en un mandato
presidencial y culminó a mediados del
siguiente. Debemos tener en claro, que lo mismo ocurrió con las reformas de
inclusión en el gobierno. Mientras el PRI comenzaba a generar una apertura
hacia el sector opositor universitario, todavía encontramos levantamientos y
reclamos por parte de universitarios en Monterrey y el Distrito Federal. Aunque
es durante este periodo que toma lugar la inclusión de gran parte de los
universitarios de la UNAM dentro del gobierno. Una gran mayoría ocupó cargos
burocráticos en la administración pública, así como otros se ocuparon de formar
parte del equipo de economistas que harían frente a la crisis económica interna
que se profundizaría aún más con la Crisis del Petróleo.
El hecho que varios egresados universitarios pudieran
acceder a cargos públicos y formar parte del gobierno nacional demuestra cierta
apertura por parte del PRI hacia los sectores que se habían mantenido
aglutinados en la oposición anteriormente.
México aun se encontraba bajo control del PRI. De todas
formas es durante este periodo donde vamos a encontrar el inicio de las
reformas internas del partido. Vamos a ver un sector dentro del mismo partido
que comienza a cuestionar la corrupción que ejercía el partido en el gobierno
nacional, lo cual repercutía al país. A su vez la mala administración pública,
sumado al aumento de la misma, es decir el gran flujo de empleados públicos que
mantenía el Estado, perjudicaba la economía del país, manteniéndolo en un
déficit presupuestario constante. Por otro lado para solventar y mantener este
aparato gubernamental era necesario financiamiento. Como podemos imaginar,
parte del dinero utilizado para financiar el gasto público provenía de los préstamos
del extranjero, lo cual nos indica que la deuda externa creció
considerablemente en este período.
Estos reformistas intentaban tanto el beneficio de México
como un beneficio para el PRI, entendiéndolo como un cambio en los métodos
administrativos y burocráticos que venia llevando a cabo y que repercutían
negativamente tanto en el partido como en el país.
Como veremos a lo largo de los años ’80 esta división dentro
del PRI queda acentuada y va a preparar el escenario político para el cambio de
poder político en México.
En cuanto al plano económico vamos a encontrar una fuerte
crisis dada en primer lugar por como ya mencionamos el elevado gasto público.
Este gasto debía ser afrontado con el ingreso de dinero proveniente de la deuda
externa, lo cual continuaba destinando gran parte del dinero entrante al país
hacia el sector estatal y más específicamente hacia la administración, no la
innovación ni la inversión industrial. Se podría decir que nos encontramos en
el final del Milagro Mexicano, sin embargo este final no se da por la caída del
mismo sistema si no por los factores que estamos mencionando y por la crisis
internacional. En cuanto a las cuestiones internas la moneda se vio devaluada
en varias ocasiones, la inflación aumentaba al mismo tiempo que los salarios
reales de los trabajadores no alcanzaban para cubrir los precios elevados de
los productos. La demanda agregada se vio fuertemente afectada y el gobierno no
destinaba las medidas necesarias ni la totalidad de su capacidad financiera y
administrativa a solucionar estos tópicos.
Si nos referimos a la crisis internacional, debemos
desarrollar, por lo menos brevemente, la Crisis de Petróleo del año 1973. Para
aquel entonces luego de la Guerra del Yom Kippur, los principales países de la
OPEP (Organización de Países Exportadores de Petróleo), y cuando digo
principales hago referencia a los países árabes, ya que fueron quienes
decidieron cortar el flujo de petróleo hacia aquellos países occidentales que
habían apoyado en la contienda a Israel. Claramente en un mundo
industrializado, donde los automóviles fueron uno de los medios de transporte
más importantes y multitudinarios, como también los aviones comerciales que a
su vez necesitaban petróleo, la restringida exportación de petróleo hacia los
países centrales supuso una fuerte crisis económica que se acrecentó
rápidamente con el aumento de la inflación y un déficit en las balanzas
comerciales de las principales economías del mundo.
Lo cierto es que afectando a Estados Unidos y a los
principales países europeos, esto repercutió en los países que se vinculaban
económicamente con estos. Tal es el caso de México. Viéndose reducidas las
exportaciones hacia esos países y a su vez viéndose reducidas las importaciones
de petróleo debido a la crisis, México afrontó un serio conflicto económico.
Teniendo duras repercusiones en la economía mexicana, esto
no hizo otra cosa que profundizar la recesión, aumentar la inflación y
acrecentar la crisis energética que México había comenzado a sufrir.
Si bien durante un momento en los primeros tiempos de la
Crisis del Petróleo, México creyó verse beneficiado debido a su posibilidad de
exportar petróleo hacia las economías mas importantes del mundo, pudiendo
generar un alto ingreso, rápidamente su ineficiencia en este rubro, y el fuerte
control de los países árabes, experimentados y cautelosos, le valió a México un
revés del cual no podría recuperarse en el corto plazo.
En el plano social los levantamientos continuaron, por lo
cual la represión continuó. Es cierto que no de forma tan aterradora como lo
fue durante la década anterior, sin embargo la llamada Guerra Sucia siguió
sacudiendo a la sociedad mexicana y en parte complicó al gobierno debido a la
convulsión social.
Durante este período que hemos caracterizado, encontramos
las presidencias de Luis Echeverría Álvarez y José López Portillo. Ambos
miembros del PRI.
Regímenes
Autoritarios.
Durante fines de los años ’60 y comienzos de los ’70 vamos a
visualizar en gran parte de América Latina la llegada al poder de los Regimenes
Autoritarios.
Las Fuerzas Armadas se autoproclamaban como legitimas
defensoras de la Nación y representantes de los intereses del pueblo que no
podía transmitir los mismos a través de los mecanismos democráticos
convencionales. Esta visión la podemos combinar con el uso de la fuerza, la
violencia generalizada y la lucha armada llevada a cabo por los gobiernos de
facto para controlar el ingreso del comunismo a sus respectivos estados
independientes. Gran parte del rol que jugaron las Fuerzas Armadas en este
periodo lo vimos cuando analizamos el caso brasilero. De todas formas de
acuerdo a lo analizado en clase me pareció apropiado mencionar este proceso
común en la región y su caso particular en México.
Si bien se ha señalado y desarrollado la Guerra Sucia, la
represión militar contra los manifestantes y ciudadanos mexicanos y el rol de
la Fuerzas Armadas en México comandadas por el PRI. Considero, bajo mis propias
convicciones que no vamos a encontrar Gobiernos y Procesos Militares en México durante
este periodo. En primer lugar porque no podemos compararlo con la intensidad
que alcanzaron y el peso estructural que tuvo en otros países. Luego porque
encontramos en el gobierno líderes democráticos, resultantes de la interacción
en un sistema político que puede ser completamente criticable, caracterizado
como una dictadura por parte del PRI y todo lo que se quiera y desee añadir,
pero la interacción y desarrollo democrático existió. No podemos mentir sobre
la realidad de aquel momento. Como señalé al comienzo del trabajo en lo que
compete a México, el PRI generó tal mecanismo que la entrada del comunismo y el
surgimiento de las Fuerzas Armadas como un actor político primario para
contrarrestar los grupos subversivos en el escenario mexicano no alcanzaron
trascendencia. Sí encontramos grupos opositores comunistas, limitados por el
PRI. Sí encontramos militares reprimiendo ciudadanos, pero no como actores
principales de un proceso, debido a que como ya se mencionó el actor
fundamental que manipuló al país hasta el año 2000 va a ser el Partido
Revolucionario Institucional.
Por otro lado me gustaría aclarar que la lucha armada entre
ambas facciones, sector militar y sector de la resistencia popular, no se dio
en un nivel determinado para poder considerarlo como el punto central del
escenario social y político mexicano. Si no que encontramos a un partido
político que controla ambos sectores, que se impone por sobre militares y
grupos opositores.
Por último creo que no podemos dejar de lado la convulsión
social generada durante este periodo, la relación con los sectores de izquierda
opositores al sistema y los sectores militares que reprimieron a los mismos,
sin embargo no podemos caer en la generalización de mencionar que en México se
vivió una dictadura militar con represión constante, ataques armados y control
ilegitimo del poder por parte de sectores no vinculados verdaderamente a la
democracia. Como conclusión, el caso mexicano fue completamente diferente. Sea
aceptado o no por las diversas opiniones, el Partido Revolucionario
Institucional controló la situación social y política en México durante una
época peculiar para el resto de la región. Obstaculizó la entrada del comunismo
al país y manipuló a las Fuerzas Armadas manteniendo si se quiere decir un autoritarismo
extremo, pero continuando con la vida democrática y legal que generó y mantuvo
desde 1930.
El camino hacia el
Neoliberalismo.
Habiendo heredado una de las crisis económicas más fuertes
que sacudió a México durante el siglo XX, el PRI debería llevar a cabo reformas
estructurales en la economía, política y a su vez afrontar una transición
democrática que cada vez era mas fuerte. De todos modos en cuanto a este ultimo
punto, debemos señalar un acontecimiento particular.
Cuauhtémoc Lázaro Cárdenas Solórzano, un político que comenzó a obtener
gran popularidad en la sociedad mexicana nos representa la transición política
que experimentamos durante los años ’80. Considerado como un líder de
izquierda, defensor de un fuerte control del Estado en la economía, promulgador
de las políticas sociales a gran escala y un luchador opositor al príismo, Cárdenas llegó al alcanzar un
alto grado de influencia en la política, que mantiene hasta la actualidad.
Durante las elecciones de 1988, su ventaja frente a los candidatos del resto de
los partidos era contundente. En varios estados ya se lo proclamaba como
vencedor, dando inicio a un cambio en la política mexicana, debido al ascenso
de un político orientado hacia el comunismo y la derrota del PRI por primera
vez desde su conformación. De todas formas debido a hechos todavía misteriosos,
el gobierno de Miguel de la Madrid operó para que Cárdenas no llegara a la
Presidencia. En principio se acusó una caída del sistema a cargo del recuento
de votos, sin embargo el fraude, y la desaparición de los votos en varios
estados del país, pertenecientes a Cárdenas le imposibilitó a este alcanzar la
Presidencia.
Como podemos observar, no solo los partidos políticos se mostraron a
favor del cambio gubernamental si no que también la población había hecho
llegar su pedido mediante el sufragio. Sien embargo el PRI todavía mantenía el
control en gran parte del territorio mexicano, pudiendo manipular elecciones,
colocar presidentes a su gusto y obteniendo las gobernaciones de casi todos los
estados.
En el plano económico, la inflación fue un duro golpe para el PRI.
Catalogada como una inflación estructural, de la cual no se podía salir y
dificultaba el crecimiento del país, el PRI intentaría atraer capitales
extranjeros para reactivar la economía, al igual que devaluar la moneda, que
como podemos imaginarnos, en estos años sufrió la peor devaluación de toda la
historia. La inflación repercutía directamente en los precios, al mismo tiempo
que la emisión de moneda nacional no se equiparaba con la escasa producción,
que se encontraba en su mayoría, a manos de las empresas e industrias
gubernamentales. El PRI intentaría lanzar planes de contención económica. Entre
las medidas más importantes encontraríamos los subsidios para los consumidores,
el acuerdo con los productores de no elevar los precios durante largos
periodos, tales como un año o año y medio, aumento de los salarios, entre
otras. De todas formas si bien el salario nominal de las personas aumentaba, el
salario real no lograba alcanzar a cubrir los productos básicos y esenciales.
Lo cual continuó repercutiendo en la economía y aumentando aún más la
inflación. Por otro lado la inversión sufrió la caída mas grave que se pueda
registrar en la historia de México. No solo los ciudadanos comunes dejaron de
invertir en negocios propios, pequeñas empresas y en ahorros bancarios, si no
que gran parte del empresariado mexicano comenzó a retirar sus capitales del
país, por lo cual comprendemos que la fuga de capitales agudizó la crisis
económica.
El entonces Presidente de la Nación debió afrontar uno de los sucesos más
trágicos de México. Estamos hablando del Terremoto de Ciudad de México del año
1985, el cual alcanzó los 8.5 grados de intensidad en la escala de Richter.
Este hecho nefasto para el país a su vez demostró la inoperancia del gobierno
de turno para afrontar cuestiones de esta envergadura. Por una parte el
gobierno se negó a recibir ayuda del exterior, lo cual nos señala que debería
tener confianza en si mismos para poder resolver esta cuestión a mano propia.
Por otro lado se negó a movilizar al ejército para ayudar a las victimas. Por
ultimo redujo la cifra de muertos y heridos, cambiando las cifras a números 5
veces reducidos del valor real. Todas estas medidas demostraron los errores de
la administración la Madrid, su falta de compromiso con el pueblo, que debió
salir por su cuenta a rescatar y ayudar a los ciudadanos del Distrito Federal.
Si bien es un hecho histórico en México, en lo que a nosotros nos compete nos señala
el pésimo rol que desempeño el PRI.
De todas formas retomando el ámbito económico, de la Madrid comenzó la
transición hacia el neoliberalismo en México. Principalmente podemos vincular
la relación con el FMI y las medidas que este mismo organismo le recomendó al
gobierno de la Madrid para contrarrestar la grave situación económica que
habíamos mencionado. En primer lugar se intentó reformar el aparato burocrático
público, reducir la corrupción en la administración pública y lograr una mayor
eficiencia en el desempeño de funcionarios. En segundo lugar se intentó reducir
el gasto público. Reducir las grandes emisiones de dinero que desprendía el
gasto público y que le generaba un déficit de gran escala al Estado.
Sin embargo a pesar de las mejorías que demostraron estas medidas, la
inflación volvió a sus altos niveles, lo cual se agudizó aun más con el
terremoto de la Ciudad de México.
Las privatizaciones de la gran cantidad de empresas públicas pareció una
salida a la crisis económica. Esto tomó
lugar junto con un recorte aun mayor del presupuesto y del gasto público. La
apertura económica le proporcionó a México la tan esperada entrada al GATT (General Agreement on
Tariffs and Trade).
Con la caída de la bolsa de valores de México, el aumento de la inflación y el descontento por parte de la población para con el PRI, teniendo en cuenta las mencionadas anteriormente elecciones del año 1988, el gobierno de la Madrid llevó a cabo el Pacto de Solidaridad Económica. Este plan sería continuado por su sucesor en la Presidencia de la Nación, Carlos Salinas. Que como ya mencionamos, llegó al poder luego de la artimaña política llevada a cabo por el PRI para frenar la posible victoria de Cárdenas. A su vez, menciono que Salinas pertenecía al Partido Revolucionario Institucional.
No solo la reducción de las barreras arancelarias que alcanzó México gracias al GATT incentivaron a los gobiernos de turno a llevar una apertura hacia el neoliberalismo, si no que también le permitieron a México proyectar los futuros acuerdos económicos con Estados Unidos, Canadá, la Unión Europea y varios países de América Latina.
