martes, 26 de octubre de 2010

Análisis del trabajo "Back Rooms or Ballot Boxes?" de Miguel De Luca, Mark P. Jones y María Inés Tula.

¿CUARTOS TRASEROS O LAS URNAS?





Nominación de Candidatos en Argentina.







Miguel De Luca.


Mark P. Jones.


María Inés Tula.








El análisis llevado a cabo por De Luca, Jones y Tula nos habla acerca de la nominación de candidatos dentro de las democracias. La nominación de candidatos es vista como un mecanismo de funcionamiento a la hora de las elecciones intrapartidarias que repercute en la política y nos demuestra como funcionan los partidos a puertas adentro y donde se focaliza el poder. A su vez nos permite ver la estructura organizacional del partido y comprender las relaciones de estos con diversos actores y su desenvolvimiento en distintos escenarios. Ya sea su desarrollo a nivel provincial, la influencia de los Gobernadores provinciales o la posibilidad que el partido sea el mismo que se encuentra en la presidencia de la Nación, la nominación de candidatos se ve altamente influenciada por muchos conceptos que desarrollaré a continuación, con lo cual los autores nos quieren demostrar que la nominación de candidatos nos da varias referencias para comprender los sistemas políticos y como los partidos se desenvuelven en el mismo.
Desde un primer momento se hace referencia al Método Comparativo. Los autores consideran que este método es difícil de aplicar a la nominación de candidatos para establecer lazos entre democracias que son muy divergentes y presentan diferentes características propias de cada Estado Nación. Por lo cual este análisis se va a remitir únicamente a la nominación de candidatos en la Cámara de Diputados de la República Argentina entre los años 1983 y 2001.
Me gustaría aclarar que a lo largo del trabajo los autores diferencian y hacen mención a dos tipos diferentes de selección de candidatos. Por una parte encontramos a la Primaria Directa, que también denominan como urnas, es decir cuando hay dos ó más listas que compiten en una primaria para conseguir imponerse a nivel partidario (es decir dentro del partido) y que pueden ser ejecutadas por miembros y afiliados del partido o también por parte de la ciudadanía a la cual se llama a votar. Del otro lado se hace mención a los Cuartos Traseros. Comúnmente denominados acuerdos de élite. Básicamente son los acuerdos que se establecen entre miembros del partido para seleccionar a quienes van a ser los candidatos, en lugar de hacer elecciones primarias. Podemos decir que una cúpula, o en los casos de determinados partidos, u caudillo o figura hegemónica, selecciona directamente a los candidatos.







Para comenzar a desarrollar su trabajo los autores hacen mención a como está organizado este último.  Para esto dividen el trabajo en cinco partes. En la primera se encargan de hacer una introducción a las instituciones políticas argentinas. En segundo lugar analizan los partidos políticos argentinos, categorizando y agrupando partidos en las 4 categorías que otorgan. En tercer lugar explican los métodos para la selección de candidatos. Luego realizan una explicación para el uso diferencial de las partes a nivel de distrito de las primarias frente a los acuerdos de élite para elegir candidatos. Finalmente realizan una conclusión de su trabajo y las implicancias futuras que puede alcanzar.



Las instituciones políticas en la República Argentina.



Los autores van a realizar una breve introducción a como está conformada la República Argentina. Explican la división del territorio en 23 provincias más una ciudad autónoma, distinguen que luego de la última dictadura militar y con la vuelta de la democracia en 1983 el país posee dos cámaras que derivan del poder Legislativo de la Nación, la Cámara de Senadores y la Cámara de Diputados. Pero como mencioné al comienzo el análisis se centra en la Cámara de Diputados. Una Cámara que pose 257 miembros elegidos en los 24 distritos que dividen al territorio, que son elegidos por un período de tiempo de cuatro años. Donde la mitad de la Cámara se renueva cada 2 años por lo cual los distritos renuevan la mitad de sus miembros en ese lapso de tiempo. Las provincias poseen un mínimo de 5 miembros, que aumenta de acuerdo a su población, es decir aquellos distritos que tengan un alto grado de población van a poseer un mayor número de diputados para la Cámara, pero jamás pueden ser menos de 5.
Al finalizar esta primera parte del análisis los autores nos van a ir introduciendo en un tópico importante de su investigación. Mencionan que cada provincia tiene su propia constitución y elige directamente a sus gobernadores. Siendo estos últimos de destacada importancia en el aspecto de la política local y a su vez nacional, estableciendo relaciones y gestionando la política pública a nivel provincial.



Los partidos políticos en Argentina, desde 1983 hasta 2001.