Durante la administración Salinas se continuó con el Programa de Solidaridad Económica, en un intento por abrir la economía al mercado exterior y la inversión extranjera. Al mismo tiempo que se frenaba el aumento de los precios y se reactivaba la producción. A su vez durante su administración se continuó con la firma de tratados internacionales para mejorar la economía local, entre ellos el más significante es el Tratado de Libre Comercio de América del Norte. Por otro lado continuaron las privatizaciones de las empresas estatales, generando un fuerte ingreso de divisas al país con la posibilidad de sustentar la moneda local y frenar la inflación. También se logró frenar la devaluación de la moneda que había sido característica de los años anteriores.
Las políticas económicas implementadas durante la administración salinista fueron muy favorables para la recuperación económica de México. Se logró reducir a gran escala la inflación, fortalecer la moneda nacional, posibilitar la libre entrada de capitales extranjeros y se redujo fuertemente la pobreza, con el Programa de Solidaridad, logrando integrar a las clases bajas al sistema económico que comenzaba a crear el gobierno y rescatándolos de la pobreza.
La privatización de la Banca Nacional y la rápida entrada al capitalismo, generarían la futura crisis económica de fines de la administración Salinas. Se culparía al rápido efecto de las privatizaciones y la falta de regulación por parte del Estado, sumado al fuerte gasto público que generó Salinas culminando su mandato para dejar una buena imagen para el PRI.
En cuanto al North American Free Trade Agreement podemos señalar que fue el principal
tratado al cual se encomendó México durante este periodo neoliberal.
Básicamente la reducción de barreras arancelarias entre México, Canadá y los
Estados Unidos conllevaría al crecimiento regional y a la posibilidad de
articular como bloque económico, generando ingresos para todos los países
integrantes del Tratado. En su momento fue aplaudido en México, claramente por
el momento político y económico por el cual atravesaba el país, sin embargo a
largo plazo se comenzaron a ver fisuras dentro del mismo, tales como el
crecimiento desigual y la variación de ingresos provenientes del comercio con
otros bloques que claramente favorecían a Estados Unidos y Canadá. Por otra
parte el Tratado fue acusado de una manipulación norteamericana. Se cree que
Estados Unidos había comenzado a ver en la conformación de la Unión Europea la
posibilidad de generar un bloque regional propio, teniendo en cuenta la
importancia en el futuro que alcanzarían los bloques económicos. Por lo cual el
NAFTA no buscaba el crecimiento de los miembros, principalmente de los menos
desarrollados o mejor dicho del menos desarrollado, si no la posibilidad para
Estados Unidos de beneficiarse del comercio con otros bloques económicos tales
como la Unión Europea y la ASEAN, lo cual señalaba un mayor ingreso en la
balanza comercial que si lo hiciera por su propia cuenta y de forma bilateral
con cada país de Europa no sería tan ventajoso.
Cuando hablé de transición política y cambio político en el PRI como en
la política mexicana, me refería a los cambios que toman lugar durante este periodo.
Comenzamos a ver dentro de las filas del PRI una gran camada de simpatizantes
hacia el liberalismo de finales del siglo XX. Principalmente abocados a los
convenios de libre comercio, una apertura de la economía, el cumplimiento de
las medidas señaladas por el Consenso de Washington y medidas económicas
típicas del neoliberalismo como las privatizaciones en los países
subdesarrollados y la fuerte inversión de compañías multinacionales.
Este sector dentro del PRI se mostraba en cierta forma opositor a la
vieja línea del partido, defensor del control estatal, una fuerte influencia en
la economía por parte del Estado y la creación de empresas estatales que
generaran y tuvieran en su poder los principales servicios del país. Es cierto
que el verdadero cambio en cuanto a política se da con la victoria del PAN
(Partido de Acción Nacional) y el fin de una era priísta, sin embargo las medidas implementadas e iniciadas durante
este periodo supusieron un giro total hacia la derecha neoliberal, iniciada
tanto por el contexto internacional como también por los cambios al interior
del Partido Revolucionario Institucional.
Como veremos en la siguiente Unidad, la Presidencia de Ernesto Zedillo
Ponce de León supuso el fin de un modelo que había sido tildado de renovador y
prospero o mejor dicho la caída de aquel modelo característico de los años ‘90,
sumado al fin de un dominio en la arena política por parte del Partido
Revolucionario Institucional, al igual que un cambio en las medidas
gubernamentales para con la economía y la administración del país. Todo esto
teniendo en cuenta la entrada en el siglo XXI, y los nuevos desafíos tanto a
nivel local como a nivel internacional que México debería afrontar.
El fin de
una era.
Para comprender esta Unidad es necesario visualizar la
sucesión de acontecimientos que se van a ir generando en México los cuales
varios ya habían comenzado décadas atrás, que nos conducirá al fin de una era
como bien lo cataloga el titulo y que finaliza con los 70 años de mandato del PRI.
Con la llegada al poder del PAN y el giro hacia la derecha en México el PRI
deberá afrontar grandes cambios, de todas formas ese cambio de poder y
transición de periodos va a tomar lugar durante estos años, principalmente
durante la Presidencia de Ernesto Zedillo Ponce de León, tiempo que transcurre
desde 1994 hasta el año 2000.
Comenzando a analizar lo transcurrido en este periodo
debemos mencionar que el cambio de Presidencia fue acompañado de una fuerte
crisis económica que tuvo repercusiones en todo el país al igual que en varios
países de América Latina. Estamos hablando de la Crisis Económica Mexicana del
año 1994, comúnmente llamada “Efecto Tequila” por las repercusiones en
Latinoamérica y también caracterizada como el “Error de Diciembre” por parte
del ex Presidente Salinas Gortari, en un tono apaciguante con la intención de
reducir la crisis para dejar una buena imagen de su gestión. De todas formas se
inició una fuerte lucha entre las administraciones de ambos presidentes para
responsabilizar y culpar al otro por la Crisis Económica.
La rápida transición hacia el capitalismo de finales del
siglo XX y la inserción en un mundo completamente neoliberal generó fuertes
cambios en México. Como hemos visto la inversión extranjera creció fuertemente,
las privatizaciones jugaron un papel fundamental durante este periodo y el
Estado comenzó a tener una fuerte cantidad de dinero para invertir o manejar a
su gusto. De esta forma y principalmente debido a la salida de Salinas, el
Estado comenzó a gastar gran parte del dinero en infraestructura y obras
públicas, lo cual se entendió como una gran movilización de dinero por parte
del sector estatal. Del otro lado encontramos una gran cantidad de capitales
extranjeros radicados en el país que además de invertir en empresas que
pertenecían al Estado, con las denominadas privatizaciones, comenzaron a
invertir en títulos públicos. No solo los extranjeros decidieron invertir en
los títulos del Estado, que se creía por la administración salinista frenarían la problemática que le estaba generando al
Estado una fuerte emisión de moneda y a su vez le demostraba la gran cantidad
de dinero circulante en el país. Lo cierto es que este dinero no poseía el
respaldo necesario atribuido por la producción, principalmente debido a que las
privatizaciones y la inversión extranjera no generarían en el corto plazo un
gran excedente de producción, por lo cual el Estado intentó frenar la alta
circulación de dinero emitiendo bonos, los cuales atrajeron a gran parte del
empresariado mexicano y como ya mencionamos a inversores y empresarios
extranjeros, viendo la posibilidad de cobrar luego de unos años un determinado
interés que les sería altamente favorable esperando el crecimiento económico
que supuestamente alcanzaría México en los años venideros.
Por otro lado el gasto público continuó aumentado,
generándole al Estado grandes perdidas de las reservas que poseía. A
continuación el gobierno consideró que el peso mexicano se encontraba fuera de
los niveles comparativos con el dólar norteamericano, por lo cual el Estado
intentó recuperar parte de la emisión de bonos y afrontar la deuda pública
mexicana, de esta forma y sumado al temor de los inversores de perder sus
inversiones y ahorros, gran parte de los acreedores de aquellos bonos decidieron
venderlos, por lo cual como podemos visualizar, si al ir todos a retirar su
dinero el colapso de los bonos era ya un hecho, seguido a la perdida de valor
de los mismos, que habían comenzado a perder valor real con la compra de deuda
pública por parte del Banco de México, de esta forma en los últimos meses de
1993 y comienzos de 1994 la fuga de capitales sumado al retiro de prácticamente
todas las reservas del Estado generaron el colapso del sistema económico
mexicano.
La nueva administración de Zedillo intentó llevar a cabo una
devaluación de la moneda, logrando reducir parte de la inflación imperante por
aquel entonces. De esta forma la fuga de capitales cesaría y las reservas
podrían comenzar a crecer y así lograr un control sobre las mismas por parte del
gobierno.
Debemos comprender que Zedillo buscó la libre flotación de
la moneda para intentar dejar a las mismas fuerzas del mercado restablecer la
economía. Esto generó un golpe más fuerte no solo para la economía mexicana si
no también para la moneda local ya que la misma se disparó en relación al dólar
y la devaluación no logro estabilizar ambas monedas.
Con respecto a las consecuencias internas, gran cantidad de
las clases medias y clases bajas que habían iniciado créditos personales, los
cuales iban desde inversión en casas, campos, pequeñas empresas, autos y motos
no pudieron llevar a cabo los pagos de las mismas, de esta forma perdieron todo
lo que tenían, quedando en la calle un gran numero de familias de las clases
medias y bajas. Por otro lado el aumento generalizado de los precios debido a
la fuerte inflación en el país generó la imposibilidad de poder consumir bienes
esenciales, dejando en crisis a la totalidad de la población. Las tasas para
los créditos aumentaron a niveles inalcanzables para aquellos ciudadanos que a
duras penas podían adquirir los bienes primarios y básicos.
En cuanto a los países que azotó debemos señalar que la
crisis imposibilitó a México de llevar a cabo las exportaciones que tenía
previstas, generando desabastecimiento de materias primas y bienes
manufacturados a varios países de la región, al mismo tiempo que al
concentrarse en México las casas matrices de la región de varias empresas
multinacionales, el fuerte impacto de la crisis provocó el cierre de varias
sucursales en países de Centroamérica y Sudamérica. A su vez la caída de la
bolsa de valores mexicana repercutió en varias bolsas de Latinoamérica
vinculadas a la mexicana, generando una caída en los valores de varias bolsas
de la región.
Por último me gustaría señalar el por qué del nombre “Efecto
Tequila”. Principalmente debemos diferenciar entre las grandes multinacionales
y las empresas de menor calibre. Cuando nos referimos a estas últimas, debemos
comprender que su información y su experiencia en la inversión no es perfecta.
Por lo cual varios inversores extranjeros que poseían capitales y empresas en
la región decidieron rápidamente retirar sus empresas de los distintos países,
por lo cual el efecto que provocó la crisis de México logró que la fuga de
capitales se tradujera al resto de los países de la región, generando de esta
forma confusión en los inversores lo cual claramente queda explicado por el
tequila mexicano y sus consecuencias.
La Crisis generó el fuerte cruce entre Salinas y Zedillo
para responsabilizar al otro acerca de la Crisis, por lo cual la sociedad
mexicana ya fuertemente azotada por la crisis económica debió afrontar el cruce
de dos presidentes del mismo partido, y en cierta forma a quienes se habían
considerado como allegados varios años atrás. Esta medida fue drástica para
gran parte de la población vinculada al Partido Revolucionario Institucional y
a su vez contraproducente para el mismo partido. De todas formas alguien logró
aprovecharse de las pujas en el PRI y le valdría la Presidencia de la Nación.
El Partido Acción Nacional, que había sido el principal
opositor al PRI durante los comienzos en las décadas del ’30 y ’40 hasta estos
días, había logrado acceder a las gobernaciones de ciertos estados a comienzos
de los ’90, sin embargo su gran golpe fue cuando en el año 1997 logró romper
con la mayoría que ostentaba el PRI en el Parlamento, terminando así con 70
años de influencia y mayoría príista
en el Congreso. A este acto le siguió la victoria del PAN en gran parte de los
estados mexicanos, generando así una alianza para el progreso a lo largo del
país, intentando llegar al poder frente a un PRI que venía en caída. La alianza
se consolidaría y como observaremos más adelante logró romper con el esquema
político que había mantenido el PRI durante tantas décadas y que le
imposibilitaba a los partidos de la oposición llegar al poder Nacional.
En el año 1994 tomó lugar en Chiapas un levantamiento armado
por parte del Ejercito Zapatista de Liberación Nacional, compuesto
mayoritariamente por indígenas que buscaba la revolución social mexicana para
terminar con la opresión que el capitalismo estaba generando en México. El
llamado a la revolución evocando a Emilio Zapata y la lucha contra las medidas
neoliberales que el gobierno estaba generando consistía en atacar diversos
focos del país para tomar el gobierno e instaurar un Estado Socialista en
México, opositor a las medidas de apertura económica vinculadas a Estados
Unidos. La lucha armada continua hasta nuestros días, a pesar de haber sido
constantemente reprimida por las Fuerzas Armadas. Sin embargo la lucha
ideológica continúa y se expandió por diversos sectores del país. Con el
Subcomandante Marcos como líder Nacional, pero haciendo escuchar al pueblo, se
oponen fuertemente al gobierno y a las medidas que este tomó para la apertura,
señalando que los derechos del pueblo de México, los legítimos soberanos del
poder, fueron quitados por gobernantes que alcanzan el poder por fraude. El
accionar del EZLN se concentra principalmente en el Sur del país y las
negociaciones con el gobierno, o mejor dicho con los distintos gobiernos de
turno, han llevado a tensiones y acercamientos, que para los gobiernos de turno
es un punto menor en la agenda político del Estado y para el movimiento de
liberación es una lucha que jamás cesará.
Hay un punto importante a destacar durante estos años y es
el asesinato del político príista
Ludís Donaldo Colosio. Conocido como uno de los grandes políticos mexicanos de
los últimos años, integró parte del gabinete del presidente Salinas. Sin
embargo comenzó a distanciarse de Salinas y a generar gran popularidad entre la
población debido a su discurso que hablaba de la unión entre mexicanos, la
participación de todos los partidos en las decisiones del gobierno y con una
fuerte critica hacia la política económica del por entonces presidente Salinas.
Esto le valió ser asesinado durante un acto político. Aun hoy no se sabe con
certeza quien fue el autor de su asesinato, más aún luego de una serie de
cuestiones que dificultaron la causa. De todas formas se cree que fue asesinado
por el PRI debido a su creciente poder y popularidad y al haber criticado las
acciones del PRI y su búsqueda por un cambio político en el país. Lo cierto es
que su intención de alcanzar la Presidencia quedó obstruida, generando así la
posibilidad para Salinas de comenzar a elegir en conjunto con los altos lideres
del PRI a su sucesor, quien seria nada más y nada menos que Ernesto Zedillo.
A pesar de la recuperación económica luego de la crisis,
debido a la ayudad económica proveniente de los Estados Unidos y diversos
países de América Latina al igual que de Organismos Internacionales tales como
el Fondo Monetario Internacional, la política y la economía fueron por caminos
diferentes. El incentivo económico proveniente del paquete económico
norteamericano, le posibilitaron a la economía mexicana mantenerse estable por
unos años y frenar la inflación y devaluación de la moneda. Sin embargo en el
aspecto político el auge de la Alianza por el Cambio, constituida por el PAN y
el Partido Verde Ecologista de México, comenzó a ser la formula con mayor poder
en la arena política. Por un lado el PRI había perdido la mayoría en la
Legislatura, al igual que las gobernaciones estatales, a estos actos debemos
sumarle la campaña que emprendió el miembro del PAN Vicente Fox Quesada hacia
la Presidencia, ya desde el año 1997. Al parecer el pueblo también se
encontraba opositor al PRI, que debido a las acusaciones de demagogia y
relación con el narcotráfico perdió imagen y a su vez confianza. Luego de 70
años de hegemonía príista, el PAN,
partido principal de la oposición, logró alcanzar la Presidencia y obtener
apoyo del Congreso y de los gobiernos estatales, de esta forma el escenario
político mexicano cambió drásticamente. Varios sectores de la población y del
empresariado mexicano deberían convivir con una realidad que les era adversa,
acatar las ordenes de un partido de centro derecha que les resultaba totalmente
opositor debido a tantos años de influencia del PRI y al discurso príista que señalaba al mismo PRI como
el único partido capacitado para gobernar el país. De todas formas el PAN
instauraría grandes cambios en el país, a pesar de la fuerte influencia que
ostenta el PRI hasta nuestros días, sin embargo la ruptura de un esquema político
totalmente hermético creado por el PRI y mantenido durante siete décadas es un
hecho histórico en la vida política de México que debemos destacar dentro de
los más importantes de la historia del país.
México en el siglo
XXI: El giro hacia la centro derecha.
La falta de experiencia por parte del PAN, el tener que
gobernar un país que todavía poseía una fuerte tradición príista y los errores propios de Fox le valieron muy caro al
partido en el gobierno la simpatía nacional e internacional. Para comenzar
debemos señalar que Fox venía propiciando su lucha por mejorar las condiciones
laborales para todos los mexicanos, lograr una política migratoria legal con el
gobierno de Estados Unidos y por último combatir el narcotráfico. De todas estas
medidas Fox no lograría alcanzar ninguna, lo cual le valió la crítica de la
prensa y de la sociedad.
Con su lema de “Un
trabajo para cada mexicano”, Fox intentó legalizar a todos los trabajadores
mexicanos y designarles un trabajo estable. Claro está que este tipo de
políticas deben proyectarse a largo plazo, además de comprender que en el corto
plazo no otorgan grandes beneficios. Por otro lado era contraproducente con
respecto a la política migratoria que intentaba llevar a cabo con los Estados
Unidos. Queriendo otorgarle un trabajo en México a cada mexicano, difícilmente
lo lograra buscando la migración masiva de ciudadanos mexicanos hacia los
Estados Unidos. Al igual que al PAN le costó romper con el esquema de empleos
públicos generado por largas décadas del PRI. Estaba incapacitado para
reorientar la administración pública ya que esto le generaría mayores críticas
por parte de quienes habían alcanzado un trabajo gracias al PRI.
Por otra parte cuando hablamos de la política migratoria
hacia los Estados Unidos debemos comprender que esto no fue algo muy bien
recibido en Washington. Todo lo contrario, con el paso del tiempo y la
oposición del mismo Fox para con la Guerra de Irak, Estados Unidos reprobó todo
tipo de acercamientos diplomáticos en cuanto a la creación de una doble
ciudadanía y un pase laboral para ciudadanos mexicanos que desearan ingresar en
los Estados Unidos, al mismo tiempo que el famoso Muro de la Discordia
comenzaba a elevarse entre México y Estados Unidos. A pesar de la gran simpatía
de la administración Fox para con Estados Unidos, es en mi opinión la falta de
experiencia del PAN en las relaciones internacionales, lo que le valió fuertes
reveses. Por un lado lo que intentó ser un acercamiento hacia Estados Unidos
terminó en un alejamiento y tensión entre ambos países. Por otro lado las
declaraciones del Presidente en relación a varios gobiernos de Sudamérica tales
como los de Argentina, Brasil y Bolivia generó tensión en la región, a pesar
del ideal de Fox de lograr consolidar una fuerte alianza con Sudamérica. Todo
lo contrario, la tensión entre México y Sudamérica aumentó. Principalmente
debido a la tendencia hacia la derecha conservadora que demostró el gobierno de
Fox en relación a los gobiernos de centro izquierda en Sudamérica. Tal es así
que el ideal mexicano de establecer una alianza y conformar un bloque regional
con los países sudamericanos quedó en el olvido. Por otro lado las tensiones
con Cuba y Venezuela aumentaron principalmente ante el temor de Fox de perder
las relaciones con Estados Unidos. De esta forma comprendemos porque México
experimentó una convulsión en cuanto a sus relaciones internacionales,
demostrando la inoperancia del PAN en materia diplomática.
A pesar de la creación de agencias contra el narcotráfico, este
último aumentó considerablemente durante la administración Fox. La
imposibilidad de frenar la delincuencia y la inseguridad en los estados del
Noroeste del país y en especial dentro del Distrito Federal, demostró que el
PAN no tenia un plan conciso para combatir el narcotráfico, que a su vez
demostró la gran influencia que los carteles de droga alcanzaron durante los
años 2005 y 2006.
La oposición príista
no se quedó muda antes tales errores. Por lo cual el intento del PRI de retomar
el poder nacional comenzó a acelerarse, llegando a acuerdos con diversas
cadenas informativas para boicotear el gobierno de Fox, del cual podemos decir
que se valió más de críticas que de elogios. Por otro lado la oposición en la
Legislatura aumentó. Varios proyectos creados por el gobierno fueron rechazados
en el Congreso, generando mayores impedimentos para ejercer una política de
gobierno estable. Al mismo tiempo el descontento de la población aumentaba, no
solo por las declaraciones controvertidas de su Presidente, si no también por
cuestiones tales como la lucha con ciudadanos mexicanos debido a la adquisición
de tierras por parte del gobierno para crear un nuevo aeropuerto en la Ciudad
de México, proyecto que finalmente fracasó, el intento de Fox de crear un
circulo industrial automotriz en Monterrey, lo cual le valió las criticas del
sector industrial de Guadalajara, en donde el PRI comenzó a ganar afecto, por
último la gran cantidad de asesinatos y la violencia en las calles de varias
regiones del país relacionado con el narcotráfico aumentó el descontento de la
población para con la administración Fox.
A pesar de las grandes fallas en su rol como Presidente de
la Nación, Fox alcanzaría a cumplir su mandato, retirándose del mismo en el año
2006 y dejando la puerta abierta para otro candidato del Partido de Acción
Nacional, quien supo ser representante de la Legislatura, Secretario General
del PAN y desempeñó varios cargos dentro del gabinete de Fox. Este último
demostraría su constante incompetencia al pronunciar palabras en contra del por
entonces candidato a la Presidencia de México y supuesto amigo, el señor Felipe
Calderón Hinojosa.
Con la llegada al poder de Calderón, los ideales panistas iniciados con Fox no cambiarían
en la gran mayoría de aspectos, sin embargo hubo algunos cambios a resaltar,
propios del mandato de Calderón Hinojosa. Para comenzar, continuó con su política laboral, llegando a
autoproclamarse como el “Presidente del
Trabajo”, intentó generar puestos de trabajo en el sector estatal en todos
los estados del país al mismo tiempo que su gobierno alcanzó acuerdos con
importantes corporaciones internacionales para llevar a cabo una política de
inserción laboral amplia en el sector laboral privado, que creció en cifras
elevadas durante su mandato.
Por otro lado durante su gestión aumentó la lucha contra el
narcotráfico. Este será a lo mejor el punto más importante para analizar de la
administración Calderón. En un principio controversial por sus acercamientos
para con las Fuerzas Armadas, Calderón proclamó el uso del ejército para
combatir el narcotráfico. Esta medida le valió las críticas de gran parte de la
sociedad al igual que en varios foros internacionales se acusó a su gestión de
iniciar la lucha armada entre el Estado y los carteles. De todas formas las
críticas hacia estas medidas aumentaron aún más con las grandes cifras de
muertos publicadas por las corporaciones multimedia del país. Entre las cuales
se anunciaron varias muertes de civiles, que resultaron ser victimas del uso de
la fuerza desmedida por parte del ejército. Al mismo tiempo Calderón aumentó la
cantidad de dinero dirigida a la Defensa de la Nación en el presupuesto
nacional, incrementó los salarios de los militares y dotó de ciertos poderes a
las fuerzas armadas para operar en la lucha contra el narcotráfico. A su vez un
gran número de jefes de los carteles fueron arrestados, lo cual se tradujo a
ciertos momentos de baja intensidad en la lucha por parte de los grupos
armados.
Calderón reforzó a la policía y a su accionar para
contrarrestar el narcotráfico. Por una parte comenzó a desprender de la
policía, todo tipo de normativas legales que les impedían ingresar en
domicilios, interrogar delincuentes e iniciar redadas sin previo consentimiento
legal. De esta forma consideró que al otorgarle más beneficios a la policía y
al ejército podría combatir de una mejor manera el narcotráfico.
Sus medidas fueron criticadas no solo por el uso de las
Fuerzas Armadas, si no también por la manera en la cual estas comenzaron a
operar durante su mandato. Actualmente en México, podemos evidenciar ataques
diarios por parte del ejército hacia supuestos narcotraficantes en diversos
puntos del país, con la posibilidad de operar a su gusto y con pocos
impedimentos legales, esto suscitó un incremento de asesinatos de ciudadanos no
involucrados en el narcotráfico.
Calderón buscó continuar con la cercanía hacia Estados
Unidos al mismo tiempo que intentó mejorar la visión de México que poseían los
países Latinoamericanos. Luego de los grandes errores de la era Fox, Calderón
buscó el acercamiento con Argentina, Brasil, Chile, Bolivia, Colombia, Panamá y
Costa Rica. La situación de México en el contexto internacional mejoró. La
posibilidad de integrar un grupo junto a China, India, Brasil, Sudáfrica e
Indonesia de las economías emergentes, mejoró la situación internacional del
país. México aumentó su influencia en el exterior, acercándose con países como
Brasil y China al G-8 y generando mejores relaciones diplomáticas y comerciales
con las principales potencias económicas del mundo, a pesar de no ser miembro
del G-8.
En lo que respecta a la salud, educación e inversión pública
en ambos sectores Calderón mostró ciertas falencias. En primer lugar redujo el
flujo de dinero hacia ambos sectores, reduciendo el gasto del Estado para con
la Salud y la Educación. Esto le valió la crítica de varios estudiantes,
principalmente universitarios que reprocharon contra el Presidente, generándole
un tiempo más tarde, la creación de un plan educativo para invertir en la
creación de escuelas y la refacción de universidades. A su vez prometió la
construcción de 5 hospitales públicos en el Distrito Federal, de los cuales
solo 2 se han construido y uno está en construcción. Por otro lado no hubo
aumentos durante su mandato de los salarios de docentes y médicos, generando
descontento por parte de ambos sectores.
En el plano económico Calderón debió afrontar el aumento de
los precios de los productos básicos. Lo cual demostró el grado de inflación
que México estaba sufriendo. A pesar del aumento de los precios, que en un
principio se catalogó de generalizado, es decir que alcanzaría a todos los
productos, se intentó reducir la crisis de los precios con ayuda y subsidios
por parte del gobierno hacia los sectores primarios de la producción. Por otro
lado la Crisis Económica Mundial 2008-2009 repercutió en la economía mexicana.
Generando un aumento del petróleo que se tradujo en aumento del combustible en
México, se redujeron las exportaciones de petróleo mexicano, creció fuertemente
el desempleo, en especial en el sector privado vinculado con varias empresas
multinacionales que debieron reducir personal y en algunos casos retirarse del
país debido a la crisis económica y por último la inversión proveniente del
extranjero disminuyó, todo esto generando una caída del Producto Bruto Interno
Nacional.
Demostrando un fuerte accionar para combatir al narcotráfico
lo cual le vale de criticas constantes por parte de la oposición, con una
política nacional de disminuir el desempleo en el país, perdiendo apoyo de las
gobernaciones en varios estados del país y con una oposición que se hace más
fuerte en la Legislatura, la administración Calderón parece encontrarse mejor
encaminada que la de su predecesor. Con mayor madurez para gobernar el país y
una diplomacia más fuerte, el PAN ha demostrado maduración en estos pocos años
que viene desempeñado en los más altos cargos del país. A pesar de la
popularidad en aumento que está alcanzado el PRI en estos días, Calderón busca
mejorar la situación social del país luchando en varios frentes contra el
narcotráfico, mejorando la visión del mundo con respecto a México y ayudando
con planes laborales y de soporte al consumidor y a sus ciudadanos
contrarrestando las secuelas que hoy en día México vive debido a la crisis
internacional. Con todas estas políticas Calderón busca retirarse de la
Presidencia con un gran apoyo popular, pero a su vez asegurar y garantizar la
continuación del PAN en el poder frente a la constante amenaza del un Partido
Revolucionario Institucional que busca alcanzar el lugar que durante tantos
años ocupó.
Características poblacionales de México.
¿Por que México es tan homogéneo?
En primer lugar hay que mencionar que con el título no se
quiere hacer mención a que en México no hubo inmigrantes, sino que en
comparación con la mayoría del resto de los
países de América Latina y teniendo en cuenta que México se encuentra
dentro de los mejores países de la región
el numero de inmigrantes fue muy escaso. Tal es así que desde 1910 hasta
la actualidad (2010) el porcentaje de población inmigrante no superó al 1% del
total de la población, en algunas décadas incluso llegando a ser del 0,1%, por
lo cual vemos que en comparación con Argentina, Paraguay, Brasil y Estados
Unidos, México se mantiene muy por debajo en cuanto al flujo de inmigrantes.
De esta forma entendemos que la población mexicana autóctona
no ha sufrido entrecruzamientos con otras poblaciones, tal es así que es uno de
los países con mayor homogeneidad racial en el mundo, siendo muchos
descendientes directos de algunas civilizaciones antiguas que habitaban la
región, como por ejemplo los Toltecas y los Aztecas.
Desde las épocas de la colonización española, los españoles
se asentaron fuertemente en la región, con un ideal de permanencia a largo
plazo, de esta forma llegaban muchos españoles de todas partes del territorio
español y de todas las clases sociales, desde soldados y navegantes hasta
burgueses y marqueses que rápidamente se expandieron por este nuevo territorio.
Podemos también mencionar a la población negra, que era
trasladad a México para trabajos forzosos, se menciona el famoso caso de los
Yoruba, que eran (e incluso en la actualidad lo siguen siendo y siguen estando
presentes) una tribu local del territorio actual de Nigeria.