Como mencioné al comienzo, los autores llevan a cabo una división grupal entre los diferentes partidos políticos del país. Dando como resultado cuatro grupos. En el primero encontramos a los dos partidos políticos que han acaparado el escenario político argentino desde fines de la Segunda Guerra Mundial. Estamos hablando del Partido Justicialista y de la Unión Cívica Radical.
El Partido Justicialista fue fundado con Perón posteriormente a la disolución de las organizaciones que apoyaban su candidatura presidencial de 1946. Durante los primeros años del partido, este carecía de una estructura organizacional, siendo el partido básicamente referenciado y organizado por su líder. Perón prácticamente elegía a los candidatos del partido para cargos públicos. El partido siempre se caracterizó por una identidad colectiva muy fuerte y por un bajo nivel de institucionalización y de mecanismos para la selección de sus candidatos y líderes. Aquí es cuando entra en juego la separación entre Listas Oficiales y Listas No Oficiales. Pero luego de la década de los ‘80s el partido comenzaría a tener una mayor institucionalización, de la mano del sector Renovador del partido.
La UCR a diferencia del PJ, siempre se caracterizó por un alto grado institucionalización y por un fuerte aparato interno. A su vez se creó y consolidó en 1890, siendo un partido mayoritariamente representante de la clase media argentina que reclamaba mayor participación política dentro de un país que era controlado políticamente y económicamente por la oligarquía. Este período conocido como el Suicidio de las Oligarquías le permitió al partido afianzarse en la escena política argentina. En contraparte con el PJ la Unión Cívica Radical no se caracterizó por líderes fuertes que entusiasmen y llamen a las masas.
Si bien son partidos diferentes, para los autores encajan dentro de este primer grupo debido a su peso y a su influencia y representación dentro de la sociedad argentina. Son los partidos que mayor presencia tienen en los municipios y que poseen el mayor número de afiliados, ganando de esta forma el 82% de las bancas para diputados desde 1983 hasta 2001, dejando el 18% para el resto de partidos políticos del país. Por otro lado entre ambos partidos poseen el 83% de las victorias en gobernaciones. Demostrando de esta forma su hegemonía a nivel provincial y de distritos.
Los autores enuncian su segundo grupo, en donde encontramos aquellos partidos minoritarios que alcanzaron presencia nacional, pero que luego de tres o cuatro elecciones desaparecieron debido a su carencia de una base fuerte y sólida para poder afianzarse en el sistema. Aquí encontramos a partidos tales como el Partido Intransigente, Frente Grande o el Frente País Solidario (FREPASO).
En el tercer grupo se encuentran los denominados partidos provinciales, los cuales tienen un alcance local y generalmente tienden a actuar como partidos opositores a los grandes partidos. Estos partidos carecen de una estructura organizacional fuerte y generalmente tienen tendencias a ser donimados  por una figura o líder que se termina convirtiendo en la cara visible del partido, llegando en algunos casos a tener él más peso que el mismo partido. Aquí encontramos a partidos tales como Acción Chaqueña.
En el último grupo se encuentran los partidos que no son relevantes durante las elecciones y que no alcanzan a influir en la política nacional. Los autores van a realizar y focalizar su estudio con los tres primeros grupos de partidos, por lo cual este último queda dejado de lado.



Métodos para la selección de candidatos.



Los autores mencionan que en la Argentina se encuentran en vigencia una Ley de Partidos Políticos que obliga a los diversos partidos del país a celebrar elecciones intrapartidarias en determinado período del año. No son para cargos públicos, si no para elegir candidatos puertas adentro del partido. Hay tres métodos para elegir candidatos. Del primero ya hablamos al comienzo, son los acuerdos de élite. Pueden ir desde la imposición de una lista por uno de los denominados caudillos provinciales hasta un acuerdo entre los miembros del partido para designar candidatos. Es un mecanismo para elegir a los candidatos sin primarias directa que permite posicionar como candidatos a aquellas personas más afines al líder o a la cúpula como también a aquellos que representen de mejor forma los intereses de quienes dirigen el partido. Son por así decirlo acuerdos de oficina, pactos entre determinados miembros del partido.
Luego tenemos el montaje de elecciones o elección de asamblea. Aquí la asamblea del partido provincial elabora listas para que los delegados del partido y la asamblea elijan a los candidatos que se encuentran dentro de esas mismas listas.
En la tercera categoría encontramos aquellos casos en los que dos o más listas compiten en una elección primaria directa. Pueden ser tanto participes de las mismas los afiliados y miembros del partido como también se puede llamar a la ciudadanía a formar parte de las elecciones. Como ya se mencionó son elecciones intrapartidarias, es decir están remitidas al interior del partido para poder obtener los candidatos.
Luego de la categorización los autores señalan algunas características propias de la Argentina que repercuten en los mecanismos mencionados con anterioridad. En primer lugar encontramos al aparato que es la maquinaria que permite el funcionamiento de las listas a nivel local y provincial en donde interactúan los punteros políticos, quienes son vecinos de un barrio o localidad y mediante acuerdos con miembros del partido o del gobernador hace de interlocutor entre el partido y la ciudadanía, generándole mayor cantidad de votos al partido y beneficios de índole económica, social y política a los implicados bajo el ala del puntero. Generalmente en el caso argentino encontramos a los barra-bravas. Los cuales forman parte de las hinchadas de los clubes de fútbol que poseen importancia nacional pero a su vez local y barrial, de estas formas pueden ejercer mediante métodos propios el control o la influencia para darle apoyo y votos a determinados líderes y/o partidos. 