También debemos recordar que paralelamente a la época
colonial en México, la Corona Española también poseía bajo su control a las
Filipinas, un territorio conformado por más de 7000 islas, que fueron
bautizadas con el nombre que conservan hasta la actualidad en honor al monarca
Felipe II. Los españoles rápidamente establecieron una vía fluvial para
comerciar entre la Nueva España y las Filipinas, por lo cual ya desde la época
de las colonias en América podemos registrar una leve inmigración de población asiática,
predominando los filipinos y chinos.
Se puede decir que con la independencia de México se logra
un movimiento poblacional de carácter interno y a la vez de gente proveniente
del extranjero. El flujo de inmigrantes alcanzaría la suma de 100.000 ya para
el año 1920, y entre los principales grupos podemos encontrar a ingleses,
norteamericanos, irlandeses, italianos, españoles, portugueses, filipinos,
chinos y japoneses. Ya con la Revolución Mexicana el número disminuiría debido
a la situación que atravesaba el país, lo que llevaba a la persecución por
parte de los subordinados de Francisco Villa de ciudadanos extranjeros.
México elegido como
lugar de asilo.
Luego de la revolución que atravesó el país, México se
estabilizó y para 1930 ya comenzaba a estar apto para recibir a población
extranjera. Es interesante mencionar el caso de varios refugiados políticos que
provenían de la joven Unión de República Socialistas Soviéticas (URSS o CCCP
según sus silabas originales) que terminaba de consolidarse, por eso México
recibió a varios políticos, escritores, burgueses y comerciantes rusos, entre
los cuales se destaca el famoso caso del político León Trotsky.
También en la década de los 70, durante la época del proceso
militar, muchos exiliados políticos argentinos se trasladaron a México en busca
de asilo. Lo mismo ocurriría años mas tarde durante la década de los 90 y
durante el 2000 cuando muchos argentinos se trasladaron a México en busca de
oportunidades económicas, pero sin ninguna relación con el asilo político.
Muchos regresarían luego de la crisis mexicana, conocida como “La crisis del
tequila” o “El efecto tequila”, donde la crisis económica y la rápida fuga de
capitales extranjeros dificultarían la situación en el país.
También durante la época del proceso militar en Chile,
muchos chilenos buscarían asilo en México, repitiendo así, un caso similar al
argentino.
México y el Tratado de
Libre Comercio de América del Norte.
Como mencionamos en las Unidades correspondientes a la
creación del Tratado y a sus primeros años, México ha buscado mediante el mismo
iniciar un acercamiento hacia Estados Unidos y Canadá en materia económica,
como también en ciertas cuestiones legales y poblacionales.
La reducción de las barreras arancelarias entre los países
miembros y el libre comercio entre los mismos se tomó en México como una medida
positiva hacia la apertura económica. Si bien como también se mencionó en la
Unidad correspondiente al “Fin de un Era”, registramos levantamientos armados
en contra de este tipo de medidas neoliberales que perjudicarían al país. De
todas formas a lo largo del desarrollo de las relaciones entre los países,
podemos observar que no se logró equiparar la situación de los países generando
un crecimiento sostenido como bloque. México se encuentra hoy en día más ligado
a Estados Unidos de lo que estaba anteriormente, al mismo tiempo que Canadá y
Estados Unidos registran altos ingresos provenientes de las exportaciones y del
comercio con otros bloques en relación a lo que registra México.
Por otro lado como yo mismo me ocupé de señalar, y es una
opinión exclusivamente mía que puede ser juzgada como acertada o errónea, este
tratado no es más que la búsqueda por parte de Estados Unidos de constituir un
bloque económico que pueda equipararse a la Unión Europea o a la Asociación de
Naciones del Sudeste Asiático. Ya desde fines de la Guerra Fría cuando Europa
tomó seriamente en cuenta la posibilidad de articular como un bloque económico
y jurídico, Estados Unidos vio en este tipo de estrategias el funcionamiento
del sistema internacional en un futuro. Por lo cual que mejor manera de
insertarse rápidamente en este cambio que constituir una alianza regional con
Canadá y México. La cual pudiera tapar el interés de Estados Unidos por
acrecentar las ganancias provenientes del comercio directo con bloques del peso
de los mencionados anteriormente, y de esta forma acrecentar los beneficios.
Entendemos de esta forma que el comercio bilateral con cada país de Europa
perjudicaba a Estados Unidos, y la posibilidad de venderle la idea a la Unión
Europea que había constituido un bloque económico fuerte con quien comerciar le
posibilitaría mejorar su balanza comercial.
De todas formas el ideal de México y las falsas promesas
emanadas de Washington en cuanto a constituir un órgano jurídico y legal que
avale diferentes cuestiones tales como una ciudadanía común o una moneda común,
parecen haber quedado en el olvido para una propuesta que planeó extenderse al
resto de América, pero que sin embargo fracasó, ya que el ALCA difícilmente sea
aceptado por gobiernos que no desean someter a sus pueblos al control y
sometimiento norteamericano otra vez.
Análisis
comparativo.
Planteo de hipótesis y
análisis de variables.
En primer lugar
para establecer la comparación entre ambos países hay que tener en cuenta que
desde un comienzo presentan varias similitudes. Ambos países se caracterizan
por un amplio territorio y por una gran población. Esto ayudó mucho al
crecimiento económico de ambos países en momentos como por ejemplo el modelo
exportador y agro exportador y a su vez con el industrialismo y modelo de
sustitución de las importaciones. Se podían establecer varias industrias en
diversos puntos de los territorios y sabiendo que la población local
rápidamente se insertaría en las fábricas. Por otra parte benefició ampliamente
a la economía, porque estos países al poseer gran población, tenían asegurada
mano de obra. Ya sea en las haciendas o en los latifundios la población alcanzaba
para mantener el modelo agro exportador.
Por su parte con la clase obrera surgiente en los diversos puntos del país se
necesitaba una rápida conexión con las principales ciudades comerciales del
país. Es así como en ambos países la construcción de un sistema de carreteras
fue determinante. Conformando una red de logística rápida y efectiva. A su vez
esto permitía la conexión entre los distintos puntos del país, motivo por el
cual la unidad nacional se pudo dar en ambos casos.
Con los
sindicatos durante el populismo y las corporaciones de segundo grado en
adelante, el poder estatal (de cada uno de los estados de ambos países) se
fortaleció. El poder que los estados logran alcanzar no se puede dar en otros
países de la región, fomentando de esta manera la consolidación nacional y
unificación del país.
Estos indicadores
de la rápida consolidación nacional, sufrieron variaciones a través del tiempo,
fue difícil llegar al federalismo, más teniendo en cuenta la importancia de
estados como el Distrito Federal, Sao Paulo y Rio de Janeiro. Pero la consolidación y crecimiento de las
ciudades y estados fue predominante para
Brasil y México. Incluso en el aspecto político permitió que los gobiernos
nacionales permanecieran en el poder y pudieran tomar medidas a largo plazo con
el apoyo de los gobiernos estatales.
Los sindicatos
fueron determinantes en ambos países. Los estados tenían sindicatos muy fuertes
que les permitían obtener más beneficios en el ámbito político, mayor
participación. Las clases obreras que surgieron durante el populismo y que
podíamos encontrar en cada estado se veían apoyadas en los sindicatos. Por eso
estas instituciones intermedias alcanzan semejante jerarquía e importancia.
En el Marco
Teórico del trabajo, se enuncia como hipótesis el carácter imperialista que
adoptan ambos países. A la hora de la comparación encontramos una similitud de
acuerdo al imperialismo en México y Brasil. Caso que prácticamente no sucede en el resto de
América Latina. Brasil y México lograron tener emperadores, y un sistema
monárquico de gobierno; a su vez en el ideario político ambos países también
querían posicionarse como Imperios. México quería posicionarse como potencia en América Central y si era posible
obtener territorios. Aunque luego con la guerra frente a Estados Unidos este
ideario se vería afectado conjuntamente con la
intención de expandirse por la región, incluso llegando a reducir su
territorio. Brasil por su parte siempre buscó imponerse por sobre el resto de
los países de Sudamérica como una potencia capaz de atraer a las potencias
europeas para inversiones y en algunos casos interviniendo en los conflictos de
la región.
Los ideales
imperialistas de ambos países fueron el legado que dejaron los colonos. La
importancia que le habían dado tanto a México como a Brasil. En Brasil el
monarca portugués frente al conflicto en Europa decide desplegarse a su
colonia. Mientras que en México se llama a Fernando VII para ser emperador de
México. Los ideales de Imperio eran también una ideología de la época y como ya
se mencionó un legado de Portugal y España. Aunque estos imperios no lograron
mantenerse y llegar a la actualidad con el mismo título, podemos decir que
tanto México como Brasil poseen en la actualidad un ideal de potencia. Podría mencionarse a estos países dentro de
las economías emergentes más importantes del momento y llamadas a ser junto a China, Indonesia y la India los
nuevos actores políticos y económicos del siglo XXI, pero en lo que respecta a
América sin lugar a duda ambos países mantienen un ideal de potencias
hegemónicas.
Si bien durante
la época del positivismo se mencionó a Brasil como uno de los países donde fue
más fuerte la influencia de esta corriente. México también presentó su
influencia positivista la cual fue muy importante como ya hemos visto. El Ordem
e Progresso en Brasil también lo encontramos en México. El fortalecimiento
del Estado y el rol que despliega este sobre la sociedad permitió a las elites
de ambos países mantener el control en lo político y en lo económico. El comercio internacional que era el mayor
ingreso nacional, sustentado en el modelo exportador y agro exportador, estaba
en manos de estas elites y se beneficiaban solo ellas, por lo cual ese ideal de
crecimiento social no era para todos, si no para unos pocos. Creo que el mismo ideal de orden y progreso
nos demuestra la visión que tenían. En donde para alcanzar el progreso y
triunfar como naciones debían mantener el orden dentro de la sociedad. Y este
orden consistía en que las elites crecieran a grandes pasos mientras que el
resto de la población quedaba excluida. Este sería un factor sumado al
crecimiento de una clase media fuerte, en México principalmente del suicidio de
las oligarquías, y del pedido de participación política por partes de estas clases
emergentes. Si bien cuando se habló de
Brasil se explicó los motivos por los cuales este proceso no logra
consolidarse, y se llega rápidamente a un populismo, en México si fue
desarrollado, pero vemos que no fue tan determinante como en países como por
ejemplo Argentina.
Durante ésta
época también encontramos similitudes de acuerdo a los símbolos patrios. La
consolidación del Estado – Nación en Brasil es posterior a México, pero el lema
de Orden y Progreso se vería reflejado en su bandera.
Con respecto al
proceso del populismo vamos a encontrar tanto similitudes como diferencias.
Para empezar debemos mencionar que ambos países poseían una gran población para
sustentar el modelo de sustitución a las importaciones. La clase obrera tendría
un gran apoyo por parte del gobierno en ambos países. El populismo permitió ya
sea con Getulio Vargas en Brasil, el apoyo a una parte de la sociedad que hasta
entonces había quedado fuera del juego político. Las industrias tuvieron un
gran peso en ambos países al igual que los sindicatos. Aquí encontramos otro
punto de conexión. El corporativismo se dio de la mano del populismo, si bien
en México fue muy fuerte el corporativismo y la función desempeñada por el
PRI, en Brasil también llevaría a la
consolidación y fortalecimiento de los sindicatos, que por supuesto apoyaban al
gobierno central.
Durante el
gobierno de Vargas había todo tipo de partidos, aunque en realidad carecían de
carácter propio y estaban abocados al apoyo hacia el líder. Aquí se podría
decir que había distancia ideológica, aunque en mi opinión era ficticia, si los
partidos políticos los controlaba Vargas y era el quien establecía las reglas
del juego. En cambio en México la época del porfiriato
y posterior a la revolución mexicana lograrían consolidar una arena política
estable. Con partidos políticos libres y autónomos capaces de proponer
variables para la sociedad y hacer más rico el debate político. Aunque también
podemos mencionar que la hegemonía del PRI (Partido Revolucionario
Institucional) hacía difícil la posibilidad para el resto de los partidos poder formar parte del
gobierno. El PRI siempre fue, no tanto en la actualidad, pero si durante 70
años, un partido hegemónico, que tenía- mediante el apoyo de la clase obrera y
de las corporaciones que se habían creado durante el proceso populista- la gran
mayoría de los votos. Este partido proclamado como liberal y representativo de
las clases obreras lograría tener no solo la hegemonía a nivel estatal sino
también a nivel nacional. Los gobernadores estatales controlaban sus estados y
eran generalmente del PRI, el poder ejecutivo estaba en manos del PRI, al igual
que el Parlamento mexicano. Si bien durante los mandatos de Vargas se ven la
creación, desaparición, resurgimiento y unificación de partidos, el poder
político estaba concentrado en su figura. Los votos se posicionaban hacia donde
se encontraba Vargas; hay similitudes con México ya que los estados
comienzan a ser varguistas y tanto
los presidentes estatales como el presidente de la Nación (que era él mismo)
eran varguistas. La diferencia se
centra como ya se mencionó en que Vargas tenía más poder que los partidos
políticos, puede ser debido a su autoritarismo o debido a su popularidad no solo en las clases bajas
sino también en la burguesía industrial que él había creado y mantenía bajo su
control, pero Vargas sin lugar a duda controlaba el escenario político.
Es durante fines
de la Segunda Guerra Mundial cuando comienzan a ingresar en la región los ideales de comunismo y fascismo. En
México ya se mencionó que la fuerte institucionalización que había creado
el PRI y que llevaba a cabo como
política de estado, no permitieron la entrada de estas ideologías y su
transcripción en partidos políticos y movimientos sociales. En Brasil el
comunismo intentó ingresar pero Vargas lo utilizó como factor para tomar las
riendas y control del país mediante un golpe de estado. Con esto quiero
explicar que cuando hablamos de un eje izquierda – derecha, la izquierda estaba
totalmente ausente. Por lo cual la derecha era el eje hacia el cual se volcaba
la población no solo ideológicamente si no
también mediante sus votos.
El autoritarismo
de Vargas en Brasil provocó la ruptura del sistema político, y con esto no
quiero dar a entender que me contradigo ya habiendo mencionado que había un
sistema político de partidos donde había competencia, pero también enuncié que
era ficticio lo cual nos demuestra que el sistema no funcionaba correctamente.
Esto permitió que Vargas se mantuviera en el gobierno. En parte debido a otro
actor del corporativismo como lo fueron las fuerzas armadas. Tanto en México
como en Brasil desempeñaron un papel fundamental. Con Vargas en Brasil
permitieron mantener el orden y aseguraron la continuidad del régimen impuesto
por el líder, aunque un sector luego lo traicionara. En México se evidenciaría
durante los primeros años que le continuaron a la Revolución Mexicana, donde
muchos militares comienzan a tomar las riendas para conformar el sistema
político y de gobierno que tendría el país. Las fuerzas armadas se
perfeccionaron y tuvieron crecimiento en cuanto a número de integrantes en
ambos países. Su participación en la política no sería primordial pero si
importante teniendo en cuenta su carácter. Cuando me refiero a injerencia o
participación política no hago referencia a que las fuerzas armadas crearon
partido y llegaron al poder, sino al apoyo que le brindaron a líderes como
Cárdenas y Vargas.
El rol de las
elites ha ido cambiando a lo largo del desarrollo de los procesos. Pero
encuentro en ambos países una asimetría temporal por parte de las elites. Si
bien estas eran diferentes, en México estaban más cercanas a la industria,
aunque las había dedicadas a la agricultura, y en Brasil desde un comienzo
serían importantes en la producción de
café y al sector ganadero,
teniendo luego peso con el
industrialismo, ambas se vieron beneficiadas con el imperialismo, con la
consolidación del estado nación y con el populismo. En Brasil las élites
preferían una monarquía antes que una
república. Mientras que en México se veían beneficiadas tanto con un régimen
monárquico como con una república que les aseguraba mediante el orden y
progreso mantener el control de la economía. Lo mismo acontece en Brasil donde
las élites progresaban con el orden impuesto. Si bien ya se mencionó la
comparación durante el periodo que comprende el suicidio de las oligarquías,
quiero agregar que las élites continuaron teniendo el control de la economía y
del comercio, es notable el beneficio
que obtuvieron en ambos países.
La burguesía
industrial surge antes en México que en Brasil, pero tendrían características
diferentes. El modelo corporativista en México las reforzaría y les aseguraría
mediante el fuerte poder que ejercía el Estado, un beneficio, pero acotado. Ya
que se buscaba el crecimiento nacional y no de unos pocos, además el modelo
populista propone un choque entre las élites (principalmente las terratenientes
e industriales) y las clases obreras. En Brasil esta burguesía estaría apoyada
por Vargas y serían los pares de Vargas quienes estarían al frente. Vargas no
podía permitir una élite industrial independiente que pudiera aliarse con la
élite agropecuaria, porque podría poner en
jaque su modelo populista. Por lo cual las controlaba y les permitía
obtener ganancias siempre y cuando Vargas mantuviera el control a nivel
nacional.
Gran parte de las
élites permanecen hasta hoy en día, ya sea en Brasil quienes están a cargo de
Petrobras (creada por Vargas no con ese nombre pero fue el quien desde un
principio generó la explotación petrolera) como en México las élites que se
beneficiaron con el corporativismo y fuerte institucionalismo del PRI. Las
élites permanecen, en algunos casos teniendo que adaptarse a los cambiantes
regímenes y líderes políticos, aceptando que van surgiendo nuevas élites y que
las clases sociales medias y bajas siempre van a ejercer una oposición frente a
ellas, pero es innegable que el rol que desplegaron en ambos países fue
determinante para que se lleven a cabo procesos como el populismo y el corporativismo.
Brasil se destacó
por ser una antigua colonia portuguesa. Siempre se diferenció del resto de América y principalmente de la
América Española. Lo mismo acontece con las regiones. Brasil decimos que se diferenció
de una América Española de acuerdo al sur del continente, donde la realidad de
la región variaba en algunos aspectos de
la realidad centroamericana que afrontaba México.
Se ha analizado
como el proceso independentista brasileño fue diferente al del resto de la
región. No fue una independencia acompañada por armas, su carácter bélico fue
mínimo por no decir nulo. Aquí fue donde se explicó el papel de Portugal, de la monarquía portuguesa y de las Cortes
Gerais. Por su parte en México se ha
evidenciado un proceso independentista con mayor conflicto social y dotado de carácter
revolucionario y bélico. Encontramos diferencias entre Brasil y México con
respecto a la independencia de sus colonos así como también encontramos diferencias con la
independencia de países africanos de acuerdo a si éstos fueron colonias francesas o
inglesas.
Brasil ha
desarrollado una lengua diferente a la que encontramos en México. El portugués es el idioma oficial del país. Y si bien con
las diferentes corrientes migratorias y con la influencia de los países limítrofes
hubo cambios en la lengua, el portugués se
mantuvo como idioma oficial. En México por su parte el legado español llevó a la conformación del lenguaje actual. Sin
grandes variaciones de acuerdo al momento cuando los españoles se encontraban en suelo
mexicano. Aunque hay que mencionar que ha
sufrido cambios con los dialectos nativos.
Brasil se
conformó como un Imperio desde un principio. Esto lo podemos asociar como otra característica de la influencia
portuguesa. México siguió un destino parecido al conformarse como un Imperio,
preservando el legado impuesto por los españoles.
Estas
características analizadas mediante las cuales encontramos similitudes y en
otros casos diferencias nos permiten
observar el legado que dejaron portugueses y españoles en Brasil y México respectivamente. En mi
opinión siempre hubo una distancia entre
la América Española y la Portuguesa, desde las aspiraciones que tenían lusos y españoles en la región hasta las formas de
independencia que adoptaron sus colonias;
a pesar del paso del tiempo conservaron características propias del
legado español y portugués, pero con el tiempo América Latina ha logrado cierta
unidad que lleva a una cercanía entre
quienes fueron colonizados por portugueses y quienes lo fueron por españoles. Desde El Tratado de Tordesillas
hasta las Reformas Borbónicas, la relación
entre los colonos no fueron tan diferentes como lo fueron las francesas o
neerlandesas en la región, así se conservó una relación particular que podemos observar en la diplomacia
y en las relaciones exteriores actuales
de los países mencionados (México, Brasil, España y Portugal).
Como he analizado
en el caso particular de México y de Brasil con respecto a la inmigración hemos
caracterizado las diferentes corrientes migratorias en cada país y la influencia que tuvieron. Mi
intención es demostrar la diferencia en cuanto a ésta temática que presentan
ambos países y por qué México presenta
características muy homogéneas mientras que Brasil posee una de las poblaciones
más heterogéneas del mundo.
México jamás
necesito de una gran cantidad de migrantes africanos para trabajar las tierras,
ya que poseía una gran población que podía cubrir ese lugar. Mientras que Brasil obtuvo grandes contingentes de
africanos los cuales se vieron obligados al trabajo en las tierras.
Como señalamos en
el caso brasilero, la inmigración siempre fue muy importante para la economía. Ya sea desde las épocas de
las colonias con los portugueses e
ingleses que se asentaron en Brasil para controlar el comercio, hasta la gran migración japonesa del siglo XX.
Si bien Brasil y
México son países muy populosos, Brasil ha sufrido oleadas migratorias que le
permitieron crecer en el aspecto económico. México, tuvo su
influencia migratoria, pero no fue tan importante como la brasileña. En parte
puede ser debido a la mano de obra. Si bien México sufrió oleadas migratorias
forzosas durante la época colonial, de población africana, la tierra era
trabajada por nativos. En Brasil una
característica de la época (en parte debido al comercio histórico de esclavos que mantenía Portugal en
África) era la migración forzosa de esclavos
africanos. No hace falta remontarse tan lejos en la historia, hoy en día podemos observar dentro de la población
brasilera rasgos africanos, que con el tiempo se fueron mezclando. Este comentario no es en
ningún sentido de carácter discriminatorio.
Los italianos y
alemanes jugaron un rol importante en el aspecto económico. Los italianos se
asentaron para el trabajo en las haciendas y en los cafetales. Los alemanes se dedicarían más al sector comercial
y de servicios primarios en el Brasil. En comparación con México donde a la
hora de la relación entre el trabajo de la población y la economía del país,
los locales estuvieron a cargo del avance de ésta y de su desarrollo.
Durante los
gobiernos populistas de ambos países es claro que las clases trabajadoras ejercieron un papel importante. Los
inmigrantes tuvieron su lugar durante este proceso pero no fue significativo, ni tampoco fueron
determinantes para el desarrollo del proceso.
Brasil recibió
corrientes migratorias provenientes de varios países de Europa, al igual que de Asia. Estas migraciones, permitieron en
algunos casos el desarrollo de nuevas tecnologías,
en Brasil con los japoneses. A su vez
permitieron la aceptación y rápida adaptación
de población extranjera. Es muy común encontrar hoy en día muchos brasileros que vienen de familias italianas y japonesas,
portuguesas y alemanas. La heterogeneidad que presenta la población brasilera
nos permite ver la aceptación que poseen los extranjeros en el país. Caso contrario sucede
en México. Generalmente y en un lenguaje muy vulgar se tiende a comentar que los mexicanos tienen todos un
parecido. La gran mayoría son el resultado de los entrecruzamientos de la
población nativa aborigen con españoles. Se pueden encontrar colectividades extranjeras y descendientes de
asiáticos, europeos y norteamericanos, pero no es una característica que
destaque al país.
Habiendo
desarrollado ésta comparación es posible que se pregunten ¿por qué Brasil
recibió mayores corrientes migratorias que México? Para comprender este tipo de
cuestiones sería necesario un estudio y análisis de este tema que llevaría años
de desarrollo, por lo cual me es difícil
dar un veredicto final acerca de ésta
cuestión. Sin embargo mi opinión
personal es que Brasil se ha presentado como un lugar pacífico donde asentarse.
Un lugar donde los extranjeros eran aceptados y donde tenían una rápida
inserción en la sociedad y en la
economía. Al igual que países como la Argentina y Australia, Brasil goza de una
tradición en cuanto a las migraciones. Por lo cual esto podría ser comprendido como otro factor decisivo; en cuanto a México los años de inestabilidad y
los diversos clivajes que ha sufrido,
han provocado que el país se haya volcado a intentar resolver cuestiones particulares y propias. Cuando
logró estabilizar su situación ya era tarde, por así decirlo, para recibir inmigrantes. Las
grandes oleadas migratorias estaban llegando
a su fin y los
posteriores movimientos poblacionales se producirían a países en los cuales se tenía una buena referencia de
acuerdo al recibimiento de inmigrantes. Es
tan solo una apreciación propia, pero que permite evidenciar las diferencias
entre estos países tan importantes para
América Latina a la hora de hablar de inmigración y como ésta alteró o no su
población actual.
Cuando analizamos los años posteriores a la Segunda Guerra
Mundial y evidenciamos los cambios que se estaban desarrollando a nivel mundial
vamos a observar caminos diferentes en Brasil y en México, lo cual luego
cambiará con los modelos desarrollistas de ambos países, en donde podremos
visualizar un punto en común entre ambos.
Habiendo atravesado por 10 años de democracia luego de la
muerte de Vargas, Brasil experimentaría diversos gobiernos democráticos de
diferentes partidos políticos. En varios casos las Presidencias serían cortas y
no nos dejarían mucho para analizar, sin embargo de México no podemos decir lo
mismo. En este último, los gobiernos alcanzarían a cumplir sus mandatos y a
mantenerse en el gobierno. Esta es a lo mejor una característica propia de
México, en donde con el PRI, los Presidentes han llegado a cumplir sus mandatos
de 6 años, es algo verdaderamente asombroso, pero rápidamente entendemos que
fue por obra de la fuerte influencia del Partido Revolucionario Institucional.
Si bien Brasil comenzó a transitar por una débil democracia
durante estos años, la cual terminaría repercutiendo en la llegada de los militares
al poder, México parecía afianzar su sistema democrático, que a lo mejor no era
del todo competitivo, pero mantenía el orden político en el país. A pesar de
esta diferencia, México y Brasil, iniciaron a partir de las décadas del ’40 y
’50 y a su vez luego de la Segunda Guerra Mundial un proceso de
industrialización del país.
Esta primera industrialización y giro en cuanto al modelo
productivo, beneficiaria a ambos países, principalmente teniendo en cuenta sus
intereses de crecer como Nación y poder posicionarse junto a los países mas
poderosos del mundo. A su vez este modelo industrial, en ambos países, necesitó
de gran parte de la población para mantenerse. Tal es así que en México y
Brasil vamos a evidenciar el surgimiento de las clases bajas como una fuerza
productiva en el sector industrial que a su vez llegara a tener peso político.
En México el PRI lograría aglutinar a gran parte de las
clases bajas, dándoles un lugar que hasta ese momento jamás habían podido
alcanzar debido al rol de las elites.
El Brasil post Vargas también comenzó a atravesar por este
camino. No solo se buscó mejorar la situación política y económica del sector
mas relegado del país, si no que la política brasilera comenzó a girar en torno
al legado de Vargas. Con un fuerte rol de la industria, vamos a experimentar el
surgimiento de sindicatos y corporaciones que toman lugar durante estos años y
juegan un rol primordial en conjunto a los partidos políticos para poder
mantener el sistema.
Como hemos visto hasta ahora, estas similitudes se opacan
por el rol de un partido hegemónico y controlador en México y los cambios de
partidos en el poder en Brasil. Sin embargo creo que al igual que analizamos en
clase, como gran parte de estos partidos habían sido un legado varguista y profesaban sus ideales,
podríamos decir que la política brasileña durante estos años continuó con los
ideales de Vargas.
El avance de estos gobiernos democráticos conllevó mayor
peso al sector industrial y generó un reforzamiento de la democracia en ambos
países en momentos en que el mundo comenzaba a debatirse entre el Capitalismo y
Comunismo.
Si bien en Brasil comenzamos a observar el ingreso de las
ideas comunistas y un sector de la población que se sentía a fin a estos
ideales, en México la entrada del comunismo no sería tan fuerte debido al rol
predominante del PRI y a la forma en la cual este partido acaparaba a la
sociedad dentro de su propia ideología, a pesar que veamos en una parte de la
oposición un sector vinculado a la izquierda revolucionaria.
Con el cambio de gobierno vamos a observar comportamientos
diferentes en ambos países, sin embargo el modelo Desarrollista toma lugar en
ambos países. Principalmente por el ideal de llevar a cabo la segunda
industrialización de los países y poder alcanzar un desarrollo que llevara a
México y Brasil a centrarse dentro de los países centro y abandonar el lugar de
periferia.
Los principales países de América Latina van a implementar
este modelo. Estamos hablando de Argentina, Brasil y México entre otros. En
ambos casos cuando hablamos de una segunda industrialización hacemos referencia
a las industrias del petróleo, acero y química. Es acercar el modelo industrial
al de los países más avanzados, en la búsqueda por dejar atrás como modelo
sustentable al agro exportador. Claramente podemos comprender que aparte del
fuerte rol político e ideológico que tienen los tres grandes países
mencionados, observamos un modelo industrial previamente establecido, un amplio
mercado interno debido a la gran población que ostentan estos países y una
fuerte mano de obra en cuanto a cantidad.
Como podemos ver para mantener estos modelos fue necesario
tanto en Brasil como en México una mano de obra calificada y perfeccionada para
poder crecer industrialmente. El rol de Brasil y México como países
exportadores de petróleo vendría unas décadas más tarde, sin embargo el
surgimiento de ambas industrias tendrían lugar durante estos años, por supuesto
alcanzadas por el modelo Desarrollista en ambos países.
Por oto lado, parte de este modelo debió ser sustentado con
los prestamos provenientes del exterior. La deuda externa en ambos países
comenzaría a tener un papel importante durante este período si bien sería
durante la siguiente década cuando llegaría a valores incalculables.