Distinción entre uso de elecciones primarias y acuerdos de élite.



En la contraposición de ambos métodos los autores van a evidenciar distintos factores que influyen en los partidos para optar por uno u otro método. Para ellos hay varias características que van a influenciar a la hora de elegir entre alguna de las opciones, generalmente y esto lo veremos cuando llegue al final del trabajo, para los autores algunas de estas características son propias de la Argentina, lo cual hace complejo de entender el funcionamiento de la arena política argentina, tal es así que dentro de las conclusiones finales que se dan en la última sección del trabajo encontramos características propias de la división territorial argentina, de los actores propios de este país y del poderío que poseen los distritos y provincias.
Desde un comienzo se hace referencia a los gobernadores. El poder que poseen estos dentro de su jurisdicción y la influencia dentro del escenario político local es bastante amplio. Puede influir en las elecciones de candidatos de los partidos para su beneficio y pueden negociar con rivales para obtener ganancia propia. A continuación desarrollo las principales características que atribuyen los autores a los gobernadores.
En primer lugar tienen poder institucional y político, ya que les es conferido por la constitución provincial, que a su vez los convierte en el actor clave para la reelección de candidatos. Esta reelección la voy a mencionar más adelante, pero sí es clave para comprender su influencia a nivel estatal como a nivel partidario.
Los gobernadores también pueden ofrecer cargos públicos que beneficien a las familias de los punteros políticos y puestos en la administración pública para políticos.
Poseen fuerte influencia sobre la política pública, como mencionan los autores. Con programas públicos pueden cumplir grandes áreas tales como la Saluda, la Economía local y la Educación. Otorgando concesiones y beneficios en estas áreas pueden garantizarse gran apoyo de la población, lo cual directamente influye en los lazos con la sociedad y una futura posibilidad de ser reelegidos.
Los autores hacen mención que generalmente, el Gobernador es el presidente del partido del partido local, o lo supo ser o acaparó un cargo importante del partido más poderos de su provincia, por lo cual su influencia política aumenta considerablemente, sumándole también que posee el respaldo de un partido político que le genera propaganda, votos, confianza y apoyo de la sociedad.
De esta forma el Gobernador puede imponer su candidatura y coactar adversarios para disminuir la influencia de otros partidos y posibles opositores.
En esta parte del trabajo, los autores se encargan de de señalar que de las 24 provincias o distritos (si sumamos la Ciudad Autónoma de Buenos Aires) en 18 los gobernadores pueden ser reelegidos. De estas 18, 14 tienen dos períodos consecutivos, por lo cual se aseguran continuar al frente por cuatro años más y continuar haciendo más poderoso su aparato.
Es claramente evidenciable la importancia que poseen los Gobernadores y como articulan y concentran poder para asegurarse su continuación en el cargo. Los caudillismos demuestran como está determinado el poder en las provincias y como elecciones tras elecciones se continúan imponiendo los mismos nombres, generando la identificación de una provincia con su respectivo gobernador y líder político, lo cual como vamos a ver más adelante genera repercusiones a la hora de elegir los candidatos en los partidos políticos.
También se hace mención en el trabajo a la posibilidad que el Presidente de turno forme parte del partido del gobernador o de alguna provincia. En este caso va a haber un mayor apoyo a la provincia, otorgándole mayores recursos que luego le van a facilitar al partido obtener la victoria a nivel provincial y a su vez le asegura al gobernador continuar al frente por años más. Pero por otro lado, al mencionar la Cámara de Diputados, de acuerdo a este caso señalado, el presidente va a obtener mayor cantidad de diputados que apoyen sus políticas y proyectos, otorgándole más poder al presidente y estableciendo una relación Poder Ejecutivo-Provincia muy fuerte.
Los autores mencionan dos casos interesantes a tener en cuenta. En primer lugar hacen referencia a las elecciones del año 1983. Luego de varios años de dictadura militar, en donde varios políticos de diversos partidos y sectores sociales fueron perseguidos y secuestrados, el aparato político se fue desgastando. A pesar que se anunciara que se reestablecería el orden para facilitar el buen desempeño en la arena política los partidos y los actores políticos se vieron fuertemente debilitados. Los autores señalan que en casi un año los partidos debieron reorganizarse, llevar a cabo campañas, armarse a nivel de distrito, provincial y nacional y buscar líderes, por lo cual los arreglos y la selección de candidatos no serían por elecciones primarias, si no que principalmente serían más de índole de acuerdos de élite.
Luego se hace referencia a la alianza entre la UCR y el FREPASO. Si bien se considera y toma en cuenta el carácter organizacional que posee la UCR y su aparato burocrático en todos los niveles, que también se puede evidenciar en el FREPASO, en aquel momento, era de esperarse que la selección de candidatos sea mediante elecciones primarias, justamente debido a lo enunciado con anterioridad. Pero al haber divergencias entre ambos partidos y al tener en cuenta que una alianza es una alianza y no una fusión que dure por siempre, ambos lados no estaban totalmente decididos a apoyar y defender las candidaturas del otro, por lo cual la elección de posibles candidatos también fue dada por acuerdos de élite.