Al igual que con la deuda externa, otro punto clave de ambos
países durante este periodo sería la relación con los Estados Unidos. En parte
el apoyo del país del Norte les proporcionaba beneficios y réditos para llevar
a cabo sus modelos al mismo tiempo que demostraban su alineamiento durante la
Guerra Fría, por supuesto en apoyo hacia el Capitalismo de los Estados Unidos.
Si bien ambos países registran un crecimiento en cuanto al
desarrollo industrial vamos a encontrar un factor de suma importancia que
perduró hasta mediados de los años ’90, estamos hablando de la inflación.
Atribuida al cambio de modelo y señalada como algo propio de
los países avanzados en sus modelos económicos, la realidad es que la inflación
aumentaba debido a las malas políticas económicas. Este aumento generalizado de
los precios sacudió a México y Brasil durante largas décadas, demostrando que a
pesar del crecimiento por momentos y de frenar la inflación, ésta rápidamente
regresaba, siendo en ciertos momentos estructural, es decir que perduraba por
décadas. En mi opinión parte de este fenómeno inflacionario en ambos países se
debe a la relación entre el modelo industrial y la demanda de los productos
primarios y de los manufacturados. El desarrollo industrial necesitaba de
grandes flujos de dinero y de una inversión constante por parte del Estado,
dejando otros sectores desprovistos de apoyo estatal. Al mismo tiempo los
salarios de las personas no podían hacer frente al precio inicial de los
productos provenientes de la industria, sumado al aumento de los productos
primarios, creo que esto generó la falta de consumo por parte de la población,
que se traduce en caída de la demanda. No soy un analista económico, por lo
cual no puedo criticar todo un modelo tan importante para los países de la
región, sin embargo si tengo que dar mi aporte o comentario señalaría que a lo
mejor durante aquellas épocas los gobiernos tendrían que haber tomado medidas
de ayuda a los consumidores y de incentivo constante al consumo para fortalecer
esa industria local y de a poco ir orientándose hacia la exportación de los
productos industrializados en otros mercados mundiales. De todas formas es solo
un pequeño comentario propio.
La construcción de carreteras y vías de comunicación para
mantener conectado a todo el país, principalmente a los sectores industriales
con los puertos lograron abastecer a gran parte de la demanda externa. Era
necesario también conectar los diversos puntos del país para generar mayor
contacto entre productos y a su vez para mantener el control político en los
diversos sectores. La logística jugó un rol fundamental para acercar a las
grandes ciudades. Los vastos espacios rurales que podemos observar en ambos
países hasta hoy en día quedaron en parte fuera del nuevo sistema, sin embargo
rápidamente se intentó conectarlos con las ciudades. De esta forma observamos
en ésta época un gran éxodo del campo a la ciudad en busca de las nuevas
ofertas laborales que ofrecían las distintas industrias. En un principio no era
requerido ningún tipo de especialización, a pesar que luego la mano de obra
comenzara a ser calificada, generando la importancia de los trabajadores
metalúrgicos, petrolíferos y eléctricos entre otros. Como podemos imaginar los
sindicatos y gremios comenzaron a aglutinar a los diversos grupos de trabajadores,
estos rápidamente se vincularon con los partidos políticos en el poder de
manera tal que les pudieran garantizar un empleo estable y tener conformidad
laboral.
En México comenzamos a evidenciar una fuerte relación entre
el gobierno y la creación de empleos para la gran cantidad de personas que se
trasladaban a la ciudad para el trabajo en las fábricas. Rápidamente estos
sectores serían el lugar ideal donde profesar ideologías políticas y de donde
obtener votos a cambio de estabilidad laboral y mejoras para todos los
trabajadores.
Tanto en Brasil como en México vamos a encontrar la fuerte
presencia de las Fuerzas Armadas. Si bien en el caso mexicano las Fuerzas
Armadas estaban subordinadas a la autoridad hegemónica del PRI, en Brasil las
vamos a visualizar como una corporación independiente, y en la mayoría de los
casos durante este periodo democrático, opositoras a los gobiernos. En parte se
debe al rol de los cuerpos armados en los países Latinoamericanos durante la
década de los ’70, autoproclamándose como verdaderos defensores de la voluntad
popular ante la crisis del sistema de partidos políticos, que estropeaba la
democracia. A su vez creo que es cierta la tendencia a hablar del Plan Cóndor
en estos momentos. Varios jefes militares fueron preparados en Estados Unidos y
la gran mayoría por agentes de Estados Unidos, militares, personal de la CIA y
de otras agencias para llevar a cabo estos procesos militares, lo cual nos
demostraba que de fondo había una intención por parte de los Estados Unidos de
América de frenar el avance del Comunismo en la región. No solo porque en el
contexto de la bipolaridad Estados Unidos y la Unión Soviética llevaron a cabo
políticas de disuasión nuclear y de amenazas en cuanto a los ataques en las
periferias, si no también porque de a poco, y no solo con el triunfo de la
Revolución en Cuba, el Comunismo comenzaba a localizarse en la región. Esto
como ya mencionamos se dio en gran parte del mundo, pero a diferencia de otras
regiones como el Sudeste Asiático o África, América Latina presentaba otra
característica que la hacia poseer mayor importancia para Estados Unidos.
Claramente estamos hablando de la localización geográfica en relación con la
potencia Capitalista del Norte, pero el surgimiento de focos Comunistas opositores
a Estados Unidos en Latinoamérica podrían haber repercutido en una propagación
general de la doctrina Comunista en la región. Si esto hubiera sucedido, la
entrada del Comunismo en la totalidad de los países, principalmente en los más
importantes de la región, desde Argentina hasta México hubiese significado para
Estados Unidos, estar rodeado por el enemigo. La rápida visualización de los
norteamericanos y la diplomacia que llevaron a cabo en la región, les dio la
posibilidad de adelantarse a los movimientos soviéticos, con este Plan, sin
embargo creo que es oportuno señalar que aquel territorio tan añorado por los
Estados Unidos durante años, estamos hablando de Cuba, cayó en manos
comunistas. Y esto lo vemos demostrado en la Crisis de los Misiles durante la
administración Kennedy en los Estados Unidos. A lo largo de mis años como
estudiante universitario he escuchado que el resurgir de la Doctrina de la
buena Vecindad que intentó retomar Kennedy con respecto a América Latina fue
pura y exclusivamente para frenar el avance del Comunismo en la región. Si bien
coincido con parte de este planteo, creo que está más asociado al desarrollo de
la Doctrina Eisenhower, con la intervención por parte de Estados Unidos en las
diversas regiones del mundo para mantener el orden. Si bien durante la
administración del demócrata John F. Kennedy fue volcada hacia la diplomacia y
no al uso de la fuerza (en la región), creo que la cúpula de poder de los
Estados Unidos, estamos hablando de los dos estratos más importantes en Estados
Unidos, el sector de las Fuerzas Armadas y el sector financiero de Wall Street,
planeaban llevar a cabo el control de los países de la región mediante un
discurso pro Roosevelt que intentara aparentar cierto acercamiento con América
Latina, mientras se expandía la influencia norteamericana por los diversos
cuarteles de la región.
De todas formas en lo que nos respecta a Brasil, las Fuerzas
Armadas tenían una fuerte influencia de la derecha conservadora brasileña.
Apoyaban la influencia del país (Estados Unidos) en territorio brasileño, y
veían como algo aterrador el acercamiento de los líderes brasileros hacia Fidel
Castro o Ernesto Guevara.
En México encontramos a las Fuerzas Armadas como un actor
que comienza a tomar protagonismo, de todas formas va a seguir relegado a los
mandatos del Partido Revolucionario Institucional. Este se ocupaba
principalmente de expandir la ideología príista
y de impedir el ingreso del Comunismo al país, por lo cual las Fuerzas Armadas
operarían como un cuerpo que hiciera uso de la fuerza cuando la situación
social no podía ser controlada.
Cuando analicé los períodos de Regimenes Autoritarios en
ambos países, pudimos observar una gran diferencia. Básicamente podemos hablar
de Golpe de Estado, levantamiento de las Fuerzas Armadas, cierre del Congreso,
interrupción de la política y un proceso de Reorganización Nacional que
llevaría a los militares al poder para hacer cumplir su propia voluntad, la
cual se creía que era pura y exclusivamente para favorecer las condiciones para
el regreso de la democracia. En México no vimos un Golpe de Estado, ni una
interrupción del sistema político mexicano, ni tampoco la prohibición de los
partidos políticos. Hay quienes se animan a ir lejos e intentan señalar al
régimen del PRI como una autentica dictadura, de todas formas como no pudimos
evidenciar los puntos mencionados, no podemos hablar de la llegada al poder de
las Fuerzas Armadas. El PRI seguía manteniendo el control en todas las esferas
de poder de México. Las Fuerzas Armadas no tenían poder suficiente para
derrocarlo, y a su vez como ya hemos mencionado, estas estaban relegadas al
PRI.
Lo cierto es que en ambos países vamos a encontrar uso de la
fuerza. En Brasil, por parte de los gobiernos de facto con la intención de
mantener la estabilidad social y económica del país, al mismo tiempo que se
impedía la entrada del Comunismo. En México el PRI debió recurrir al uso de la
fuerza para frenar los levantamientos populares experimentados durante las
décadas de los ’70 y los ’80, que exigían una apertura democrática y una mayor
participación por parte del resto de los partidos políticos, a su vez las
Fuerzas Armadas operaron en los levantamientos principalmente contra los
manifestantes universitarios bajo las ordenes del PRI, es decir el PRI permitió
y ejerció la represión sobre la población a través del ejercito.
Las desapariciones, torturas, violaciones a los Derechos
Humanos y el impedimento a la libertad de expresión fueron hechos verídicos
durante estos tiempos, sin embargo no alcanzaron la magnitud ni pueden ser
comparados con el caso brasilero. En parte porque el PRI intentaba mantener
cierta participación política y además porque sabia de las repercusiones que le
podría traer el reprimir fuertemente a la población, en cambio en Brasil debemos
comprender que por un lado las Fuerzas Armadas estaban en el poder y que por
otro a pesar de la oposición de un sector de la población, la oposición
política no podía manifestarse en contra del régimen, porque las consecuencias
eran nefastas.
No solo por el mantenimiento de un gobierno democrático
elegido por el pueblo, el caso Mexicano es diferente al brasilero, si no
también porque en Brasil gran parte de los sectores de izquierda, que fueron
reprimidos durante este periodo, de los cuales muchos buscaron exilio en el
exterior y otros recurrieron a la clandestinidad, llegaron años más tarde al
poder, retomando la lucha que durante sus tiempos fue mas tensa, teniendo
enfrente a hombres armados que prohibían la libertad de expresión.
En mi opinión el régimen dictatorial en Brasil presenta
mayores similitudes con el de Argentina, principalmente porque hablamos de
gobiernos de facto que debieron llevar a cabo una revolución armada para
derrocar a los gobiernos democráticos de turno. Si bien no fue mi país asignado
y además de ser demasiado complejo para desarrollarlo en pocas líneas, el
Proceso de Reorganización Nacional en la República Argentina en comparación con
el de Brasil nos señalan la intención por parte de las Fuerzas Armadas de
frenar el desarrollo político en estos países, intentando luchar contra la
expansión del Comunismo y recurriendo a las mayores violaciones de los Derechos
Humanos, tales como asesinato, secuestro, tortura, fusilamiento, impedimento a
un juicio político justo y prohibición de la libertad, entre otros.
En cuanto a lo económico, durante estos años vamos a
observar que en ambos países la Deuda Externa va a incrementar
considerablemente. En el caso brasilero principalmente era necesario un gran
flujo de dinero para mantener el aparato productivo del país, que si bien
comienza a demostrar falencias durante estas épocas, necesitaba del dinero
proveniente de los préstamos extranjeros.
En México también creció la Deuda Externa y en parte el
dinero proveniente de la misma era utilizado por el PRI para llevar a cabo el
mantenimiento de las industrias estatales y para continuar con la construcción
de carreteras y la ayuda social hacia el sector de la población del cual se
beneficiaba.
En Brasil las consecuencias serían nefastas, el aumento
incalculable de la deuda durante este periodo sería pagado por los futuros
gobiernos democráticos. Dejando en el país una devastadora situación económica
y una inflación que no seria controlada debidamente hasta mediados de los años
’90.
En México la Deuda repercutió fuertemente en las crisis
económicas de los años venideros. Era necesario reducir la inflación y mantener
una moneda fuerte para llevar a cabo las negociaciones a nivel internacional
que México deseaba, al igual que mantener la situación interna para continuar
con la hegemonía príista.
De todos modos el aumento constante de la inflación llevaría
al PRI a grandes cambios y a disputas internas dentro del partido, demostrando
la imposibilidad de revertir la situación económica.
Tanto en México como en Brasil vamos a experimentar una
apertura política. En Brasil había comenzado durante los años de los gobiernos
de facto, con la intención de retomar la vía democrática en el país, mientras
que en México se dio por la presión interna y la lucha por parte de los
partidos hostigados por el PRI para poder ingresar al gobierno.
Las reformas nos señalarían un aspecto clave. El inicio de
un cambio dentro de ambos gobiernos. Las reformas de cada país afectarían tanto
al PRI en México como a los militares en Brasil.
Por un lado la apertura del sistema democrático, remodelando
parte de la Legislación hasta la época que dificultaba el acceso de los
partidos no oficialistas al poder, nos demuestra que tanto el PRI como los
gobiernos de facto en Brasil comenzaron a incluir en la esfera política a
sectores que hasta el momento habían sido opositores. Por otro lado las
reformas electorales, dándole al pueblo una posibilidad más democrática de
elegir a sus gobernantes, determinarían la llegada de nuevas opciones para ambos
países.
Por otro lado en México observamos que el mismo PRI se
renueva, no solo por la llegada de nuevas camadas con ideas nuevas, si no
también por el acceso de gran parte de los universitarios a quienes hasta ese
momento se había reprimido e impedido acceder a la política. El PRI también
comenzaría a renovar su cúpula, las antiguas camadas provenientes de la época
de la Revolución comenzaban a dejar lugar a los jóvenes que se habían formado
en un México completamente príista,
esta será a lo mejor la característica más importante para comprender el
mantenimiento del PRI en el gobierno durante tantos años. Sin embargo el
Partido Revolucionario Institucional atravesaría por cambios en cuanto a la
apertura política, inclusión de sectores opositores, vinculados al ala
conservadora del partido, y sectores liberales y reformistas que buscaban en el
PRI la posibilidad de comenzar a incluir a diversos sectores sociales y
partidos políticos para mejorar la situación del país.
La Crisis del Petróleo repercutió en ambos países, lo cual
creo que es otra similitud entre ambos países. Como ya hemos analizado el
desarrollo de la misma anteriormente, me propongo señalar el porqué de la misma
en ambos países.
Primero y principal México y Brasil han sido junto a la
Argentina, los países más importantes de América Latina, lo cual nos demuestra
que su crecimiento económico se hallaba por encima del de gran parte de los
países de la región, su relación con los países centrales por aquel momento y
sus relaciones comerciales con el resto del mundo eran considerables. De esta
forma en un mundo que comenzaba a girar en torno al petróleo y aun más debiendo
sostener un sistema industrial interno, la necesidad del petróleo aumentaba en
ambos países. Tanto México como Brasil quedaron golpeados por la imposibilidad
de importar petróleo como lo hacían hasta entonces debido a la crisis generada
por parte de ciertos países exportadores de petróleo.