Sección final: Cruce de variables y conclusión.



Para demostrar y explicar los conceptos que mencionaron a lo largo del trabajo, los autores producen una asignación de valores de cero a uno para cada uno de los conceptos y puntos importantes que fueron analizando. A continuación enseñan unas tablas en las cuales se ha producido el cruce de variables y encontramos diferentes valores del cero al uno para cada uno de los conceptos. También observamos resultados negativos y márgenes de error que permiten hacer e enfoque todavía más aproximado. Lo importante es ver que nos dicen las tablas, que deriva de ellas. De esta forma podemos observar que la oposición provincial influye fuertemente en la selección de candidatos mediante elección primaria. A su vez al haber analizado los casos de gobierno provincial y presidencial, entendemos que cuando el partido se encuentra en el orden presidencial no hay demasiadas probabilidades que elija mediante elecciones primarias. Los partidos minoritarios provinciales tienen pocas posibilidades de elegir mediante elecciones primarias debido a su precaria organización y estructura y a su vez a la importancia de sus líderes.
De acuerdo a los dos partidos más importantes que encajan dentro de la primer categoría o grupo, vemos que el Partido Justicialista cuando se encuentra a nivel provincial en la oposición tiene el 61% de probabilidades de elegir sus candidatos por elecciones primarias. Pero cuando el PJ se encuentra en el gobierno provincial solo hay un 21% de probabilidades que haga la selección de candidatos mediante elecciones primarias.
Por otro lado la UCR cuando se encuentra en la oposición provincial posee un 69% de probabilidades de elegir sus candidatos mediante elecciones primarias, mientras que en los casos que se encuentra en el gobierno provincial de turno su porcentaje de probabilidades de elegir sus candidatos mediante elecciones primarias decae ampliamente al 27%.
De esta forma vemos el valor que tiene encontrarse en la oposición y como una vez en el gobierno las selecciones de candidatos por elecciones primarias queda por así decir rezagado o dejado de lago, primando otros métodos como por ejemplo los convenios de élite. A su vez se rompe en cierta forma con el mito que la UCR al tener tradición organizacional y un fuerte aparato burocrático va a tender siempre a elegir sus candidatos mediante elecciones primarias, como también se demuestra que el PJ actúa de la misma forma que la UCR cuando se encuentra en el gobierno, y relativamente parecido al encontrarse en la oposición. Con esto no quiero decir que copia o imita, si no que es un acto propio de los partidos al encontrarse en el gobierno, lo cual puede incrementar las posibilidades que esas elecciones de élite sean para beneficiar a aquellos líderes provinciales que son funcionarios o allegados de los Gobernadores y de esta forma sean colocados como candidatos. Por lo cual ahora queda representado y demostrado de mejor manera la influencia de los Gobernadores y los partidos que se imponen en las provincias.
Por lo cual vale aclarar que para comprender el funcionamiento de la política argentina hay que localizarse en el nivel provincial y señalar todas las características que se desprenden en las provincias.
Por otra parte hay que visualizar la importancia del partido que se impone y gana en la provincia, como a su vez el rol del Gobernador y su relación con el partido, la oposición y los sectores de la sociedad.
Resumiendo lo explicado hace instantes, los partidos en la oposición son más proclives a celebrar elecciones primarias que los partidos en el gobierno.
También hay que mencionar que las alianzas entre partido políticos reducen las posibilidades que las elecciones de candidatos sean por vía primaria.
Cabe aclarar que cuanto más pequeño sea el partido, más fuerte sean los personalismos de sus líderes y menor sea la estructura organizacional que posea, es más probable que no elija mediante el método de elecciones primarias.
Por último los autores señalan que debido a las olas democratizadoras y al aspecto positivo con el cual las sociedades visualizan a las elecciones primarias dentro de las democracias, en los tiempos por venir las elecciones para candidaturas van a aumentar su número mediante el método de elecciones primarias, y este es un concepto que debe hacerse prevalecer.



                                                                                              Tomás Vera Ziccardi.