No solo su vinculo directo con estos países complicó la
situación económica en ambos países, si no que también la relación de México y
Brasil con países centrales tales como Estados Unidos, Francia y Gran Bretaña,
les imposibilitó comerciar con estos, ya que al encontrarse en crisis económica
los países mas desarrollados, los mercados tendieron a cerrarse,
imposibilitando así gran parte de las exportaciones de materias primas
brasileras y mexicanas destinadas a esos países.
La industria petrolera local atravesó por una situación
complicada, en parte debido a que no era suficiente para mantener la demandan
interna y debido a la escasa inversión en cuanto a avances tecnológicos
llevados a cabo por los gobiernos de turno.
La Crisis del Petróleo afectó directa e indirectamente a
México y Brasil, repercutiendo en la economía, mediante un aumento de la inflación,
recesión y estancamiento por parte de la producción. A su vez esto generó el
incremento de los préstamos provenientes del exterior.
En cuanto a la lucha social, vamos a encontrar situaciones
divergentes en ambos países. Mientras que en México la lucha por parte de los
grupos opositores al gobierno de turno era exclusivamente contra el PRI, si
bien había sectores que deseaban llevar a cabo una revolución de carácter
comunista y otros sectores que deseaban instaurar un nuevo modelo, la oposición comenzó a luchar contra el partido de turno en
el poder, que llevaba a cabo una política cuestionable en varios aspectos,
tales como el uso de la fuerza, la represión y la poca inclusión política, pero
en todo momento fue contra el PRI.
Mientras tanto en Brasil, me gustaría señalar, la lucha por
parte de los grupos opositores fue mayor. En ella se encontraban militantes de
centro derecha, estudiantes universitarios, profesionales, militantes de
izquierda y defensores de los Derechos Humanos, por lo cual es en mi opinión,
no una lucha contra un gobierno determinado si no contra todo un sistema que se
había implantada en su país para combatir una amenaza externa y mantener la
situación interna. Constantemente escuchamos que durante aquellos años la lucha
se desarrolló entre los militantes de la izquierda revolucionaria y las Fuerzas
Armadas que se encontraban en el gobierno, y es cierto que en gran medida la
lucha armadas se daba entre ambos bandos, pero a su vez otros sectores muy
divergentes entre si mismos luchaban en contra del sistema. Intentar alcanzar
el regreso de la democracia, frenar los asesinatos y torturas, abrir el país al
mundo, hacer respetar los derechos de los ciudadanos, entre varias cosas más.
La lucha se dirigía contra el gobierno de facto, pero intentaba romper con todo
el aparato que habían desarrollado los militares, contra el sistema económico,
contra la represión social, contra el freno político que habían instaurado, por
eso creo que esta es la principal diferencia en cuanto a la lucha en ambos
países.
Comprendo que varias personas puedan sugerir que en México
al luchar contra el PRI se luchaba contra todo el sistema, sin embargo creo que
el sector opositor al PRI no era tan heterogéneo, tan numeroso y a su vez
divergente en cuanto a los métodos de protesta, que los del caso brasilero. Es
para mí justamente este tipo de cuestiones lo que nos continúa demostrando la
diferencia entre ambos casos. En Brasil no se intentaba derrocar a un partido
político para instaurar otro en el gobierno, no se buscaba cambiar los modelos
productivos, si no que se buscaba terminar con un sistema completamente
represivo para con todo aquel sector que no se encontrara de acuerdo con el
régimen, se buscaba reformar verdaderamente a la sociedad brasilera, no se podía
continuar viviendo en una represión constante por parte de quienes se
encontraban en el poder y por ultimo las reformas en cuanto a la economía
fueron más fuertes en Brasil ya que el paso de un modelo al otro provocó
grandes cambios políticos dentro del país.
Me gustaría señalar que los diferentes procesos políticos en
ambos países dieron como resultado futuros diferentes para ambos.
En el caso brasilero, el fin de los gobiernos de facto, dio
como resultado una situación económica catastrófica, un sistema político por
reformar completamente y una sociedad que debía salir de la convulsión
provocada por estos gobiernos. Esto se tradujo a la lucha durante los primeros años por
fortalecer la democracia.
Justamente, este periodo de Consolidación de la Democracia
en Brasil, llevaría a los gobiernos democráticos a focalizar su atención a las
cuestiones políticas y sociales y dejar a un lado la economía.
Ante tal convulsión y las consecuencias negativas que dejó
el régimen autoritario, los partidos políticos que alcanzaran la Presidencia
iban a buscar reformar el aparato legal, reformar el Congreso y diversas leyes
y por último modificar el sistema político brasilero, para alcanzar un mejor
desempeño y funcionamiento de la democracia. Tal es así que en el caso brasilero vamos a evidenciar la
promulgación de la Constitución Nacional del año 1988, demostrando las nuevas
reformas que buscaban llevar a cabo los gobiernos democráticos para asegurar la
estabilidad política y social en el país.
En el caso mexicano vamos a experimentar otra situación. Al
no haber atravesado por el duro proceso militar, México continuó con el PRI en
el poder, y con una oposición que crecía a pequeños pasos.
El PAN comenzaba a sobresalir sobre el resto de los partidos
débiles que pudieran enfrentar al PRI. De todas formas el PRI había constituido
una fuerte relación de poder en los diversos estados del país, haciendo
prácticamente imposible la victoria de un partido opositor. Menos aun la
llegada a la Presidencia.
De esta forma continuando con el PRI en el gobierno, y su
libertad para manejar el país a propia voluntad, este partido comenzó a
focalizarse en aquel sector donde Brasil aún no podía. Estamos hablando del
aspecto económico. Antes de comenzar a desarrollar me gustaría señalar que el
proceso de apertura económica y el camino hacia el neoliberalismo en México se
inició varios años antes que en Brasil, incluso en momentos durante los cuales
Brasil se encontraban en el periodo final de los regímenes autoritarios.
En México el camino
hacia la apertura económica fue acompañado de la histórica relación con el país
vecino, que comenzaba a posicionarse como vencedor en la Guerra Fría, estamos
hablando de Estados Unidos. Podríamos decir que en parte fue debido a la
necesidad de este último de abrir diversos mercados económicos en el mundo,
generando así una proyección de los ideales capitalistas por el mundo,
demostrando el interés de Estados Unidos por fortalecer su modelo en diversos
puntos del planeta, entre los cuales encontramos a Corea del Sur, Tailandia,
Malasia y México, entre otros.
Es aquí cuando surge la importancia de organismos como el
Fondo Monetario Internacional. Esto le permitiría a México cumplir con las
medidas dictadas desde Washington para llevar a cabo el ingreso al liberalismo
de finales del siglo XX. A medida que México se encontraba en una crisis
económica, agravada por una severa catástrofe natural. Sin embargo los intereses del PRI, transmitidos a través de
los Presidentes de México, comenzaron a girar hacia la apertura económica en
México.
Las privatizaciones comenzaron a tomar gran auge, a partir
de este momento la mayoría de las empresas e industrias dentro del país, que
pertenecían al Estado, comenzaron a pasar al sector privado, generando una
nueva relación en la economía mexicana, que iría desde lo financiero hasta lo
laboral.
Como hemos visto en el desarrollo del caso mexicano, las
reformas económicas tomarían gran auge, desde las medidas para el
fortalecimiento monetario hasta la búsqueda por constituir un bloque regional
en donde la reducción de las barreras arancelarias se hiciera realidad, México
atravesó la entrada al neoliberalismo tiempo antes que Brasil.
En parte debido a lo caracterizado con respecto a la
consolidación de la democracia, y por otro lado por la particularidad de la
crisis económica brasilera.
Señalada como la peor economía, con una inflación imposible
de combatir, Brasil tardaría en llevar a cabo la entrada al neoliberalismo.
Entrada que comenzó a gestarse anteriormente en la política y posteriormente en
la economía. Esto lo podemos evidenciar con la llegada al poder de presidentes
pertenecientes a partidos políticos de la derecha brasilera, en mi opinión un
sector antiguamente vinculado con la derecha conservadora, que a partir de
ahora se autoproclamaba como la “derecha liberal”, pura y exclusivamente para
beneficiarse económicamente de un modelo que tardaría en tomar forma.
Con la llegada de estos presidentes, también llegaría un
cambio en cuanto a las relaciones exteriores de Brasil. A lo mejor cambio es
una palabra inadecuada, y debería utilizar fortalecimiento de las relaciones
con el país propulsor de este modelo. Estados Unidos comenzó a fomentar la
entrada de Brasil a este modelo, el cual llegaría más tarde que en México, y a
su vez se iniciaría de forma mas tardía, sin embargo la búsqueda por llevar a
cabo los puntos establecidos en el Consenso de Washington fueron una prioridad
para los gobiernos de turno.
Si bien Brasil había experimentado el surgimiento de planes
económicos para poder reformar la economía, los cuales pueden ser tildados como
neoliberales, creo que la determinación económica de llevar a cabo un modelo
neoliberal en Brasil llegó con el Plan Real. Este Plan que le proporcionaría a
Brasil la salida a la crisis económica, el terminar con la inflación y la
recesión, sería ejecutado correctamente, a lo mejor podríamos criticar a los
gobiernos de turno que no lograron ejecutarlo como los economistas del momento
deseaban, de todas formas con la llegada de Cardoso a la Presidencia, el modelo
se ejecutaría punto por punto.
Parte del plan antiinflacionario y del programa de
estabilización económica, llegaría al igual que en México con las
privatizaciones y la búsqueda por acrecentar el valor de la moneda local. Este
intento sería repetido en diversos países de la región, la búsqueda por
consolidar la moneda a los valores de la moneda ejemplar por aquel entonces, el
dólar estadounidense, acompañarían al Plan Real desde un principio.
Con respecto a las privatizaciones, al llevarse a cabo en
ambos países de forma considerable, entendemos por parte de los gobiernos de
ambos países, el ideal de volcar el sector productivo, anteriormente arraigado
al sector público, a un sector netamente privado, capitalista y con prevalecía
de las empresas multinacionales. A lo mejor esta es otra característica a tener en cuenta, no
solo en Brasil y México, si no también en todo el mundo, las grandes empresas
provenientes de los países mas desarrollados, buscarían con el fin de la Guerra
Fría, la expansión por varios mercados. Podemos mencionar la globalización o al
avance en cuanto a las comunicaciones, lo cierto es que las empresas
multinacionales comenzaron a funcionar de manera más acelerada en todo el
mundo. Con las casas matrices radicadas no solo en el país de origen y de donde
provenía el capital, si no también en los principales países de las diversas
regiones, se formó una red de empresas,
de las denominadas sucursales, que se expandirían rápidamente por las diversas
regiones del mundo. Este fenómeno afecto tanto a África como al Sudeste
Asiático, como a China e India, y por supuesto a Latinoamérica. Podemos mencionar que estas empresas tuvieron un gran auge
durante esta época en la región. No solo presentaban sucursales en
prácticamente todos los países, si no que también tenían vínculos con los
gobiernos. A mi entender el poder de estas era notable, su influencia en la
política para poder alcanzar sus intereses y proyectos afectaron a los
gobiernos de turno, sin embargo no creo que por aquel entonces se lo haya visto
como algo negativo, todo lo contrario, si entendemos que durante ese periodo se
veía como algo totalmente positivo, no solo por la entrada de capitales
extranjeros y una mejoría en lo servicios, si no también por la gran cantidad de
empleados que mantenían estas empresas y el rédito que dejaban para la
economía. Todo esto en contraposición a la debacle de la industria
nacional, las posteriores crisis económicas en la región, seguido de la perdida
de empleos ante la retirada de varias de estas empresas y al giro político en
los países de América Latina. En mi opinión, en Brasil esto perjudicó a la
industria nacional, en una economía donde se valorizaba mas al sector privado
que al nacional, lo cierto es que las transformaciones económicas en Brasil
darían como resultado una mejor situación luego de unos años. En cambio en
México las privatizaciones fueron claramente importantes, de todas formas el
Estado continuó jugando un rol fuerte en el desarrollo económico del país.
El ingreso de Brasil al MERCOSUR representó a su vez la
entrada a una nueva era. La posibilidad de consolidar bloques regionales, en un
continente donde las relaciones y articulaciones multilaterales de los países
con respecto a otras regiones no fueron considerablemente fuertes en los años
previos, mas aun teniendo que atravesar por cambios políticos, cambios
gubernamentales, aparición de gobiernos de facto y duras crisis económicas, de
todas formas la entrada de Brasil al MERCOSUR la veo como un aspecto positivo
en cuanto a la integración regional y al surgimiento de un bloque capaz de
insertarse en la futura economía mundial. Mientras que al ingreso de México al
NAFTA no lo veo como algo positivo, he desarrollado dos veces este tema a lo
largo del trabajo, en donde expongo mis comentarios y donde señalo que el
Tratado de Libre Comercio de América del Norte no es mas que un engaño tanto
por parte de Estados Unidos como por parte de México, que no pudo proyectar sus
verdaderos intereses a través de este, lo cual claramente lo vemos demostrado
en el ideal de constituir una alianza con los países de Sudamérica y de esta
forma alcanzar un bloque regional más amplio.
Sin embargo, creo importante volcarse, para tener una mayor
comprensión de estas temáticas, los apartados correspondientes al caso de
México y de Brasil en cuanto al ingreso a bloques regionales. Al mencionar esto quiero aclarar que ambos fueron puntos
característicos de este periodo que demostraron un cambio en ambos países para
con la economía a nivel regional y la visión a futuro de un nuevo tipo de
relaciones mundiales.
El también mencionado Efecto Tequila luego de la Crisis
Económica por la cual atravesó México, me permite establecer una relación entre
los dos países que estoy analizando. Cuando gran parte de los capitales extranjeros radicados en
México realizaron una fuga veloz de la región, provocaron el desplome de varios
sectores importantes para la economía, al igual que el colapso de varias
empresas y el crecimiento acelerado del desempleo, la crisis repercutió en
Brasil al igual que en otros puntos de la región.
Varias de las multinacionales radicadas en México poseían
casas sucursales en el Brasil, por lo cual con la mencionada fuga de capitales
provocada luego del Error de Diciembre, Brasil experimentó el cierre de
diversas industrias al mismo tiempo que con la salida de grandes flujos de
inversión, el Estado debió cubrir parte del vacío dejado. Tanto para Brasil
como para México, la crisis fue dura y desempeñó un duro golpe para las
economías en crecimiento de ambos países, de todas formas creo que fue por las
políticas implementadas desde los distintos gobiernos, lo cual les permitió a
ambos países recuperarse en el mediano plazo. Además de ambos poseer un amplio
mercado mediante el cual generar una mayor demanda, como mencioné, en el corto
plazo la economía se vio fuertemente afectada con la imposibilidad de generar
una demanda fuerte cuando los salarios de los trabajadores no alcanzaban a
demandar los productos básicos.
El giro hacia la derecha liberal experimentado en la
política mexicana y brasilera nos señalaría caminos diferentes.
En Brasil la derecha lograría mantenerse durante varios
años, no solo con Cardoso se fortalecería si no que con el paso de los años y
los beneficios surgidos del Plan Real, esta lograría la estabilidad del país.
De todas formas ya desde mediados de los años ’90 un sector comenzaba a surgir
en Brasil con aspiraciones al poder Nacional. Los sindicalistas brasileros
ganaron poder durante la década de los ’90, parte de ellos habían sido reprimidos por los gobiernos
militares, en algunos casos teniendo que escapar del país. De todas formas
durante largos años de control nacional por parte de la derecha, autodenominada,
neoliberal, el sector vinculado con la centro izquierda comenzaría a ganar
peso, principalmente representando los intereses de las clases bajas.
Recordemos que durante el modelo neoliberal en Brasil uno de
los grandes beneficiados fue la clase media brasileña.
En México, con la situación generada por el PRI, la apertura
del sistema nos arrojaría resultados diferentes.
El histórico partido opositor (PAN) buscaría conformar una
alianza con diversos partidos opositores al PRI, generando una Alianza Nacional
que pudiera hacerle frente al partido que venia manteniendo el poder durante
largas décadas.
Es así como a pesar
de ir en escala ascendente, el PAN logró obtener gobernaciones estatales luego
el acceso al Parlamento y finalmente comenzó a erosionar el sistema creado por
el PRI. Todo esto fue acompañado por parte de la sociedad, que se sentía sin
cambio y que buscaba terminar con la situación que les imponía el PRI.
Cuando mencioné que en ambos países se arrojan resultados
diferentes, no fue pura y exclusivamente por los regimenes militares en Brasil
y la ausencia de estos en México, agrego la relación del PRI en México. Lo cual
caracterizo a continuación, en comparación con el caso brasileño.
Mientras que las medidas sociales y el apoyo a los sectores bajos
durante largas décadas por parte del Partido Revolucionario Institucional
llevaron a la creación de un sistema fuertemente controlado por este partido
político con la imposibilidad de otras fuerzas de acabar con el e iniciar un
cambio. Lo cierto es que las medidas neoliberales en México inevitablemente
iban a terminar con el PRI. No quiero poner todo el peso sobre las reformas que
se dieron, pero creo que el control del PRI generado durante las décadas de los
’50, ’60 y ’70 le otorgó a este partido la posibilidad de mantener el orden
interno en un momento característico de la historia. Con el fin de la Guerra
Fría, la instauración de un nuevo sistema a nivel mundial, la retirada de la
antigua guardia príista y la llegada
de las nuevas camadas al partido, sumado al nuevo modelo que afrontaba México y
a las reformas solicitadas por la oposición y parte de la sociedad, el PRI
comenzó a entrar en decadencia. Imposibilitado de mantener un sistema política
totalmente moderno, creo que la supuesta transformación del PRI durante los ’90
en un partido pro neoliberal fue tan solo una mascara para llevar a cabo
reformas que creyeron iban a lograr mantener la hegemonía del partido. De todas
formas era necesario para continuar con este modelo y para desempeñar un México
protagonista de la economía mundial en el siglo XXI, la llegada de la centro
derecha al poder. ¿Qué mejor manera de hacerlo que teniendo a una oposición
centrada en este sector y que pedía participación desde hacia décadas? Las
pequeñas victorias del PAN que luego se transformaron en victorias nacionales,
fueron desprevenidas para un PRI que creía mantener su hegemonía histórica en
un país que estaba cambiando. Los mismos errores del PRI generaron el
descontento por parte de la gente y la necesidad de cambiar de orientación. La
llegada del Partido Acción Nacional fue en el momento justo y de la forma
correcta. Creo que el PAN había
consolidado una fuerte lucha desde los años ’90 para llegar al poder, los
cambios a nivel interno y externo terminaron de erosionar a un PRI que no podía
revertir la situación, por lo cual el PAN, con todos los cuestionamientos que
le realizo en este trabajo, llegó por las mismas fuerzas de los cambios de
sistema. Todo fin de una era es proseguido por el comienzo de otra. Al mismo
tiempo que si no hubiera estado el PAN, el cambio hubiera llegado igual de la
mano de otro partido. Es un caso similar a una temática discutida en clase con
respecto al triunfo de la Alianza en Argentina para la Presidencia de 1999.
Cuando terminamos señalando que si hubiera estado otro partido en el gobierno,
el fin de un modelo que había llegado hasta 2001 a duras penas, hubiera
existido igual. La debacle de 2001 estaba señalada y era irremediable esté
quien esté en el gobierno. Lo mismo opino del fin de la hegemonía del PRI
(momentánea) en México. La victoria del 2000 hubiera tomado lugar de todas
formas. Se que se puede señalar que el PAN generó una larga lucha desde varios
años atrás, de todas formas si la hubiera realizado otro partido orientado hacia
la centro derecha el fin de los 70 años de príismo
hubieran llegado igual, el PRI no podía mantenerse por mucho tiempo más en el
gobierno.
En contraposición encontramos la situación brasilera. En
donde no podemos señalar un giro hacia la centro derecha, si no hacia la centro
izquierda. En la Unidad donde destaco la llegada de Lula al poder, se
encuentran puntualizadas las reformas que dieron lugar a la llegada de un
gobierno con tendencias socialistas en Brasil. Luego de los largos años de
neoliberalismo implementados por la derecha brasilera, la centro izquierda
había comenzado a generar un cambio puertas adentro del país. Las
movilizaciones y el rol de los sindicatos llevaron a que mismo durante los ’90
gran parte de la clase baja brasilera se volcara hacia los partidos políticos
con mayores políticas sociales y acción popular. Es así como Lula llegó con
apoyo a las diversas elecciones que enfrentó durante los ’90. De todas formas
creo que no era el momento apropiado para el triunfo de la centro izquierda en
Brasil. El agotamiento de un modelo provocado por el Capitalismo de Cardoso
culminó en la articulación de estos partidos de masas que buscaban la igualdad
social en Brasil. A su vez vinculados con los sindicatos y con los trabajadores
de las diversas industrias de Brasil, los partidos populistas de centro
izquierda ganaron el apoyo necesario. Por lo cual considero que el giro hacia
la centro izquierda llegó en conjunto al retiro de la centro derecha en Brasil,
con la salida de Cardoso no se produjo un cambio en la economía brasilera, de
hecho Lula mantuvo gran parte del sistema económico creado por su antecesor,
sin embargo la caída y el auge de uno y otro sector lo encuentro más como una
transición, con el mantenimiento de varios aspectos, ahora orientado hacia una
fuerte política social por parte del Estado, en donde el apoyo a los sectores
menos beneficiados pueda generar crecimiento para el país, lo cual se alcanzó.
Cuando en las últimas elecciones presidenciales de Brasil,
se proclamaba a Serra como un posible ganador frente a Dilma, la realización de
este trabajo me permitió observar que el famoso delfín de Cardoso no podía ganar las elecciones y la victoria de
Dilma era un hecho. No por la salida de un gran Presidente como fue Lula ni
tampoco por la popularidad de Dilma, si no porque el momento de la derecha
brasilera llegó a su fin, Serra y sus ideales heredados de Cardoso se
encuentran en el pasado de Brasil, la realidad de Brasil hoy en día es que la
centro izquierda se afianzó en el poder y lleva el rumbo de la política
nacional.
Desde los inicios del trabajo hemos experimentado cambios en
ambos países, varios similares, otros completamente diferentes. Con modelos
económicos y políticos particulares, con transiciones de poder y surgimientos
de diversos sectores, Brasil y México han ido desarrollando su historia por
caminos relativamente similares. A lo mejor por el mismo camino que transitan
gran parte de los Estados Latinoamericanos desde nuestras independencias.
Si bien evidenciamos diferentes procesos en cada país, dado
por su historia y por características propias de cada Estado - Nación, podemos
observar que varios procesos políticos, económicos y sociales se reiteran con
grandes similitudes en los diversos países de nuestra región. No es casualidad
que actualmente los gobiernos de centro izquierda acaparen el poder en gran
parte de Sudamérica, como lo hicieron los de la derecha con tendencias
neoliberales durante la década de los ’90.
América Latina presenta cierta homogeneidad en cuanto al desarrollo
de la historia. En parte debido a un origen común, a las relaciones entre los
estados o bien debido a la unión que caracteriza a las Naciones Latinas. De
todas formas en lo que respecta a los países que me fueron asignados podemos
observar que el resultado actual es muy divergente el uno del otro. Brasil
orientado hacia la centro izquierda y México con una tendencia mayor a la
centro derecha, a pesar que ambos se posicionan como economías emergentes y
futuros países desarrollaos.
Las diferencias y similitudes están presentes a lo largo del
trabajo, lo importante es comprender por qué ambos países tienen una realidad
distinta. México no tendría un Calderón hoy en día, si no hubiera tenido 70
años de príismo, Brasil no tendría un
Lula hasta el día de hoy, Dilma a partir de 2011, si no fuera por el rol de los
políticos de la derecha brasileña durante los años ’90 o por los Regímenes
Militares. Esto nos permite no solo comprender la situación actual de ambos
países, si no que también comprender que los procesos políticos y económicos no
surgen porque sí, si no que están claramente relacionados con el modelo
anterior. La historia de ambos países se ha determinado de esa manera, las
analogías son infinitas, sin embargo lo importante es comprender que todo
proceso tiene su justificación.
Hay quienes se atreven a señalar que en el caso brasilero en
un futuro vamos a experimentar el retorno hacia la derecha conservadora. Por el
mismo agotamiento que producirá la centro izquierda, de todas formas creo que
el modelo brasilero va a mantenerse por unos años. Al mismo tiempo que mientras
muchos hablan del regreso del PRI en México, creo que el PAN tiene bastante por mostrar en estos años,
lo cual le hará esperar al PRI su tan ansiado regreso.
La historia habrá de juzgar nuestros trabajos como analistas
internacionales, y a su vez determinar el curso de los procesos en América
Latina, tal como lo viene desarrollando desde comienzos del siglo XIX.
UN BREVE COMENTARIO FINAL DEL AUTOR.
Habiendo
analizado todas las hipótesis y desarrollando los conceptos dados en clase se
continuará con el análisis final de la idea de este trabajo.
¿La realidad
actual de Brasil y México tiene relación con los procesos que se han ido
desarrollando a lo largo de sus respectivas historias? ¿El posicionamiento de
Brasil y México como grande potencias Iberoamericanas tiene relación con lo
ocurrido hace más de 100 años? ¿Las instituciones, corporaciones, sistema
electoral y sistema política, sistema económico y su sociedad son el fruto de
cambios constantes dentro del país? ¿Es posible mencionar a estos dos países
como futuros actores principales de la política y economía mundial?, de ser
así, ¿podrán estar a la altura del resto de las potencias mundiales? ¿Su
crecimiento a nivel internacional beneficiará a la región?
Es innegable que
los procesos analizados tienen repercusiones en la actualidad. Todo país debe
su presente a lo que debió atravesar en el pasado. Latinoamérica presenta
muchas similitudes y es una región homogénea. Centroamérica y Sudamérica
presenta muchas diferencias, pero las similitudes las podemos encontrar
constantemente. En parte estos dos países que se han analizado juegan un rol
muy importante dentro de la región. Siendo grandes comerciantes del resto de
los países y permitiéndonos tener un mejor posicionamiento a nivel mundial. La historia de ambos países,
los cambios en los procesos y la
influencia extranjera lograron conformar la realidad actual de México y Brasil.
Nuestras raíces hispanas nos permiten estar
unidos en todo tipo de situaciones. Por lo cual encuentro factible la
posibilidad de un crecimiento en toda la región. Hoy en día se hablan de un
montón de problemáticas en los países de la región. De acuerdo a los países que
me tocaron, puedo mencionar el crimen organizado y los carteles en México como
también el Primeiro Comando Central
en Brasil y la crisis social que se encuentran en las favelas. La constante culpabilidad hacia Estados Unidos y las
potencias extranjeras nos llevan a una ceguera que no nos permite observar que
a medida que nosotros culpamos a muchos por las falencias actuales, el resto
del mundo avanza. ¿Cómo es posible que regiones como el sudeste asiático hayan
avanzado al punto de crear uno de los bloques económicos más importantes que tendrá
el mundo en un futuro, mientras que Latinoamérica con todo el potencial que
posee parece permanecer siempre en la misma situación?
Debemos dejar de lado una gran cantidad de
cuestiones que llevan a ese atraso, en parte creo que es cierto que Estados Unidos
ha tenido una injerencia nefasta en nuestra región, pero ¿de qué sirve volver
al pasado y querer culpar a alguien que no se interesa en el bien de la región?
En mi opinión el
futuro de la región dependerá en gran parte de estos dos actores y de Argentina
y Chile. Es importante que el resto de los países se unan mediante acuerdos y
fuertes relaciones para no quedar en el camino. La importancia de un Organismo
Supranacional que brinde no solo beneficios en lo económico sino también en lo
legal y político podría fortalecer a toda la región. Que los países menos
beneficiados busquen en países limítrofes de peso un aliado fuerte que les asegure
el progreso a largo plazo. Tal como lo hicieron Corea del Sur, Singapur,
Malasia y Vietnam. La tutela de países líderes a nivel mundial les permitirá
crecer y consolidar un bloque económico y legal que pueda estar a la altura de
la Unión Europea o la Asean. Creo que todo esto es posible debido al
sentimiento de pertenencia regional que posee América Latina. Me ha tocado
estar en encuentros bi regionales y presenciar conferencias en donde los países
latinoamericanos han estado presentes, y es innegable la postura que todos
presentan, la unidad regional.
Un bloque que
pueda articular a potencias como Argentina, Brasil y México donde también se
encuentren las mayores reservas de bienes y recursos naturales (importante
variable para el futuro) y donde primero se busque el beneficio interno y luego
hacia otros bloques, sería la clave para el crecimiento de la región.
Por supuesto que
muchos tendrán que ceder para el progreso de otros e incluso arriesgarse por
los demás, pero me pregunto si acaso ¿ese
ideal de unidad regional, con las potencias locales como actores principales,
no será el mismo que buscaban nuestros padres fundadores?
Tomás Vera Ziccardi.
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*1= El presente trabajo fue presentado por el Señor Tomás Vera Ziccardi ante la Cátedra de Sistemas Políticos Comparados Latinoamericanos en el año 2010. Fue editado y publicado en su sitio web a fines del año 2012 por motivos remitidos a los derechos de autor y al vínculo con la cátedra universitaria ante la cual fue presentado el trabajo.
*2= La totalidad del presente trabajo es obra material e intelectual del Señor Tomás Vera Ziccardi. Los derechos de dicha obra quedan reservados a TVZC por expreso pedido del autor.